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Narra Argentina:
»»——⍟——««

Un ruido extraño me despertó casi de golpe, venia de la primera  planta de aquella casa. 

mi vista se dirigió a la ventana notando que era demasiado tarde. 

"¿acaso se metió algún animal?"

pensé mientras me levantaba y me dirigía hacia la puerta de mi habitación. dudaba si salir o no ya que ¿qué haría si así era? quizás debía levantar a Canadá y avisarle? seria lo mas apropiado para esa situación? no lo sabia.

en ese momento escuche el ruido de un auto. corrí rápidamente hacia la ventana viendo que era el del canadiense.

"Por que saldría tan tarde ¿acaso sucedió algo?"

mi curiosidad aumentaba. tantas puertas cerradas con llave, tan aislado de la multitud y por si fuera poco en un lugar boscoso. 

si, en ese punto ya parecía una película típica de terror, una la cual deseaba no ser parte de los personajes o la historia.

camine hacia la salida de mi cuarto, debía echar un vistazo mas profundo a aquel lugar que tanta mala espina me daba. una vez que baje empece a revisar el entorno, no había nada fuera de lugar, todo estaba demasiado ordenado para ser incluso algo natural.

mi vista se enfoco en una puerta oscura de roble tallada a mano debajo de la escalera, supuse que llevaba al sotano. intente abrirla pero era completamente inútil ademas de que ni siquiera sabia donde estaban las llaves de las demás puertas para empezar. 

solté un suspiro de decepción y camine hacia mi habitación, lo ultimo que quería era que se repitiera lo de aquella vez. no sabia que seria de mi si el canadiense me atrapaba y sinceramente no quería imaginarlo.

espere sentado a la orilla de mi cama el regreso del menor, quería saber la razón por la que se fue o a que hora regresaría. si, no era muy hético el meterme en los asuntos ajenos pero tampoco podía lidear con la curiosidad que la situación me provocaba.

"realmente se esta tardando este pibe" pensé acostado en mi cama mirando fijamente el techo.

mañana tendríamos que volver a los estados unidos, sinceramente detestaba la idea de volver a socializar o escuchar aquellos comentarios necesarios. quizás si ponía alguna excusa Canadá dejaría que me quede. 

sin darme cuenta mis ojos se cerraron sumergiéndome en un profundo sueño, el mal Estado en que me encontraba debilitaba demasiado mi cuerpo y eso influía en mi resistencia física como mental por lo cual no podía aguantar tanto como antes y dormirme era casi inevitable.  

...

"despierta" un susurro en mi oído derecho provoco que me despertara de golpe, sentándome en la cama y sintiendo mi corazón latir de forma apresurada.

-Lo siento ¿te asuste? 

al notar que era Canadá baje mi cabeza tapando con mi cabello la horrible marca que tanto odiaba, era casi automático ocultarla.

-No escuche que entraras, en serio me tomo por sorpresa. -dije con una leve sonrisa en mi rostro. "Mierda, no note cuando llego" pensé mordiendo mi labio inferior.

-Lo lamento, parecías tan dormido que decidí entrar luego de golpear tantas veces la puerta.

-es-esta bien, que hora es?

-son las seis en punto, debemos alistarnos para ir.

-... Cana-

-se que no quieres pero debemos asistir, prometo cuidarte en todo momento.

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