[Italia fascista x Imperio Japones] [Terminada.]

Capítulo 19 Con rasguños y arañazos + ruidoso y exagerado (2/2)

—Acá ta la parte 2 para vainillita___u36. Es que, se que no debería tener favoritismo pero me car muy bien ;-;—

—.......Mejor sigamos con el capítulo antes que me funen—

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Cierto fascista se dirigía al cuarto para tomar una larga y profunda siesta para tratar de olvidar su dolor de caderas, pero era seguido por aquel imperio que tan lujurioso era.

Al llegar a la habitación lo primero que hizo el menor fue sacarse su saco y tirarlo al suelo al mismo tiempo que se lanzaba sobre la suave y cómoda cama

I.F: Ya dime que quieres —Dijo al sentir la mirada del nipón encima de el—

I.J: Sabes?~ Yo no estaba muy consiente de lo que sucedió ayer por la noche~ Que tal si me ayudas a recordar?~~ —Decía en aquel noto lujurioso que hacía enrojecer al fascista de solo escucharlo—

I.F: Acaso tengo otra opción?? —Pregunto sabiendo desde un principio su respuesta y confirmando sus sospechas ante el movimiento de cabeza del imperio en modo de negación— Si lo hacemos, me dejarás dormir?? —El japonés asintió seguido de un suspiro de parte del de ojos esmeraldas

Primero fueron algunos besos tranquilos que pasaron a ser salvajes aumentando la  temperatura en el cuerpo de ambos, pero especialmente en la del mayor, luego algunos chupones y mordidas como marca territorial tanto como del italiano como del japonés mientras se despojan de las prendas que comenzaban a sobrar, seguido de la fricción entre sus miembros haciendo más excitante el ambiente entre ambos

Los pequeños suspiros y jadeos del menor comenzaban a llegar hasta los oídos del de ojos escarlata. Y un par de embestidas fueron suficientes para sacarlen grandes gemidos al italiano debido al placer y un poco de dolor que le provocaba el miembro del japonés. Pero el fascista ni siquiera le prestaba atención a la segunda sensación que le provocaba el dolor de caderas. Eran opacados por el enorme placer, al Fascista le encantaba sentir como la polla del Imperio salía y entraba de su interior provocando un gran placer en todo su cuerpo. Y al Imperio le encantaba sentir como las paredes internas del Fascista apretaban su miembro mientras follaban. No importaba cuántas veces vieran las mismas expresiones, la misma persona y sintieran las mismas sensaciones, por que cada vez para ellos se sentían como si fuera la primera vez. Algo que nadie les quitaría.

Pero el dolor comenzaba a hacerse más notorio, sacando del Fascista gemidos aún más agudos haciendo que se sujetará de los hombros del Imperio, enterrando sus uñas en estos logrando sacar pequeños, casi imperceptibles hilos de sangre fresca.

Estuvieron así unos 20 o 30 minutos, hasta que el Imperio finalmente le dieran las ganas de correrse dentro del Fascista sacando un gemido algo exagerado en opinión del menor para dar fin a una de sus muchas demostraciones de amor mutuas, dando inicio a una más inocente. Una en donde ambos se arropaban con las sábanas de la cama mientras se abrazaban quedando en la famosa posición de la cuchara callendo en un largo y profundo sueño

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—Y? Que les pareció?? Demasiado cursi???—