Capitulo once
Narrado por Antón
Muerde su labio inferior mientras mantiene la mirada sobre el mármol de la península ¿Fue demasiado arriesgado lo que dije? O ¿Muy pronto? Aclaro mi garganta mientras él se mantiene en silencio
-¿Quieres ir a jugar play? Está en mi habitación
Asiento y él se levanta con una sonrisa, me extiende la mano y la tomo también levantándome, camino detrás de él hasta su habitación y una vez dentro el cierra la puerta, mi mirada inspiración a el lugar, la cama está frente a donde entras y detrás una ventana de cristal, en la pared de al lado es una especie de mural de color rojo y dibujos de naranjas y fresas con una frase en el centro de la pared. Camino hasta ella viendo varías fotos dispersas en el lugar, hay muchas con sus amigas y más personas. Agarro una que me tiene sonriendo.
-¿De verdad la tienes?
El se acerca a mi lado y mira la foto que tengo entre mis manos, es una donde salimos los dos, la primera noche que salimos todos al club privado. Lo recuerdo perfectamente, fue la primera noche cuando lo vi besando a un chico. Yo tengo un ojo cerrado y la lengua afuera, el puso los ojos bizco y los labios en forma de beso.
-Es sexy- bromea y se aleja de mí caminando hacia su cama tirándose en ella. Camino hasta su lado y me siento en la esquina, al lado de la puerta se encuentra la televisión y abajo la play. Al parecer no es de las mentiras como Netflix.
Siento que jalan de mi sudadera y miro hacia atrás a Klein con mi sudadera entre su puño. Rio negando con la cabeza dejándome caer de espalda a su lado mirando el techo antes de girar la cabeza y verlo, el verde de sus ojos es muy intenso y realmente hermoso cuando lo tengo tan cerca.
-¿Está era tu plan para tenerme en tu cama?- pregunto sonriendo algo nervioso
-La verdad es que tú querías y yo también, pero te invite de una manera más bonita. Aunque sí quieres jugar play para liberar los nervioso, podemos jugar, te partiré el trasero
-Más bien creo que será al revés, y puedes interpretarlo de cualquier sentido- lo último casi que llega a ser un susurro, pero el parece esta muy divertido con mi declaración.
-¿Quieres apostar?
-¿Qué apostamos?- inconscientemente cada vez estamos más cerca y nuestras narices se rozan.
-Si yo gano, que es lo que sucederá- afirma con seguridad- Me vas a besar con intensidad y sin preocupaciones.
-Hecho y si yo gano quiero que me toques.
-Que gane el mejor- antes de levantarse deja una pequeña presión en mis labios que se me hace demasiado rápida para lo que fueron unos segundos.
Prepara todos los equipos y cuando termina se sienta a mi lado ofreciéndome un mano inalámbrico de color blanco. El juego empieza y es uno de carrera, al principio perdí un poco el control y me tomó ventaja.
-No se vale, seguro lo tienes trucado
-Aprende a perder y aceptarlo
ESTÁS LEYENDO
Metido en un enredo. Saga Dämonen, segundo libro
Genç KurguDämonen, organización relacionada con asuntos ilegales. Antón, un peón más de esta organización. Klein, un chico ingenuo que no sabe el enredo que ayudó a formar. Antón vive seguro de su realidad, cae pero se levanta, hablan pero sigue siendo el mi...