En las profundidades - [Hyunin] [✓]

XVI

El viento en verano no era muy común en el pueblo, al estar rodeado de bastante montañas, la retención del mismo era notoria en las partes bajas, especialmente en la zona edificada. Pero Hyunjin conocía a la perfección, que justo al lado del faro, en la punta del acantilado "Corazón" y, como decía Seungmin, casi tocando el cielo... el aire corría libremente y te daba una sensación preciosa.

Una sonrisa se formó en sus labios inconscientemente mientras apoyaba el lápiz en la hoja. Visitaba ese lugar más seguido desde que dejó de tenerle miedo y pasó a sentir aprecio al faro descuidado. Bueno, eso pasaba con todo lo relacionado a Jeongin. Quizás Hyunjin había caído demasiado en sus encantos y no se daba cuenta hasta qué hacía alguna rutina fuera de lo normal, como dejar de pescar o tenerle pudor al agua. Jeongin había entrado a su vida para cambiarla, eso estaba claro.

Y quizás por eso, el lápiz en su hoja, trazaba un ojo humano que ya conocía demasiado bien, junto a unos labios finos y un cabello siempre mojado. Dibujar a Jeongin no era nuevo para Hyunjin, pues tenía varios bocetos en su habitación de su rostro, pero esta vez era distinto, pues venía acompañado de su cuerpo completo y un paisaje más allá del agua.

Hyunjin estaba dibujando a Jeongin como un humano y ni siquiera sabía porque le resultaba tan fácil imaginarlo como tal. Si tan solo fuera real...

Un ruido hizo presencia en su espalda, llamando su atención de pronto pero en cuanto se dió la vuelta, Hyunjin no vio más que el faro vacío, la puerta atrancada cerrada y el sonido del viento golpeando la poca naturaleza en esa zona alta.

Volvió su atención al dibujo, pero no pasaron más de dos minutos antes de que un cuerpo tomara asiento a su lado como si nada, tomando el libro de dibujo en sus manos y mirándolo con confusión. Hyunjin se quedó inmóvil, con el lápiz en la mano y analizando lo que estaba ocurriendo. Un desconocido, que parecía tener su edad, con un cabello oscuro y un gorro negro, tenía su dibujo en sus manos y un ceño fruncido en su rostro.

—Disculpa, eso es mío. —Hyunjin no se molestó en soltar algún reproche con insultos de por medio, quizás el chico solo era tonto y robaba dibujos ajenos como hobby.

—¿Por qué estás dibujando esto? —Sus palabras iban dirigidas a Hyunjin, pero su vista seguía fija en el dibujo, el cual ahora estaba dado vuelta y lo inspeccionaba como a una obra de arte sin sentido.

—¿Puedes devolverme mi dibujo? —Hyunjin tomó la hoja en su mano pero el otro chico se la quitó de nuevo, comenzando una pelea por ver quién tenía el dibujo—. ¿Qué sucede contigo? ¡Ya dámelo!

Hyunjin tiro del dibujo, pero el desconocido lo soltó al mismo tiempo que el mayor daba toda su fuerza en el tirón, cayendo hacia atrás y recibiendo una risa leve por parte del desconocido.

—Por egoísta. —Soltó burlón. Hyunjin ya no estaba seguro de si tenían la misma edad.

—Si me lo pedías-

—No respondiste mi pregunta. —Atacó el menor de nuevo, metiendo sus manos en los bolsillos y mirando a Hyunjin aún acostado en el suelo—. ¿Por qué estás dibujando eso?

Hyunjin no respondió, metió el dibujo en su carpeta de los mismos y la guardó en su mochila en completo silencio. El desconocido esperó paciente una respuesta que nunca llegó.

—No es de tu incumbencia, desconocido. —Atacó Hyunjin, dando la misma impresión con respecto a la edad que el chico.

Hyunjin se levantó de su lugar con la mochila en su hombro y comenzó a caminar lejos del faro, refunfuñando en silencio por el enojo que le había dado esa situación. Por detrás, el chico continuó siguiéndolo.