Ambas se miraron a los ojos con total ira. Respire profundamente.
-¿Cómo se enteró mi madre de que vivía en casa de Angie?- pregunté después de permanecer unos segundos en silencio.
-Yo le dije.-
-¿Y quién demonios te pidió que lo hicieras?- reclamó Angie. Yo solo la fulminé con la mirada y cerró la boca.
-Estaba preocupada, además pensaba llamar a la policía y reportarlo como secuestro- explicó
-¿Preocupada?- carcajee.
-Bri lo siento, ella sabía que yo tendría que saber dónde estabas viviendo, no pude decirle que no. Además creí que era lo correcto. No solo para ti, también le salvé el pellejo a esta y mira como agradece.-
-Imbécil- dijo Angie dándose la media vuelta -Como si necesitara tu jodida ayuda-
-¡Ann!- le llame de nuevo haciéndola callar.
-Creo que deberías de regresar a tu casa...-
-Tú crees muchas cosas eh- una vez más Angie con su dulce tono de hablar.
-Martina por favor no le des información de mí y mucho menos de Angie, tú sabes perfectamente que a mí me pone mal vivir en esa casa. No es buena nuestra relación y lo sabes de sobra. De todos modos si no vivo con Angie buscaré un hotel o algún otro lugar- ambas palidecieron.
-Ni lo pienses- ambas dijeron al unísono, al menos tenían algo en común
-Ya, ya- repetí tranquilizándolas -Entonces por favor sea lo que sea que te pregunte mi madre no le respondas nada- la señalé -Ya vámonos o no nos dejarán entrar- afortunadamente aun no tocaba el timbre, Martina tomó su mochila antes de entrar al edificio. Esperé a que Angie se acomodara la chaqueta. Gustosamente ya que me encantaba como le lucia.
Caminábamos por el pasillo cuando sentí la mano de Angie apoderarse de mi cintura, delicadamente pero a la vez firme.
-Mierda Brisa... no me gusta que traigas esos vestidos- su aliento en mi oído me provocó cosquillas y me retorcí levemente entre sus brazos.
-No shorts, no vestidos, no faldas- reclamé -¡Eres peor que el reglamento del colegio!-
-No sabes la impotencia que me da ver que te volteen a ver y no poderles partir la cara.-
-Creo que tú solo te das cuenta de las cosas que te convienen...- tomé su mano.
-¿A qué te refieres?- preguntó sin entender.
-Mira a la derecha...-
-¿Que hay?- susurró después de voltear y no encontrar nada sospechoso.
-Izquierda.-
-¿Qué?- dijo aún sin comprender.
-Míralas... Todas susurran cuando pasamos- afinó la mirada -No soy a la única que ven como un pedazo de carne- volteó hacia otro montón de chicas que secreteaban.
-No entiendo- ¿De verdad no se daba cuenta o fingía? Al pasar nos miraban y Angie había atraído más público femenino al salir conmigo. Era imposible que no se diera cuenta de las estúpidas esas que ahora babeaban por ella. -Oh- formó una 'o' con sus labios -Creo que entiendo- sonrió y levanto una ceja.
-¡Por qué sonríes así!- le reclamé y la golpee en el estómago.
-¿Ves lo que se siente?- carcajeó.
-Eres una idiota- me crucé de brazos.
-Hey- me abrazo por detrás pero yo seguía caminando, acomodó su cabeza sobre mi hombro -Sabes que a mí solo me interesas tú- mordí mi labio inferior. Me encantaba que dijera cosas así -Pero aun así no quiero esos vestidos.-
-No empecemos- no quería iniciar una discusión.
Nota:
Volví uwuwuwuwu
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me, myself and her | brangie #2 (terminada)
FanfictionBrisa y Angie ahora se enfrentan a nuevos obstáculos, ¿Podrán superarlos?