Atrapado en el pasado

Capitulo 9 - Pista

Akashi camino en dirección a la habitación, cuando llegaron le señalo su respectiva cama. Todos estaban dormidos, habían entrenado muy duro ese día después de todo.

-Ve a dormir-

Le dijo al muchacho quien camino hasta su cama. Akashi se volvió a sentar y abrió de nuevo el paquete que Levi le había entregado, hizo el menú de entrenamiento de Kagami y se acostó.

-¿Por qué aun no te duermes?

Le pregunto Akashi al otro chico que miraba fijamente la pared fuera de la ventana.

-No me siento cansado y esto es tan extraño.

-Lo sé, es extraño. Pero será mejor que vayas a dormir a menos de que quieras morir de cansancio mañana.

Con esa última advertencia Akashi se dio la vuelta y se quedó dormido. Se despertó antes que el resto como era normal para él. Se alisto y termino de revisar los entrenamientos de cada uno de sus compañeros. Cuando fue la hora despertó a todos.

-¿QUÉ? ¿Qué rayos haces tú aquí?!!- Dijo Aomine sorprendido de ver a Kagami en ese lugar.

-Lo encontraron ayer. De la misma forma que a todos. Bueno tenemos que ir a desayunar.

Bajaron y el comedor estaba vacío. La comida de cada uno de ellos estaba servida en la mesa de al fondo donde se habían sentado el día anterior. 

-Esto parece abandonado...

Murmuro Kise.

-Ya debieron haber salido.

Dijo Akashi para luego hacerlos sentar a todos.

-Ah~ que alivio, ya no tenemos que soportar al enano de pelo negro. Akashi, por qué no dejas el entrenamiento para después y hoy descansamos de el enano.

Dijo Aomine recostándose en la silla.

-No. De esto depende su vida. Yo no quiero verlos muertos, gracias- Akashi.

-Esperen un momento ¿De qué rayos están hablando?- Kagami.

-De que tenemos que entrenar a menos que queramos morir.

Kagami miraba con una cara de confusión a todos quieres lo miraban con resignación.

-Bueno, vamos a entrenar. Levi solo me dio los entrenamientos generales, yo los acomode según cada uno. Kagami a ti te tengo que enseñar desde el principio, así que acompáñame.

Entregué a cada uno el plan que había hecho y les mande a cambiarse ellos hicieron lo que les mande y empezaron a entrenar según lo ordenado.

-Shintarou, tú vigílalos, si hay algún problema avísame.

Camine con Kagami hasta el bosque con los arboles enormes,  empecé a enseñarle tal y como lo había hecho Levi con nosotros. Él extrañamente seguía mis instrucciones.

-¿Por qué lo haces?

-¿Qué cosa?

-Seguir mis instrucciones.

-Es mejor si lo hago, ya no estamos en la cancha. No eres mi enemigo y esto costara nuestra vida, es mejor si juntos buscamos la salida o ¿no?

-Sabia decisión. Sin embargo, aún no encontramos nada que nos de una pista.

Vi un brillo en el suelo.

-Sígueme, creo que vi algo.

Bajamos a donde estaba el brillo y vimos una maleta. Dentro había un balón, libros y un celular. Marque el lugar y nos llevamos la maleta al cuartel. Reuní al resto para avisar del descubrimiento.

-Encontramos esta maleta ¿Es de alguno?

La maleta no parecía de ninguno de nosotros. Sin embargo Aomine se emocionó mucho al ver un balón dentro, los libros eran de literatura e historia, algunos tenían imágenes de diferentes lugares del mundo. El celular estaba descargado, por lo que no nos daría una pista. Había un cuaderno, sin embargo lo que había escrito en su interior estaba en otro idioma. Los libros de literatura estaban en inglés, pero los libros de historia estaban en el mismo idioma que el escrito en el cuaderno.

-Si encontramos la forma de descifrar lo que dice en el cuaderno tal vez logremos encontrar pistas para volver de donde vinimos por lo pronto hay que decidir si es buena idea mostrarlo o debemos esconderlo.

-Yo creo que lo mejor será mostrarlo, Akashi, tal vez ellos pueden descifrar su contenido.-Shintaruo

-Pero podrían robarlo- Ryouta.

-La mejor opción es mostrarlo, por lo menos así tendremos oportunidad de descifrarlo.-Tetsuya

-Entonces está decidido. Se lo mostraremos.

Ya empezaba a anochecer y se escuchaban las puertas abrirse. Pronto volverían de su misión. El entrenamiento había sido cambiado por Akashi quien lo había acomodado a cada uno de ellos así que no quedaron exhaustos está vez.