Capitulo 2

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Realmente le costaba creer que tenía justo en frente a las personas que buscaba, el problema era cómo no afectar la historia. Si bien ya tenía un plan en mente y ya sabía desde donde interferir, le ocurrió lo inesperado. Ahora solo necesitaba seguir actuando de acuerdo a su edad y evitar los futuros regaños de sus hermanos.

- Un gusto conocerte Emma -expresó la pelinegra para luego mirar a los otros dos- oigan, ¿podemos ir a esos juegos? y mientras jugamos tu avisas a mi mama, ¿si? -termino de hablar para luego entregarle un papel con un número telefónico al pelinegro mayor-

El joven sin salir de su confusión solo asintió y recibió el papel, para luego ver a las dos niñas corriendo al parque más cercano. Sin tener otra opción solo le dijo al rubio menor que fuera con ellas y se asegurará que nada les pasara. Finalmente terminó marcando al número que le entregó la pequeña esperando que en verdad fuera el teléfono de su madre.

Los tres niños terminaron jugando juntos luego de muchas súplicas de las dos pequeñas. Al cabo de un rato Shinichiro volvió con ellos, llamando a la pelinegra.

-Tu madre dijo que tu niñera ya le había contado y que no estaba muy preocupada ya que sabes defenderte, también me pidió el favor si te podíamos cuidar lo que queda de semana -terminó de hablar agregando un suspiro.

-Oh, bueno ya me esperaba algo así, al final mis hermanos se preocupan más por mi que ella - agrego la pequeña mientras se encogía de hombros- si le molesta que me quede puedo ir a buscar algún lugar donde quedarme-

-¿Qué sucede Shinichiro?¿Adoptaron a otra niña? -preguntaron dos hombres mientras se acercaban al pelinegro, quien de desesperación estaba por comenzar a fumar.

-Wakasa, Takeomi, ¿Qué hacen aqui? -pregunto el pelinegro al encender su cigarro.

-Te estábamos buscando Shinichiro, supongo que olvidaste que hoy tenemos reunión -decía el chico con una cicatriz en la cara.

-Ya, ya, deja llevar a los chicos a la casa, ahora tengo que cuidar a otra enana -comentaba mientras soltaba el humo de su boca y junto a los otros se dirigen donde había solo dos niños- Oi Mikey, ¿Dónde está Nyoko? -pregunto el pelinegro observando a su alrededor.

-La última vez que la vi estaba contigo -comento el rubio encogiéndose de hombros con un rostro irritado.

-Genial, ahora tenemos que buscarla -dio un suspiro para ir a buscar a Emma- Mikey, Nyoko se va a quedar con nosotros unos días, ya le dije al abuelo.

-Genial, ya no voy a estar con puros hombres -expresó con alegría la pequeña- vamos a buscarla, dijo que necesitaba enviarle una carta a sus hermanos -comentó riendo mientras empujaba a su hermano mayor.

-Shinichiro, ¿ya me puedo ir? -expresó con aburrimiento el pequeño rubio- si Mikey, nos vemos en la casa, si la encuentras avísame -se despidió el pelinegro mayor siendo seguido por los otros dos. 

¡¿Renací como una Haitani?! (PAUSADA)Where stories live. Discover now