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Luego de aquella desastrosa reunión a Xingqiu no le quedó de otra que volver a su casa y continuar con su respectivo horario impuesto por su estricto padre. 

Ahí, sentado en la parte trasera del vehículo que su padre había mandado para ir a buscarlo a la escuela, los sucesos de los minutos anteriores volvieron a su mente.

Xinyan y Hu Tao eran dos de sus grandes amigas, y siempre se reía con sus bromas. 

Pero Chongyun...

Él no se reía en lo absoluto.

Bueno... nunca lo había visto reír, y probablemente nadie más que sus padres lo hayan hecho.

El peliceleste había empezado a temblar de solo ver a esas dos, y si, habían sido algo crueles echando a perder las paletas de helado de aquel chico. Y ahora, en el asiento de aquel auto se lamentaba no haber hecho algo más. Ni siquiera sabía porque no se movió, o dijo algo, dejó que esas dos continuaran burlándose de Chongyun hasta que no le quedó de otra que huir de ahí.

Suspiró en cuanto notó que el auto había estacionado, abrió la puerta y salió de éste listo para adentrarse a su casa. Al llegar saludó a su padre lo más rápido posible en un intento de correr hacía sus responsabilidades sin tener que dialogar con su progenitor.

Aquello era algo que intentaba a menudo ya que las charlas con su padre no eran del todo placenteras por el simple hecho de que su padre disfrutaba tirarlo abajo con sus motivaciones, o presionarlo en sus clases.

-Xingqiu, querido hijo mío, ven a sentarte y tomar un té con tu querido padre.-Sugirió el mayor con una sonrisa.

-Lo siento padre, tengo clases de francés.-Respondió apurado logrando subir un escalón antes de ser interrumpido por el mayor nuevamente.

-Si pero aún te quedan, 2 minutos con treinta y siete segundos para tu clase, puedes hablar un rato con este viejo.-Insistió por lo que no le quedó de otra que obedecer y mostrar buena cara.

Tomó asiento en la sala donde ya e encontraba el té listo para ser ingerido, su padre se sentó en frente y con una sonrisa comenzó hablar.

-¿Qué tal las clases?-

-Todo bien, mis notas son las mejores de la clase.-Aseguró.

-¿Y el trabajo que tenías para hoy?-Indagó dando un sorbo a su taza.

-Avanzamos con rapidez.-Mintió.

-Me alegro mucho.-Contestó con una sonrisa, Xingqiu por otra parte asintió listo para abandonar la sala.-¿Hiciste amigos?-Preguntó de repente captando la atención del peliazul.

Xingqiu se sintió confundido por aquella extrañaba pregunta, ¿Por qué de repente se interesaba por eso? ¿A caso había algo malo con sus amigos? ¿Otra vez debían tener una charla sobre apariencias?

-Supongo... ¿Por qué la pregunta?-Quiso saber.

-¿Hiciste amigas?-

-¿Amigas?-Repitió confundido.

El mayor acabó levantándose de su lugar para acercarse a su hijo.-Vamos Xingqiu ya eres grande, el año que viene cumplirás 18, y aún no has traído ninguna novia.-

Aquellas palabras dejaron perplejo a Xingqiu quien tuvo que pestañar repetidas veces para salir del trance en el que se encontraba.

-Lo siento, se me hace tarde.-Acabó por responder para abandonar la sala corriendo.

Nunca antes se había planteado la idea de salir con alguien, jamás pensó en eso porque sus únicos pensamientos eran satisfacer a su padre, pero aquella idea no pasó por su mente.

Xingyun au | Quiet Boy❄️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora