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-Excelente trabajo Xingqiu, te felicito.-Soltó la profesora con una sonrisa.-Chongyun.-Llamó la mujer.

El peliceleste tomó aire mientras se mordía el labio inferior nervioso, había llegado la hora, se levantó de su asiento y se acercó al escritorio de la profesora a la cual debía recitarle su trabajo, no era algo tan malo como dar la lección frente a todos sus compañeros, pero aún así no podía evitar sentirse nervioso.

El resto del alumnado comenzó a charlar entre sí, los únicos que parecían pendiente del peliceleste eran Xingqiu y Hu Tao. Ésta última mantenía su vista fija en él, y una sonrisa llena de maldad apareció en su rostro, de inmediato se levantó de su asiento y alzando una mano habló lo suficientemente alto para ser escuchada por toda el aula.

-Disculpe profesora.-Llamó interrumpiendo la charla entre la maestra y el menor.-Me parece que es muy injusto que todos hayamos tenido que dar nuestro trabajo en frente de toda la clase y Chongyun pueda darlo en su escritorio.-

-Si, es verdad, hay muchos compañeros que estuvieron muy nerviosos en la lección y pudieron haber pasado al escritorio pero usted no los dejó.-Acotó otro compañero.

-¿Qué tiene Chongyun que lo hace tan especial?-Quiso saber Hu Tao con una mirada totalmente desafiante hacía Chongyun. Ella sabía desde hacía tiempo que ese chico tenía algo, que había algo extraño en él, por algo nunca dejaba que nadie se le acercara, y comía siempre paletas, por eso los profesores tenían extremo cuidado con él, y ella quería saber que rayos tenía y usarlo a su favor.

A Xingqiu le hervía la sangre de solo escuchar a Hu Tao hablar por lo que acabó levantándose de su asiento molesto.-Eso no es de tu incumbencia.-

-Hu Tao tiene razón.-Se escuchó una voz, de inmediato todos voltearon a verlo. Chongyun había alzado la voz para ser escuchado por sus compañeros y dar su punto de vista.-Debería dar la lección al frente como lo hicieron todos.

-Pero Chongyun...-Quiso hablar la profesora y convencerlo de que no era necesario.

-¿Yun estás seguro?-Preguntó el peliazul acercándose a su amigo.

El de ojos celestes se rascó la nuca algo dudoso pero acabó asintiendo, debía superar sus miedos, ya era hora.

-Bien, silencio por favor.-Pidió la profesora sentándose nuevamente en su escritorio al igual que el resto del alumnado.

A pesar de haber dicho que lo haría se sentía muchísimo más nervioso que antes, sus manos que sostenían su escrito temblaban y podía sentir la mirada de todos sus compañeros clavadas en él.

Xingqiu lo observaba atentamente, incluso ya había agarrado una de las paletas de Chongyun listo para entregárselas si es que se ponía peor.

-¿Y?-Se escuchó de fondo.

-No va a poder.-

-¡Silencio!-Pidió nuevamente la profesora lanzándole miradas fulminantes aquellas personas que habían alzado la voz.

Chongyun sentía su temperatura subir poco a poco cada vez más y más. Cerró los ojos fuertemente mientras intentaba regular su respiración, estaba a punto de sucumbir ante un episodio, pero no dejaría que eso pasara.

Observó la puerta de salida a su izquierda y la tentación por correr hacía ésta y huir, pero no podía hacer eso, aquello solo sería darle la razón a Hu Tao, y más motivos para que ella se burlara de él y ya estaba cansado de eso.

Dio media vuelta y dándole la espalda a todos sus compañeros comenzó a leer su trabajo.

-"Xingqiu; segundo hijo del Gremio de Comercio Feiyun, algunos lo conocen como "El hijo mimado", "El chico perfecto", y el mejor de la clase. Por más que es nuevo en la clase ha logrado hacer amigos y adaptarse muy facilmente.

Xingyun au | Quiet Boy❄️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora