4 años después...
Gotas de sudor caían de mí frente, ¡Llevaba toda la mañana haciéndolo! Simplemente no podía más. Baje de las escaleras y tome la tina con el líquido color rosa pastel para volver a subir las escaleras.
Introduje en el balde la punta de la brocha haciendo que absorbiera el color para después pintar la pared.
- ¡Lis! ¡Lisa! ¡Corre! - Los gritos de Jennie, Sehun y Taylor. Me asustaron haciéndome soltar la cubeta, está golpeó en la escalera haciendo que toda la pintura cayera sobre mí. De un salto baje las escaleras y sin importar dejar todo un rastro de pintura salí corriendo hasta mí habitación que era donde provenían los gritos.
- ¿Qué? ¿Qué pasa? ¿Te sientes mal? ¡Háblame! - grite ahora yo desesperada ya que solo me miraban, los tres comenzaron a reír.
- ¡Lalisa! Se supone que la pintura va en la pared y no en tus pantalones - los tres carcajearon aún más - ¡Ven! - habló Jennie entre risas. Rápido me acerque y tomo mí mano colocándolo ahora en su abultado abdomen.
Un sentimiento inexplicable se desarrolló en mí al sentir los suaves golpecitos, volteé a verla a los ojos y lo único que pude ver era felicidad.
- Se mueve - dije emocionada, Jennie se estremeció.
- Háblale - dijo riendo - Parece gustarle tu voz - la mire sorprendida.
- ¿De verdad? - se sintió otro pequeño golpe, Jennie río.
- ¡Lo ves! - dijo con una enorme sonrisa, Tay y Sehun rieron. Seguro mí cara era de una estúpida de primera.
- H-Hola bebé...- dije con algo de nervios hincándome a un lado de la cama.
- Ella. - corrigió Jennie.
- Tú madre asegura que serás niña - seguí - Cosa que si no es cierta, ella tendrá que re pintar tu habitación.
- Creo que de todas formas tendré que re pintarlo ya que tú otra madre prefirió ponerlo en sus pantalones - 'Tu otra madre' Desde que Jennie me había dado la noticia que le habían dado los médicos luego de hacer todos los procesos que llevaba la inseminación artificial, simplemente no lo creía después de todo.
- Ella dice que odia el rosa pero nosotros creemos que es mentira - susurro Taylor.
- ¡Hey! - le reclamé riendo - Realmente no me gusta, yo creo que deberíamos de pintarlo mejor de azul o verde.
- Morado o amarillo - dijo Sehun eligiendo colores más neutros.
- Hey basta - dijo Jennie frunciendo en ceño - Ella amara el rosa tanto como su madre y su tía ¿Cierto?
- ¡Cierto! - contesto alegremente Tay.
- Además ya habría tiempo para pintar uno de morado, uno azul, uno verde y unos cuantos más rosas. - Realmente esta mujer me mataría haciéndome pintar habitaciones - Pero ahora porque no mejor cambiamos de tema y vamos por un helado de vainilla con chocolate.
- ¡Si! - se unieron Taylor y Sehun.
- Ahora no podemos- con una simple mirada dijo ¿Por qué? - Tengo que terminar de pintar la habitación y mira como estoy.
- ¿De verdad nos dejaras a los cuatro con las ganas?
- Tratas de manipularme a costa de... Ella.
- ¿Lisa nos dejaras con las ganas? - pregunto levantando las cejas, no me convenía en lo absoluto no cumplirle los caprichos.
- Vamos ya - me puse de pie, Taylor y Sehun salieron corriendo hacia sus habitaciones para cambiarse.
Me di la media vuelta y me saque la blusa para cambiarme. Estaba frente al armario cuando sentí las manos de Jennie en mí abdomen. Me gire para poder verla de frente y más que nada para tener mejor acceso a sus labios.
- No tienes idea cuan feliz me haces - uní nuestras frentes.
- ¿Aún que te haga pintar paredes? - pregunto riendo.
- Aún que me hagas pintar paredes - afirme - Pero una cosa si te digo - me separé un poco de ella - Ningún chico se me acercara a mí Ella hasta que ella cumpla los 26 - los ojos de Jennie se abrieron como platos.
- ¡Estás loca! - dijo riendo.
- No - le sonreí - Tendrá las mismas reglas que Taylor... Acerca de los novios.
- Bueno ya... Una apenas tiene 9 años y la otra tiene casi cuatro meses... ya habrá tiempo para discutir sobre eso... ahora queremos helado.
Si, esta es la historia... nuestra historia. La chica 'ruda' que se enamora de la chica más superficial y menos compatible con ella. Qué irónico ¿No creen?
Hace algunos años, yo no me hubiera imaginado que, yo, Kim Jennie me enamorara de Lalisa Manoban, eso hubiera sonado imposible, pero dicen que los polos opuestos se atraen y creo que nosotras somos un claro ejemplo.
Ahora todo es diferente cuando estoy con ella, tal vez no sea la mujer perfecta, pero para mí lo es. La Lisa 'ruda' y 'amargada' como yo solía decirle, ya no está más, ahora todo ha cambiado y descubrí que dentro de ella hay una persona con los más puros y hermoso sentimientos, que sabe amar y que con un solo abrazo puedes sentirte tan protegida, y con un beso sentir que el mundo se detiene a complementar.
Se podría decir que el destino me jugó la peor jugada- que después se convirtió en una bendición- al terminar enamorándome de la chica de mí 'apuesta'. Pero yo no creo que el destino, tampoco en la coincidencias; creo que hay algo aun más fuerte que nos unió.
Este no es el final de nuestra historia... Es solo el comienzo.
Fin.
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Me, myself and her. - Jenlisa
Fiksi PenggemarContinuación de "Me, myself and I." La historia no es mía, en cuanto la dueña aparezca y me pida que la elimine así será.