—9:04 A.M
El nazi se acababa de levantar para ir a hacerse un sandwich como desayuno acompañado de un té o un café. Normalmente no se encontraba nadie a esa hora en la cocina a excepción de el, aunque esta vez se encontró con el italiano tomando una taza de café acompañado de unos cuantos wafles
—Que mierda te paso ahora? Normalmente te despiertas a las 11— Dijo con algo de sueño comenzando a prepararse un café para tener mas energía
—No tengo mucho sueño. Además que hoy es la boda por lo que quiero prepararme mentalmente— Respondió comiendo uno de los wafles
—Cierto. A que hora me dijiste que sería la ceremonia?— Cuestiono sentándose en frente de el con su taza de café recién echa y un pan con queso
—A las 3:30 de la tarde. Pensamos que sería mejor al aire libre, después de todo, el cura a apenas te ve a ti o a URRS les tira agua bendita— Soltó algunas risas junto al nazi para luego tomar un largo sorbo de su café
—10:02 A.M
—Como te sientes?— Pregunto el soviético que se acababa de levantar, viendo como el italiano se notaba un tanto nervioso
—Nervioso. Tengo ganas, como de apretar o romper algo— Normal, de seguro era debido a la ansiedad que se estaba acumulando en su sistema por los nervios de que su gran día había llegado
—Quieres una pizza?— Volvió a cuestionar el ruso en un gesto de amabilidad
—Por favor— Pidió, puesto que sentía que si no le enterraba el diente a algo comenzaría a morderse las uñas dejando a estas arruinadas siendo que a pesar de que iría a una manicura, no podrían hacer nada con sus uñas. Además que ponerse postizas no era una opción ya que las odiaba
—11:00 A.M
—Tranquilo. Todo saldrá bien, hemos hecho la manicura de incontables novias y todas quedaron sumamente satisfechas con nuestro trabajo— Decía de forma calmada una de las trabajadoras en donde le iban a arreglar los pies y las manos además de darle un masaje
—Esta bien...— Respondió un poco mas calmado para que las señoritas hicieran su trabajo
—Wow, tiene mucha tensión en los hombros— Menciono la señorita que le estaba haciendo el masaje
—Perdón— Se disculpo el fascista un tanto apenado
—No se preocupe, no es nada— <<Que sentimental>> Pensó la mujer antes de seguir con el masaje
—12:00 A.M
El nazi había pedido algunas pizzas como almuerzo, solo pidió dos cajas ya que el soviético había ido a acompañar el imperial en aquel día en que tanto como el fascista como el nipon tenían que tener un poco de apoyo
—1:30 P.M
—Muy ajustado— Dijo con casi un hilo de voz el fascista puesto que el nazi había apretado un poco mas el traje
—Perdón— Soltó un poco la corbata y la acomodo —Mejor?— Preguntó viendo como el fascista asentía. Termino de abotonar los últimos botones del traje y lo miro —Me das hasta orgullo— Sonrió limpiándose una lagrima imaginaria por el rabillo del ojos —Ahora ven Bastardo que te están esperando para arreglarte el pelo—
—2:57 P.M
El italiano miraba en el espejo como la señora acomodaba su cabello. Ya se encontraban en la iglesia, en un cuarto acompañados de las madrinas nazi y de la señora que ahora le tironeaba el pelo
—Au— Dijo ante el tirón de pelo de la contraria
—Perdón, es que había un pelo rebelde— Contestó tomando tomando el velo para ponérselo en el cabello. Este no era muy largo como para llegar el piso pero si lo suficiente como para que le llegase hasta el pecho al italiano —Listo! Nunca hice un trabajo tan bien. Bueno, yo me retiro y felicidades por la boda— Exclamo la señora antes de irse
—Falta como una hora y media, supongo que hay que esperar aquí— Dijo Keylu sacando su teléfono para sacar algunas fotos para recordar la apariencia del fascista
—3:30 P.M.....
—Los dejó con la intriga! Tchüss!—
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[Italia fascista x Imperio Japones] [Terminada.]
Nezařaditelné-La mitad de esa cosa está llena de faltas ortográficas y la otra mitad (casi solo lo último en mi opinión) está bien escrito. -Si uno avisa, ya no es pecado.