Natsuki estaba sentada en una roca frente al lago de la sede, había pasado una semana desde que despertó y tenía algo con Iguro se podría decir pero no quería sentirlo.
La relación con Kokushibo no mejoro, pues Natsuki se distanció de él y de la mayoría de los pilares.
Durante su sueño, se encontró con varias cosas y uno de ellos fue una visión del futuro. Si ella no se separaba ahora les haría daño a todos.
Mientras pensaba en eso, se dio cuenta de que frente a ella estaba una serpiente albina. Al parecer la miraba a ella.
- oh que preciosa -dijo Natsuki para estirar su mano.
La serpiente se enrollo en su brazo y subió hasta quedar en su cuello.
Natsuki acariciaba a la serpiente y mientras lo hacía no se dio cuenta de que iguro llegó a su lado.
Para el chico ya se le había hecho costumbre ver a Suki sin su máscara.
- ¿de donde la sacaste? -pregunto el azabache.
- acaba de salir -respondió suki al chico y la serpiente se pasó al cuello del el chico.
Iguro la acariciaba y la serpiente se mantenía quieta en su lugar.
- al parecer ya tiene dueño -sonrió Natsuki un poco.
Iguro negó y trató de quitarse a la serpiente pero está parecía no querer irse.
- te ves muy tierno -confesó Natsuki y acarició su cabello.
Cuando se dio cuenta, quito su mano rápidamente y se levantó de un jalón.
Iguro la vio confundido.
- perdón, no debí haber hecho eso -se disculpo la chica varias veces.
- te parece si le pongo Kaburamaru? - pregunto el chico a la chica.
Natsuki asintió de espaldas y la serpiente se enredo más en el cuello sin lastimarlo. La pequeña Kaburamaru parecía no tener más de 2 meses de nacida.
- ¿podemos hablar? -pregunto iguro tomando la mano de la chica.
Nuevamente Natsuki la retiro y negó.
Los dos se quedaron en silencio y sólo se podía escuchar las hojas de los árboles que se movían de un lado a otro, los cantos de los pájaros que anunciaban la noche.
Otro día más se había ido, fue en ese momento que se escucho unos sollozos.
Obanai se dio cuenta de que provenían de la chica y la volteo para que quedara frente con frente.
- Natsuki..... -su llamado quedó en el aire cuando la chica lo abrazo con fuerza.
Y escondió su cara en el haori del chico, no quería que la viera llorar.
- no quiero lastimarte, es por eso que debes alejarte de mi, soy una amenaza -pidió Natsuki entre sollozos.
No quería que muriera frente a él, el sueño que tuvo logró ver algunas muerte y sin duda la de él chico frente a él estaba contemplada. Moría por tratar de detenerla y no quería eso.
El debía tener una vida llena de salud.
- no eres una amenaza -susurro iguro tratando de calmarla.
Se quedaron abrazados hasta que la chica se calmara, Kaburamaru acariciaba la cabeza de la chica.
Los dos se sorprendieron, la serpiente era diferente muy diferente.
- ¿porque? -pregunto Natsuki.
- ¿porque te gustó? -volvió a formular la pregunta.
Natsuki sabía que sus sentimientos estaban ahí en algún lado, enterrados pero los sentía. No quería encariñarse con él porque la mayoría de las personas que ella ama mueren.
Su madre murió.
Su primera amiga murió y su nombre era Makomo.
Luego su segunda amiga también murió.
Su mascota murió.Todos aquellos que les tiene afecto, mueren, ella se sentía aliviada que sus amigos pilares no hayan muerto pero es porque nunca ha demostrado más allá del cariño. Incluso que su abuelo no estuviera muerto.
Después de todo lo que pasó, prometió a sí misma no volver a querer a nadie y demostrarlo, prefería dar cariño pero sin relacionarse con esa persona.
Y luego llena Obanai para poner su mundo de cabeza.
- aveces el amor no tiene una explicación pero si la necesitas, te amo por ser tu, basto solo un choque de tu mirada con la mía para saber que desde ese momento ya era tuyo - confesó iguro abrazándola más.
Natsuki empezó a darle golpes pequeños en el dorso, como se atrevía a decirle toda esa cosa cursi, sabiendo que ella tiene corazón de pollo y cae muy fácil.
- tiene que haber otra razón -exigió la pilar de la luna.
Obanai se alejo un poco y pidió a Kaburamaru que se bajara de su cuello, la serpiente aceptó y tomó a Natsuki entre sus brazos.
La cargo un poco y recargo sobre un árbol, se acercó a ella y una vez sus vendas abajo, nuevamente la besó.
Con cuidado y amor que quería demostrarle.
Natsuki se resistió al principio pero luego de un tiempo, cedió.
Apenas llevaban 2 veces que se daban y ya sentía que sus labios eran adictos.
- eso cuenta como razón - dijo Obanai separándose del beso un poco agitado por la falta de aire.
Ese beso fue el detonante para que Natsuki admitiera sus sentimientos.
Estaba completamente enamorada de Iguro.
Tenía miedo, claro que tenía miedo, no sabía que le esperaba el futuro pero por una vez en su vida quería tomar una decisión propia.
Una decisión suya que aunque sabia que le traería consecuencias en un futuro no muy lejano, sólo quería disfrutar del presente.
Ahora Natsuki tomó del cuello a Iguro, se paro de puntitas y unió sus labios en un beso.
Kaburamaru los veía desde una roca.
En ese momento, la luna les regalo un poco de Privacidad, dejó de iluminar con intensidad y la oscuridad rodeo a la pareja.
Ahora podían amarse sin restricción.
Y dentro de esa tanta oscuridad, el hilo nació, uniendo la vida de estas dos personas para siempre.
El hilo del destino había aparecido y pensaba quedarse por un buen tiempo.
ESTÁS LEYENDO
🔸Amor En La Guerra🔸Iguro Obanai.
FanficSe dice que por ser cazador de demonios no puede tener pareja ya que su vida siempre está en constante riesgo pero que pasaría si el amor surgiera entre ellos mismos. Está es la historia de Nishimura Natsuki e Iguro Obanai.