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- Emil tengo unas cuantas cosas para ti - ella lucía un vestido blanco y sandalias simples, el cabello en un moño desordenado muy alto en la cabeza y sus ojos azules brillaban en diversión, caminaba de espaldas arrastrando un saco.

- ¡que esperas muchacho! - me dijo Emil, por lo que me gire para verlo - ayudala

Sin pensarlo me levanté de un salto y tome el saco del suelo, evitando en todo momento su mirada, me sentía un idiota, mis piernas y brazos temblaban, mis ojos miraban solo mis pasos, me costaba respirar pero mágicamente el vacío de mi pecho desapareció.

- gracias querida, toma asiento - pidió Emil - Jack, puedes dejar eso sobre esta mesa

Hice lo que el viejo me pidió, mire en todas direcciones para ver donde me podía esconder y es que sentía la mirada de Alejandra penetrando mi alma, sentí una ligera carcajada, al instante supe que no había sido Emil, ella se estaba burlando de mí, debo parecer un idiota.

- hay otra silla por aquí, jack

- um... Si... Digo... Gracias - rascandome la nuca me senté al otro extremo de la mesa, frente a ella, dispuse mis manos sobre la mesa y me dedique a observarlas.

- mi amigo - comenzó Emil - es algo tímido, no lo tomes por descortés, su nombre es Jack Efron - escuche como una risita femenina resonaba - lo se un nombre... Peculiar y ella es Alejandra.

Tome una inspiración profunda y lentamente levante la mirada, realmente estaba frente a ella, realmente estaba tan cerca, mi corazón latía de manera descontrolada, intente pronunciar palabra pero simplemente no era capaz de emitir algún sonido, sus ojos azules se clavaron en los míos y pude verlo, sentía lo que yo, una pequeña sonrisa se escapo de mis labios y puedo jurar por mi vida, si fuese necesario, que podía oír el latir de su corazón, sus mejillas se sonrojaron, su respiración se entrecortaba, estaba sintiendo en efecto lo que yo sentí la primera vez que la vi.

- ho...

Estaba apunto de poder pronunciar un simple hola cuando unos pasos desenfrenados me interrumpieron, un asiático de cabello muy corto entraba de manera agitada y muy poco formal.

- Emil... - hablaba de manera muy agitada -fuera tenemos dos autos negros, exigen la entrada, vienen... Por él.

Automáticamente tuve tres pares de ojos mirando en mi dirección, de manera torpe me gire para mirar tras mi espalda, nada, era claro que me miraban a mi. Alejandra levanto un ceja, puedo adivinar lo que pensó "¿en serio?, te veíamos a ti", de ser en otro momento menos tenso me hubiese reído de mi tontería pero mejor escuche lo que Emil y el hombre hablaban.

- que esperen hasta que siete pueda salir de la reserva - Emil saco su voz de autoridad, una que jamás había escuchado - Jack, debes salir de aquí, vete en una de las camionetas, di que solo viniste por algo y luego te marcharse dejando a Juls aquí - quise preguntar el cómo sabía del nombre de mi motocicleta pero me respondió antes - esa no es la pregunta correcta.

El viejo se levanto y busco bajo su cama, luego caminó hasta mi silla y me dio una pequeña billetera negra de cuero, la tome perplejo.

- esto es lo que has venido a buscar - abrí la billetera asombrandome de su contenido, los documentos de Jack Efron - asegurate de decir que sientes alergia de tu dispositivo de rastreo, eso nos dará unos días para que envíen otro de arriba - solo asentí a sus órdenes - ahora quiero que vayas a casa y actúes como si nada, Quince querrá asesinarte.

Me levanté de un salto y deje la billetera en mi bolsillo trasero, a paso rápido camine hasta la salida, pero luego recordé algo, más bien, a alguien, mejor dicho a ella, me gire sobre mis pies y camine hasta su lado, deposite un suave beso en su mejilla.

Mundos ParalelosWhere stories live. Discover now