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—¿Te puedo contar algo?— en respuesta, levanté mi ceja, esperando por que prosiguiera. —Estoy muy enamorado.— solté una risa y metí un bocado de okonomiyaki a mi boca.

—Basta, por favor, me sonrojas.

—¡Eso es lo que trato! Ah~— dijo al final abriendo la boca, pretendiendo que yo lo alimentara.

Solté una risa y con mis palillos tomé un poco para dirigirlo a su boca. Se lo comió con una sonrisa, mirándome, y finalmente lo tragó.

—Eres muy lindo, Sasara.

—Ah~— dijo imitando su acción de hace un momento, lo que ocasionó de nueva cuenta mi risa. Esta vez, no le acerqué comida, sino que me acerqué yo a besarlo. Él, en respuesta, soltó un gritito y comenzó a brincar en su lugar. —Muy, muy enamorado.— agregó acercando su mano a mi mejilla y acariciándola.

—Yo igual. Estoy muy, muy enamorada.

—¿De mi?

—No, de mi trabajo.

—¡Hey!

—Y de ti, por supuesto.— todo rastro de indignación se fue, dando paso a una gran sonrisa de autosuficiencia. —Tengo una audición más tarde, y estoy sumamente nerviosa.

—No, no lo estés. Yo confío demasiado en que lo lograrás. Ya es tiempo de que tengas tu primer papel importante.

—Dile eso a los directores; tal pareciera que me odian.

—No han sabido apreciar tu talento. Recuerda que las mejores oportunidades siempre están en camino, sólo hay que esperar por ellas.

—¿Tienes algo que hacer dentro de media hora?

—Depende.— levanté una ceja —Si mi novia necesita de mi ayuda, no tengo nada que hacer.

—¿Y si no necesitara tu ayuda?

—Tengo que ver a un productor para algo del programa, pero él puede esperar. ¿Qué necesitas?

—Aww, eres un muy buen novio.

—Trato de serlo. Ve todo lo que hago con la esperanza de recibir a cambio un beso.

—Vas a recibir muchos, créeme.— dije antes de acercarme a unir nuestros labios. —Apúrate a comer para que no llegue tarde a mi audición.

—Si, si.— respondió y esta vez comió por si mismo.

    

SASARA

—Ya llegó por quien lloraban.— dije entrando a la oficina. En ella, ya se encontraba mi representante y, supongo, el productor con quien nos reuniriamos.

Lo saludé y proseguí a tomar asiento.

Él comenzó a hablarnos de planes, propuestas... mucha información para procesar; sólo presté atención al final.

—Los miércoles a las 10 de la noche supongo que seria un horario adecuado. Nurude-san no tendría porqué limitarse con los chistes o algo parecido, ya que los niños, por lo regular, a esa hora ya no miran televisión.

—Wha~. Un horario importante, ¿huh?

—Digamos que si. Los horarios anteriores son más enfocados a noticieros y, algunos a anime.

—Perfecto. Entonces así será, ¿le parece si voy a imprimir el contrato y lo firmamos de una vez?

—Claro, no hay problema.

—Bien... lo dejó en buenas manos.— dijo mi representante y salió de la oficina, dejándome solo con el productor.

—¿Y usted de casualidad no se dedica a algo relacionado con el anime?

—¿Nurude-san?

—Si, digo, al ser productor, podría verse involucrado en eso. Sólo es curiosidad.— él rió.

—Pues, no es mi fuerte; sin embargo, voy a apoyar un proyecto de anime. En un par de semanas comienza su grabación de voces así que, estaré un poco ocupado. Por eso mi urgencia de verlos para cerrar el trato.

—Oh, ya veo... ¿y ya tienen una voz principal?

—Seguimos en eso. Nos encantaría que una de las seiyuus del momento estuviera dentro del proyecto, pero ya se encuentra grabando así que eso es imposible. Nuestras audiciones comienzan la próxima semana.

—Ya veo, ya veo... y, si yo le dijera que tengo a la persona indicada para ese papel, ¿me diría que si?

—Bueno, Nurude-san, el director encargado es quien toma esas decisiones y...

—Pues hable con él. Yo les pasaré el contacto de alguien que va a estar libre, es muy talentosa, busca una oportunidad y será su salvación para dicho anime.

—B-bueno...

Insistente.

Si, esa palabra me gusta y me define.

     

______.

Una vez más, no tuve suerte. Pero, si algo me ha enseñado la vida y Sasara me lo repite todo el tiempo, es que las mejores cosas están por llegar, así que simplemente suspiro y continúo mi camino.

Hoy quedamos de vernos para cenar juntos en su casa. No celebramos nada que yo recuerde, nuestro aniversario acaba de pasar, pero bueno, tengo que ir a mi departamento a bañarme y arreglarme. Fue un largo día.

Justo antes de entrar al edificio, mi celular comienza a sonar. Era un número desconocido, así que Sasara no era.

—¿Hola?

—¿(a)_____ ______?

—Si, ¿en qué puedo ayudarle?

—Bueno, hace poco hiciste una audición para un anime que estamos produciendo pero, no quedaste.

—¿Podría ser más especifico? No he quedado en más de 10 audiciones, y eso, sólo en esta semana.

—Bueno, tenemos una nuevo anime en puerta y, me parece que usted podría hacer al personaje principal. ¿Le gustaría venir a la audición?

—Eh... yo...

—______-san, confío plenamente en que es la persona indicada para el papel. La audición sería pasado mañana, a las 11 en el estudio Hisatake.

—C-claro, estaré ahí puntual. Muchas gracias por la confianza.

Si hace dos minutos no teníamos nada que celebrar, ahora si que hay una razón.

▪︎☆▪︎

Chan, chan, chan, chan~

「Melon Cream Soda」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora