Lazos de Sangre 🧛‍♂️🐺 [Todobaku].

Capítulo 7: Encuentro Carnal.

Las gélidas montañas mostraban un sol frío de la mañana. Bakugō abrió los ojos con algo de entumecimiento. Estaba acostumbrado al calor de las Tierras de la Muerte. A partir de esa mañana tendría tres días para conseguir la pulsera. Estaba seguro que el celo de Izuku habría empeorado mediante pasaran los días, por lo que entendió debería hacer la misión solo. Dejaría a Kirishima vigilando a Midoriya y al príncipe Natsuo.

Se levantó dispuesto a darse un baño. Al abrir la puerta se encontró con Shotō.

—Buenos días Kacchan— le saludó el bicolor.

—Príncipe— le dijo Bakugō algo sorprendido por esa visita.

—¿Desayunamos?— preguntó el vampiro.

—Iba a las termas primero— le dijo el cenizo.

—Te espero en el comedor de cristal— dijo Todoroki retirádose.

Bakugō le dio una mirada en la mano, aún llevaba la pulsera.

—Maldición— se dijo. Cerró la puerta de su habitación y se dirigió al final del pasillo.

Mientras que dentro del castillo, Enji y Shota se encontraban en un lugar oculto de la biblioteca. Habían encontrado un pasadizo tras un antiguo mueble. Las pistas del padre del pelirrojo los habían llevado a ese lugar.

—Aquí está— dijo Aizawa tomando un enorme libro negro con piedras escarlatas—. Lo que hablaba tú padre.

Enji lo tomó y se dirigió a una silla. Se sentó viendo el libro, Shota se puso a su lado.

—Aún no entiendo porque mí padre te confió algo tan importante— le dijo el pelirrojo.

—Tal vez se deba a la lealtad que te tengo. Sabe que moriría por ti— dijo el pelinegro mirando el libro.

—¿Morirías por mí?— preguntó Enji.

Aizawa se sintió ligeramente tímido.

—Sí mí Rey, yo moriría por ti— le dijo Shota.

Enji lo tomó sutilmente del rostro viendo esos fríos labios, se acercó a ellos y los besó. Aizawa abrió los ojos como plato, la boca de su Rey era suave y dulce. Se dejó llevar mordiéndolo. La sangre de aquellos filosos dientes hacía que el líquido cayera suavemente.

El Rey se separó viendo a Shota a los ojos. El pelinegro se pasó la lengua por los labios sacando el exceso de sangre.

—Rey, nosotros no podemos.

—No podemos que— le dijo Enji bucando sus labios.

—Faltar a la realeza— dijo Shota—. Soy— su boca fue acallada por un húmedo beso—. Re-y.

—Yo decidiré lo que es bueno y no para el Reino de Hielo— le dijo Enji.

Aizawa lo miraba.

—Pero.

El pelirrojo le dio un corto beso.

—Veamos que dice el libro respecto a esos malditos perros— le dijo Enji.

Shota asintió. Ambos continuaron revisando el libro.

Bakugō al fin salía de las termas. Luego se dirigió al comedor de cristal, ahí estaban los tres hermanos, sentados.

—Dijo el Mago Red Riot que desayunará con Deku, ayer lo atendí y hoy también le daré la medicina— dijo Natsuo mirando a Bakugō.

Fuyumi miró a su hermano .

—Gracias por tu ayuda príncipe, ayer se sentía algo indispuesto Deku— dijo el cenizo tomando asiento—. ¿Y el Rey?— preguntó interesado.

—Mí padre se encuentra ocupado— le dijo Fuyumi con una sonrisa—. Está atendiendo algunos asuntos del reino.