Capitulo 5

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Maratón 2/2

Capitulo dedicado a mi maravillosa prima Victoria García, por ayudarme en mi bloqueo y poder continuar este capítulo para ustedes.

Ahora a leer...

La verdad es dolorosa, las personas no son como creemos.
Todos tienen secretos oscuros.

—Muy bien, te escucho, ¿porque mi hermana Taylor está involucrada contigo?— pregunté.

Esto me iba a doler, yo lo sabía y él también lo sabía. Se aprovecharía de eso.

—Tu hermana no era la persona que creías que era Emily— empezó. Odiaba a este hombre, lo miré expectante, esperando a que continuara— Ella tenía problemas de depresión, siempre se mostraba feliz frente a ustedes, pero en la noche se encerraba en su habitación a llorar y a querer acabar con su existencia.

Su voz era tranquila, no sé si eso era cierto. Pero de cierta manera le creía.

Mis ojos se cristalizaron.

¿Cómo fue que nunca me di cuenta de su estado?

—¿Cómo es que tú sabes todo esto?— pregunté.

—Esta ciudad es muy pequeña Emily, si no te enteras es porque no quieres— respondió — Además...

Se quedó en silencio, lo miré y siguió igual.

—¿Además que?

—Digamos que teníamos una especie de relación muy cercana— respondió.

¿Tenían una relación? ¿De qué estilo?

»Su depresión era fuerte, ella sufría y tu solo perdías tu tiempo preguntándole si estaba bien, en lugar de averiguar qué le pasaba. No puedes ni hacer bien tu papel de hermana.

—No digas eso— reclamé — no sabes nada.

—¿Que yo no sé nada? — dijo y río secamente— tu no sabes nada Emily, no sabías que tu querida hermana era una adicta a las drogas.

Me quedé paralizada.

¿Qué mi hermana era que?

Ya no sabía que decir, ya no sabía ni qué pensar de ella. Conocí a una gran hermana mayor, muy dulce y atenta con todos, pero lo que este hombre me estaba contando no era nada comparado con lo que yo pensaba que era.

Entonces vino un recuerdo a mi mente.

Estábamos ambas en mi habitación, ya era de noche. Mamá y papá no estaban en casa ya que tenían una reunión muy importante. Estaba mirando por la ventana, gotas de lluvia golpeaban contra esta.

Me gire de nuevo hacia la cama y la mire un poco extraña, no era la típica Taylor alegre qué solía ser. Asocie su estado a qué de seguro había terminado con alguno de sus novios.
Y seguro estaba un poco triste por eso. No lo sé.

¿Taylor estás bien?— pregunté. Ella se quedó en silencio unos segundos antes de responder:

Sí Emily, estoy bien, no te preocupes— me dio una sonrisa tranquilizadora y lo deje pasar.

No sé qué le sucedió pero si ella decía que estaba bien yo le creía.

Entonces pensé, ese día, su depresión había salido a la luz y no le había prestado atención. O eso pensaba, porque lo que venía después de esa triste historia era peor. Prefería mucho mejor a una Taylor deprimida.

Mi Dulce Venganza [ Editando ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora