Anochecer y amanecer. Parte 2. XiCheng - Chengxi

6. Una amistad

Notas:

Banda sonora: Hole in the Earth. Deftones

VI. Gusu Lan, al día siguiente, una semana atrás.

Wei Wuxian y Lan Wangji partieron hacia Qing He, con los tres grupos mixtos de cacería nocturna. Les acompañaban Wen Ning y Jiang Tan Yu.

Iban organizados por parejas de compañeros de cultivo. Los dos mayores, como matrimonio, el resto, por amistad o hermandad de secta.

Sólo el general fantasma iba sin pareja. Dadas sus características, no sería buena idea ponerle a un cultivador para compartir energía.

Mientras, en los Recesos, el líder Jiang paseaba por los jardines exteriores impaciente. Había pedido ver a Lan Xichen en una nota que envió antes del desayuno, pero aún no había recibido respuesta.

En su lugar, fue llamado a tomar el té con Lan Qiren antes del almuerzo. Esto le ponía aún más nervioso. Habría querido poder salir a practicar con Zidian y quemar un poco de energía, pero esto no era el Muelle.

Consiguió serenarse en la primavera fría. Le dejaron estar un rato en sus aguas. Al principio, estaba muy incómodo. Los lagos en Yumeng son más bien cálidos. Estas aguas eran demasiado heladas para él. Además, no tenía permitido nadar, un absurdo.

Sin embargo, para cuando un discípulo Lan fue por él a su habitación, Jiang Wanyin se encontraba más calmado y vestido con una túnica oficial, tres tonos de violeta organizados de más oscuros, en la túnica interior, a más claro, en la exterior, con finos motivos de lotos en hilo plateado.

Le agradecía a Jin Rulan haberle mandado ropas desde Laling. Había dejado varias cosas en la Torre Carpa, desde la época en que iba y venía de una secta a otra, para ayudar a su sobrino.

Fue con paso firme hacia el salón. Entró haciendo una reverencia breve y concisa y esperó a ser invitado a sentarse.

Lan Qiren le indicó un lugar frente a él y con pausa empezó a servir el té. El maestro Lan tenía una expresión insondable, pero no parecía hostil hacia el líder Jiang. Nunca lo había sido.

En algún punto de sus interacciones, Jiang Wanyin llegó a percibir incluso respeto y aprecio del viejo maestro. Tenían una forma de ver la vida muy parecida, apegados a las reglas y la tradición, con una profunda devoción por sus familias y clanes. Además, ambos se habían encargado de sus sobrinos desde pequeños.

- Espero que haya podido descansar. ¿Cómo encontró la primavera fría? - dijo, sirviéndole una taza de té humeante.

- Muchas gracias por la invitación y por permitirme quedarme unos días en su hogar. Debo confesar que al principio no me sentía cómodo en aguas tan frías, pero luego comprendí su poder sanador. Le agradezco mucho la deferencia en dejarme usarlas. - Asintió con la cabeza y tomó de su té.

- Me alegro, líder Jiang. Lejos quedan los días en los que usted era un estudiante aquí. Me congratulo al ver que se ha convertido en un buen líder para su clan y un muy buen amigo de Gusu. - Le vio fijamente y sorbió un poco de té.

Jiang Wanyin estaba curioso, pero con una cara neutral. Nunca se atrevería a hacer ninguna de sus consabidas expresiones. Volvió a su té, bastante más soso que el de Yumeng, pero aromático y muy humeante.

- Estaremos en deuda con Yumeng por siempre. Usted salvó a Zewu-Jun de una muerte segura. Cuando mi sobrino decidió ir con la patrulla, nunca pensé en un desenlace así.

-Créame que ninguno de nosotros lo pensó. De haber siquiera sospechado el peligro, jamás habría dejado que el líder Lan viniese.

- Se lo agradezco. Creo que fue una suerte que Usted estuviese allí.

- Es usted muy generoso. Zewu-Jun es el mejor cultivador de todas las sectas, fue solo mala suerte.

- Gracias. El señor Wei me ha compartido las teorías acerca de los demonios y cómo destruirlos. ¿Usted, qué piensa?

Jiang Wanyi no pudo evitar fruncir el ceño con incomodidad. El maestro Lan era directo.

- Wei Wuxian cree que los demonios fueron detrás de Zewu-Jun por la pena o la culpa. Viendo lo directo y persistente del ataque, he de concordar. Ahora bien, si cierto tipo de cultivo y energía ayuda a destruir a esta clase de espíritus, no lo sé. Deberíamos esperar los resultados de la cacería en Qing He Nie para asegurarnos. - Sin más, siguió bebiendo de su taza.

- Entiendo y concuerdo. Veo que el líder Jiang ha cultivado la prudencia. Me alegro.

Si Lan Qiren sabía algo del fénix de luz o de los detalles de esa noche, no lo dijo. Jiang Wanyin tampoco iba a hablar de ello.

- Tengo entendido que ha pedido ver a mi sobrino.

- Sí. Quiero despedirme antes de volver a casa.

- Entiendo. ¿Han estado compartiendo correspondencia en el último año, cierto?

- Sí. Así es.

- ¿Líder Jiang, diría que ahora son ustedes amigos? - y clavó la mirada en su antiguo estudiante.