Con cada día, la boda se acercaba mas y tanto los nervios como emoción aumentaba. Ahora la pareja protagonista se encontraba en la recepción para la boda, todo les encantaba salvó un detalle
—Que es esto?— Preguntó el nipon viendo una de las mesas, o mas exactamente uno de los nombres que estaban sobre la mesa
—Que sucede? No les gusta los manteles? Podemos cambiarlos tenemos varias otras opciones— Dijo la señorita que organizaba el gran evento de estos
—No, no es eso, yo me refiero a por que mierda, USA y China, se sentarán al lado de Nazi y URRS. Nosotros pedimos que la pareja de Nazi y URRS se sentaran con nosotros como el buen equipo que somos— Decía el Italiano como si fuera la peor cosa del mundo
—Lo lamento, parece que mis empleados han cometido una equivocación. Me disculpo por tu descuido, no se va a volver a repetir— La señorita, parecía ligeramente nervios, era obvio que cosas así no le solían suceder
—De hecho ya se repitió. Si recuerda le enviamos una lista con las cosas que sus empleados tenían que tener en cuenta al momento de hacer la recepción— Volvió a hablar el nipon
—Oh si! La recuerdo— Exclamo metiendo su mano al bolsillo derecho de su pantalón de mezclilla para comprobar
—Entonces por que ellos no la siguieron? Mire, le diremos cosas que notamos que no siguieron. Primero, dice que yo soy alérgico a las margaritas y por lo visto sus empleados no lo han tomado en cuenta por la cantidad de margaritas que tienen los centros de mesa. Acaso me quieren matar?—Dijo el fascista sacando su decimoséptimo pañuelo durante todo el recorrido de la recepción
—No señor, pensé que estaba refriado.— La chica se volvió mucho mas nerviosa de lo que estaba por las equivocaciones de sus empleados. Escucho todas las quejas de los lugares, como de que tal invitado se llevaba mal con el otro y no podía ponerlos en la misma mesa, de que otro invitado le daba mucho frío en las esquinas y que a otro le daba mucho calor en el centro. Paso escuchando con la cabeza agacha todo lo que decía el italiano y el nipon mientras esta comprobaba que todo lo que decían si estaba en la nota
—Y otra cosa, pusimos ahí que dejaran un centro de mesa extra en el lugar de México por que el siempre se roba los centros de mesa y no esta— Dijo el japones añadiendo lo último sobre las cosas que habían dicho
—Solo son lugares.....— Susurro la chica un poco cansa sobre las cosas tan absurdas a su parecer sobre cada maña que tenían los invitados
—Disculpa mi ciela!? Estamos intentado de que tus empleados no provoquen una posible tercera guerra mundial!! Tu no sabes ni lo mínimo que se podría llegar a armar si no cumplimos estas cosas que para ti son ridículas!— Exclamo el italiano ofendido por el comentario de la organizadora
—Lo lamento! Se me salió, esta vez cumpliré en persona con las exigencias que se deben tomar y veré que los encargados de armar su recepción solo reciban la mitad de su salario!!—
—Que? Osea nosotros solo- —La chica le interrumpió dejando al nipon con la palabra en la boca
—No se preocupe, perdone la molestia— Dijo la chica antes de salir de aquella recepción
—Que mierda acaba de pasar?— Se preguntó a si mismo el fascista viendo a la organizadora alejarse
—No lo se, lo importante es que ahora si podrán los lugares como se debe—
—Tienes razón. Y mejor ya salgamos de aquí antes de que mi alergia empeore— Termino de decir el fascista
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[Italia fascista x Imperio Japones] [Terminada.]
Acak-La mitad de esa cosa está llena de faltas ortográficas y la otra mitad (casi solo lo último en mi opinión) está bien escrito. -Si uno avisa, ya no es pecado.