𝑴𝒚 𝒃𝒐𝒚 𝒊𝒔 𝒂 𝒄𝒓𝒊𝒎𝒊𝒏𝒂𝒍!

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A partir de esa ocasión comenzamos a salir un poco, aún no regresaba a clases así que podíamos vernos sin problema, a pesar de que mis sentimientos por él iban creciendo seguía engañándome diciendo que solo tenía curiosidad así el, Haru no se enteró de lo qué pasó en esa fiesta hasta tiempo después cuando por accidente lo mencioné y no tuve otra opción más que contárselo, pensé que se reiría y se pondría feliz, pero aún que tenía una sonrisa en el rostro cuando me escuchaba atentamente solo pudo decirme que fuera con cuidado, no le di importancia y pensé que solo estaba preocupado por ser la primera vez que me veía de esa forma por un chico.

El tiempo pasó y así como las salidas con Mikey eran más frecuentes, también comenzaba a salir mas con Kei, el tiempo que llevábamos siendo amigos me había caído muy bien y le había tomado un gran cariño, siempre me hacía reír y se preocupaba por mi.
En una ocasión salimos al cine y después a cenar algo y cuando íbamos de camino a casa comenzó a caminar más despacio dejándome sola al frente.

–Me gustas t/n -. Dijo sin más.

Me paré en seco sin voltear así atrás, no sabía qué decir, si era un increíble chico y sin duda sería un increíble novio pero no para mi, no sentía lo mismo por él y pensé que al mostrarme un poco más sincera con él pudo malinterpretar las cosas, así que me sentí algo culpable.
Respire hondo y me giré quedando de frente, me sorprendí por que la expresión en su rostro me decía que sabía perfectamente lo que le respondería. Tome aire y entonces comencé a hablar.

–Gracias. Pero lo siento, en este momento yo...
No pude terminar de hablar.

–Lo se, te gusta alguien más -. No sabía que podía decir ante eso, era la verdad.– pero no planeo aceptarlo así como así, me gustas desde hace tiempo y quiero que estés conmigo, así que me esforzaré para que puedas enamorarte de mi.

–No quisiera que esperarás algo qué tal vez no pase.

–No quiero que las cosas sean incómodas entre nosotros, solo quería que supieras lo que siento por ti. No podía quedarme sin hacer nada mientras veo como ese tipo se la pasa pegado a ti -. Comenzó a caminar e hice lo mismo. –Vamos a casa, es tarde.

Después de eso las cosas siguieron igual entre nosotros, no quería alejarme de él no hay muchas personas en mi vida que me quieran como lo hace Kei. Estaba consiente de que era un poco egoísta pero pensaba que estaba bien por el momento.

...

Pronto regresaría a clases y quería pasar todo el tiempo posible con Mikey, así que lo invite a salir.
Siempre estaba ocupado pero cuando se trataba de nosotros dejaba todo lo que tenía que hacer de lado, pasábamos todo el día juntos. No era muy expresivo pero dejaba ver que lo disfrutaba.

Una vez después de entrar de nuevo a la universidad empecé a organizar mejor mi tiempo, no sé cómo lo hice pero encontré la forma de poder seguir viéndolo. Quería que nuestras salidas siguieran pero sin dejar de hacer mis obligaciones.
En ocasiones cuando tenía que pasarme toda la noche haciendo tarea Mikey iba a mi departamento y se quedaba ahí hasta que terminaba.
Comencé a tomarle un gusto a hacer tareas largas por la noche, aún cuando era agotador.
Mikey me esperaba afuera de mi trabajo para después ir por algo de cenar, al llegar cocinaba para él mientras jugaba con Sonnie o me observaba atentamente desde el sofá de la sala.
Cuando comenzaba con mi tarea me estaba en un cojín en el suelo frente la mesa de centro, permanecía un rato ahí hablando con Mikey mientras intentaba concentrarme en mi tarea y no pasaba mucho tiempo para que el sueño lo venciera y se quedara dormido en el sofá de al lado de mi, después de un tiempo despertaba para cambiarse al sofá que se encontraba justo detrás de mi y volver a dormir, colocaba su cara muy cerca de mi cuello y podía sentir su respiración rozando mi piel. Sentir que lo tenía tan cerca me hacía sentirme tranquila y mi ansiedad se iba por completo.

Las cosas avanzaban lento y me daba cuenta que él sabía casi todo sobre mi pero yo no sabía absolutamente nada de él, solo conocía a las personas que estaban con él el día que lo conocí pero nada más. No intentaba preguntarle aún qué tuviera demasiadas preguntas ¿Que hacía en su tiempo libre? ¿Por qué nunca me decía en qué se ocupaba exactamente cuando le preguntaba? ¿A que se dedicaba? ¿Por qué evadía cosas que tuvieran que ver con su pasado o con quien era en realidad? Y ¿Por qué sabía cosas de mi que yo no recuerdo haber mencionado?. Solo estaba dándole vueltas al asunto haciendo que las preguntas aumentaran y una voz me saco de mis pensamientos.

–Aún no terminas tu tarea? -. Sus voz sonaba algo ronca y cuando me giré su cara reflejaba que quería seguir durmiendo.

–Me falta un poco, puedes ir a dormir en mi habitación si te parece más cómodo.

Levantó su torso recargándose en su brazo para tomar mi mano y levantarme de dónde estaba y así lo hice.

–Ven aquí, ya haz hecho mucho por hoy.

Me recosté a su lado, el sofá era muy estrecho y nuestros cuerpos quedaron muy cerca, sentía el calor que desprendía de su cuerpo, sus brazos me rodearon por la cintura y escondió su rostro en mi cuello, para disponerse a dormir de nuevo. Lo rodeé con mis brazos y quede ahí sin poder procesar muy bien lo que estaba pasando, Mikey no era alguien muy cariñoso, de hecho después de lo qué pasó en la fiesta ni siquiera nos habíamos vuelto a besar, en algunas ocasiones era algo tierno y solía tomarme de la mano cuando caminábamos por la calle pero después regresaba a la normalidad.

–Mikey...

–Mmm?

–Por qué no me quieres contar más sobre ti?

–Cuando llegue el momento lo sobras. Pero...-Sentía como hablaba contra mi cuello y antes de continuar se separó un poco para mirarme a los ojos.-cuando lo haga tienes que quedarte conmigo.

Asentí para después atraer su rostro de nuevo a mi, hasta quedarnos dormidos.

A la mañana siguiente desperté en mi habitación pero Mikey ya no estaba.

...

Sin tener certeza de mis palabras cuando Mikey me dijo que tendría que quedarme con él le dije que si, sin siquiera pensarlo, y después de saber toda la verdad seguía pensándolo. A pesar de saberlo todo volvería a responder que si. Para mi Mikey lo era y seguirá siendo todo, no quería dejarlo solo nunca, conocía perfectamente el sentimiento de no tener a nadie o peor aún estar rodeado de personas pero a pesar de eso seguir sintiendo la soledad en tu alma y Mikey ya había estado así por mucho tiempo, incluso el simple hecho de imaginarlo no me gustaba y hacia qué me doliera el corazón, por que aún que al principio no sabía todo lo que había pasado el sentimiento de querer protegerlo siempre estaba ¿De que? ¿De quien? No lo sé, evidentemente es más fuerte que yo y puede cuidarse solo pero aún que eso sea cierto quería ponerlo en una cajita de cristal para que nadie más lo dañara, aún si él hacía cosas malas...

¿No debería de pensar así? Está claro que no ¿aún después de saberlo lo hago y acepto? Totalmente, perderlo terminaría por arruinarme y quebrar la frágil viga que sostiene todo mi dolor.

Sin duda Mikey cambio mi vida, de ser una vida monótona pasó a tener subidas y bajadas de muchas emociones y acontecimientos, tal vez no la cambio para bien pero hizo que mi tiempo que se había detenido desde el momento en que mis padres se fueron y todo comenzó a salir mal en mi vida empezara a correr de nuevo.

El momento de entrar totalmente a su vida estaba por pasar, conocer la verdad y lo que conllevaba, pasar de ser alguien irrelevante a ser la chica más respetada de probablemente todo Japón.

Leer sus comentarios bonitos me hace llorar brillitos jsjsj<3
Tal vez les suba otro capítulo más tarde pero no es seguro, si les gustaría que agregara algo en especial pueden dejármelo aquí y lo tomaré en cuenta:)