Capitulo diez

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Capitulo diez




















Narrado por Klein





















9 de septiembre del 2014























Camino a paso rápido por los pasillos de mi facultad, no voy tarde, pero sino me apuro si llegare tarde. En primer turno tengo clases de Expresión, de cómo nos proyectaremos al público, será en la sala de conferencia de la universidad.

Una vez dentro hay muchas opciones donde sentarme, la sala es grande y somos un grupo pequeño, aunque hay dos clases reunidas, subo las escaleras y localizó a algún conocido con el que me pueda sentar, y hay muchos. Lea una de mis compañeras de curso alza la mano y me dedica una sonrisa, está cerca de los asientos bajos, podría decirse que es de esas estudiantes que le hacen la pelota a los profesores, me acerco y me dejo caer a su lado.

-Hola, pensé que no vendrías

-Dude un poco- ríe y en sus mejillas regordetas se le forma dos hoyuelos. Es de baja estatura, gordita de brazos y muslos gruesos. Lleva un paño azul cubriendo su cuero cabelludo. Hace dos años que se le callo su cabello rubio que tenía por las quimioterapia, le diagnosticaron Cancer de mama hace unos cuatro años. Cuando empezó en la universidad fui uno de los pocos chicos que se le acercó y no me arrepiento.

-Dicen que la profe nos tiene una sorpresa, una invitada especial

-Esta profesora me agrada mucho, es divertida y más ¿Cómo decirlo?- pienso en una palabra adecuada -¿Suelta? ¿Liberar?

-Tal vez acostarse con varios de los alumnos le ha ayudado a conseguirlo- esta vez empiezo riendo yo con ella siguiéndome la rima.

-Muchos chicos la buscan, esta codiciada- reímos otro poco más -¿Y cómo estás?

-Bien, el doctor dice que voy mejorando de a poco- alza los hombros -Ya no tendrás que ir a llevarme los apuntes- bromea

-Eso espero, no por la molestia de llevarlo, sino que eso significa que estás bien y puedes tomarlos tu

-Cierto, aunque tenía ventajas eso de quedarme en casa durmiendo.

Sonrío y tomo su mano dándole una palmadita y luego le guiñó el ojo, Lea es la única chica de mi curso con la que puedo coquetear siendo yo mismo, ella no va a intentar seducirme o cambiarme de camino, existió esa confianza y fluidez a la hora de ser nosotros. Tal vez sea la seguridad de que Lea anda en mí mismo lado y le gustan las personas de su mismo sexo. Me da una sonrisa agradable que hace que sus ojos se achiquen

-No hagas eso, me das muchas ganas de estrujarte todos los cachetes, y lo odias- me quejo mientras ríe.

Las puertas de adelante de la sala son abiertas y la profesora entra cargando su bolso, es una rubia esbelta y delgada, poco pecho y culo, pero admito que tiene cara de ángel, lo que más le atrae a los idiotas hormonados son sus labios gruesos, y desde mi aspecto se ve desagradable.

-Buenos días chicos- sonríe y apoya todo su cuerpo sentándose en la esquina de la mesa -Hoy como muchos sabréis, tengo una invitada especial. Nos dará una charla de cómo es su trabajo y otras cosas de intereses, por favor, señorita- lo último lo dice con la cabeza dirigida por donde mismo salió.

Metido en un enredo. Saga Dämonen, segundo libroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora