𝑴𝒚 𝒃𝒐𝒚 𝒊𝒔 𝒂 𝒄𝒓𝒊𝒎𝒊𝒏𝒂𝒍!

17

Al despertarme por la mañana, sentía mis ojos arder y un poco hinchados por haber llorado la noche anterior, el cielo seguía nublado pero la lluvia había cesado, se podía percibir un olor a tierra mojada y el aire algo frío. Mikey seguía acostado a mi lado aún dormido.

Poco a poco comenzaba repasar todo lo que había sucedido y quería saber cómo se encontraba Sanzu pero no podía preguntarle a Mikey y por lo que me había dicho anoche tampoco podía acercarme a él, pensé en preguntarle a los demás pero conociéndolos podrían decirle a Mikey que estaba interesada en saber cómo se encontraba, así que simplemente tendría que quedarme con la duda y esperar a que alguien mencionara algo al respecto.

Las cosas no resultaron del todo como esperaba pero me conformaba con saber que ya todo estaba bien entre Manjiro y yo después de un tiempo que para mi se había sentido una eternidad.
Pero aún que las cosas ya estuvieran "bien" no tenía la certeza de cuándo regresaría todo a la normalidad o peor aún no sabía si algún día regresaría a mi casa, al final de cuenta siempre terminaba haciendo lo que Mikey dijera.

La vida suele dar muchas vueltas y lo que antes era una vida monótona para mi se había convertido en una vida llena de subidas y bajadas, aún que parecía haber más bajadas que otra cosa. Mis planes siempre fueron arreglar un poco mi vida, terminar la universidad conseguir un mejor trabajo y huir, huir lejos, lo más lejos posible, donde no me alcanzaran mis tristezas, huir de todo lo que me traía dolor y buscar algo que aliviara la soledad en mi alma. Al principio cuando conocí a Manjiro creí que él era ese algo que me sacaría de la oscuridad en la que se encontraba mi alma, que sería la persona que me salvaría pero me equivoque, divagando por su vida y su pasado me di cuenta que él era el que necesitaba ser salvado y decidí dejar aún lado mi dolor y todo mi sufrimiento para intentar salvarlo, pero el pasado y los vestigios que este deja en la vida de las personas no se borran, solo se maquillan con momentos de felicidad. Me había decidido a salvarlo que había olvidado voltear hacia atrás y ver todo lo que había cambiado en mi vida. Por querer ayudarlo mi vida había terminado de desmoronarse, había perdido mi trabajo, el año que llevaba en la universidad, no podía acercarme a mis amigos por miedo a que les sucediera algo y el positivismo que siempre intentaba tener se había ido a la mierda con todas mis ilusiones de ser feliz. Pero a pesar de eso no me arrepentía de haber conocido a Manjiro y si me dieran a escoger regresaría a ese lugar donde lo vi por primera vez y decidiría ir a esa fiesta donde comenzó todo. Por qué ahora mi vida le pertenecía, ya no tenía nada más y si lo dejaba regresarían esos pensamientos que rondaron mi cabeza tanto tiempo, el querer acabar con todo de una vez. Era irónico que una persona pagada casi por completo se volviera en la luz que guiaría mi vida de ahora en adelante y tal vez por mucho tiempo, así que a causa de eso me había propuesto convertirme en una luz tan brillante para el que pudiera seguir a cualquier parte sin importar dejarlo todo y a la cual pudiera seguir por mucho tiempo.

No sabía cómo se sentía Mikey por que aún no e podido lograr que confíe del todo en mi, pero por lo poco que dejaba ver, sentía miedo de perderme y usaría eso para salvarlo. Lo intentaría una y otra vez hasta lograrlo, dejando atrás el preocuparme por cualquiera me enfocaría solo en él, eliminar piezas del camino que solo estorban y seguir avanzando, ese es el plan de ahora en adelante.

Seguía concentrada en mis pensamientos que no me había percatado que Manjiro había despertado.

–T/n... t/n?

–Si?

–Despertaste hace mucho?- dijo para volver a rodearme con sus brazos.

Verlo a un lado mío actuando tan indefenso me hacía sentir que el tiempo pasaba muy rápido y necesitaba sacarlo de esto lo antes posible no importaba qué ni quien, así fuera lo último que hiciera iba a cumplirlo.
Había imaginado todo tipo de cosas para mi vida, pero jamás esto, el darlo todo por alguien que no fuera yo era algo totalmente nuevo para mi.

...

La mañana había pasado bastante tranquila, cuando bajamos a desayunar solo estábamos nosotros dos en la mesa y no había mencionado nada respecto a la noche anterior o Sanzu.
Lo sentía diferente, como... más... sincero, creo que es la palabra correcta. Un poco más libre, durante todo el desayuno hablo mucho, hablaba de cualquier tema trivial que se le viniera a la cabeza, me gustaba el sonido de su risa y escucharlo hablar de esa forma así que solo me limitaba a contestar lo necesario para que la plática siguiera fluyendo y por escucharlo más tiempo.

Al final cuando terminamos, decidió quedarse en casa y pasar el resto del día conmigo, habíamos estado en la habitación unas horas pero después de un rato logré convencerlo de que saliéramos un momento.
Así que nos dirigimos afuera de la casa y a un costado de esta había una cancha para jugar basquetbol y a su alrededor unas bancas en las cuales decidimos sentarnos. Como se encontraba justo a un costado podíamos ver quien llegaba o salía de la casa.

La tarde era agradable, el sol había salido y cuando comenzaba a ocultarse iluminó las nubes que seguían en el cielo haciéndolas de un tono dorado y algo naranja, el frío ya no era intenso y solo se podía sentir el aire ligeramente fresco.

Al paso de un rato y justo antes de que el sol se ocultara por completo llegó uno de los autos de los cuales bajaron Koko y Takeomi, y para mi sorpresa ayudaron a salir a Sanzu.
Tenía moretones y pequeños cortes por toda la cara a causa de los golpes, estábamos algo alejados pero podía distinguir marcas en su cuello, evidentemente no podía apoyar una pierna en la cual había rozado la bala. Nos miraron y entraron a la casa, solo pude apartar la mirada rápidamente y dirigirla a cualquier otro lado apartado de ellos, aún mi mirada no estuviera en Mikey sabía que me observaba y cuando el ambiente comenzaba a tensarse comenzó a hablar de nuevo como si nada hubiera pasado. Mi corazón volvió a un ritmo normal, seguramente venían del médico o algún lugar donde pudieran curarle las heridas, saber que había cumplido lo que dijo me tranquilizaba. Regrese toda mi atención a Mikey y cuando la noche cayó por completo decidimos entrar.

Planeaba irme a mi habitación después de cenar pero Manjiro me pidió que durmiera de nuevo con él así que accedí.

Las cosas a penas comenzaban a calmarse pero quería saber cuándo volvería a mi departamento, cuando las cosas terminarían de ser de esta forma, no quería que lo tomara a mal o lo malinterpretará así que pensé en dejar pasar unos días para intentar tocar el tema.

Pasar los días en donde no había nada a kilómetros es muy aburrido pero no solo eso, aquí no puedo hacer nada para ayudarlo y tal vez en la ciudad pueda hacer más, aún que ni siquiera sé qué es lo que tengo que hacer exactamente, ¿como podría hacerlo? ¿Que necesita pasar para hacer que mi plan comience a avanzar?

El tiempo avanza pero la respuesta a mis preguntas sigue sin ser clara, sigo sin poder saber qué hacer para ser feliz o hacer feliz a la persona que más me importa... y por el contrario solo parezco retroceder...

Espero poder subir capítulo más pronto pero aún sigo algo ocupada:(
Este capítulo es algo corto pero intentaré subir uno mañana temprano<3
Gracias nuevamente por el apoyo y sus comentarios tan lindos y algunos otros que me hacen reír mucho jajajaja son muy ocurrentes, me hacen feliz:)) lxs tqm:3