Homenum Revelio [Wizarding World Headcannons]

Imperdonable♡

Una gran tormenta se avecinaba.
Las afueras del castillo quedarían prácticamente inundadas, incluyendo el escenario que Frank había elegido para su primera cita oficial con Alice Fortescue.

—Cuando por fin tienes el valor de invitarla a salir, la lluvia arruina tus planes, una verdadera tragedia, un picnic tenía que ser, Frank, eres un tonto.— Pensó el jovencito, mientras observaba con inquietud la lluvia empecinarse en caer. Volteo a ver a la chica quien se aproximaba ya, envuelta en una hermosa aura de paz.

—Y allí viene Alice, con aire relajado y sin imaginarse que nuestros planes se han arruinado. —Murmuró para sí mismo.

En los minutos que transcurrieron mientras evaluaba la gravedad de la situación, no había logrado encontrar las palabras adecuadas para disculparse correctamente.
Sintiéndose culpable y obviando que los cambios repentinos en el clima eran los causantes de tal situación pensó:

Me odiará por siempre, eso es seguro.

POV Frank

—Hey Frank. Entonces, ¿Qué vamos a hacer hoy? — preguntó Alice tímida y amablemente.

 Confieso que me esforcé de sobremanera para no echarme a llorar.

—En mi defensa Alice, tenía todo planeado, ¿mira ves la sombra bajo ese árbol, junto al lago?, ahora no ves ninguna sombra porque está lloviendo, pero si el clima estuviera a nuestro favor el día estaría soleado. Entonces habríamos extendido esta manta color celeste, comeríamos los bowls de fruta que corté yo mismo sin magia, beberíamos un par de cervezas de mantequilla, y pasaríamos un día increíble, entiendo que no quieras salir conmigo nunca más, todo es mi culpa, debí tener un plan b.— Había dado un monólogo completo de forma exasperada.

—Tranquilo Frank, no estoy para nada molesta. Y agradezco que tuvieras la molestia de tener todo planeado. Es más, nos sentaremos justo aquí y pensaremos en una solución, ya verás qué se nos ocurre algo. —Dijo ella sonriéndome. Tomó de mi mano invitando a colocarme a su lado en aquel improvisado asiento mismo que era el piso.

Allí estaba el positivismo y mirada dulce que entregaba Alice, jamás se daba por vencida, debatía lo que no era justo, y no aceptaba excusas. "Paciencia y Dedicación" ese era su lema. Había cautivado mi frágil corazón desde aquella noche en segundo grado, muchos estudiábamos para el examen de encantamientos, ella entregaba galletas preparadas y horneadas al estilo muggle. Al estilo muggle de Alice por supuesto.

Todos terminamos en enfermería después de eso.

Hubieran visto la mirada culpable que llevó por semanas encima.

—Probablemente es más fuerte, inteligente, talentosa, e imaginativa que yo ¡Qué  maravilla de Mujer! —Pensé mientras miraba disimuladamente su bonito perfil.

Podría nadar en el azul de sus ojos, unir constelaciones con las escasas pecas que le adornaban el rostro. Distinguiría entre muchas personas su preciosa cabellera negra. Ella es un sueño, la chica más hermosa que mis mortales ojos hayan visto.

...

—Por Merlín, ¿Frank conseguiste mini sombrillas para las cervezas de mantequilla?, —Preguntaba con fascinación Alice. — Solo las había visto en la heladería de mi tío abuelo en el callejón Diagon...

—Supuse que te gustarían, con el picnic bajo el árbol era perfecto, ya sabes por qué te gusta la naturaleza y todo eso. — Respondí, y solté una pequeña risa.

—¿De qué ríes?,—preguntó entre molesta y divertida.

—Es increíble que nuestro picnic se haya trasladado aquí a los invernaderos. Si la profesora Sprout nos ve, pasaremos unas buenas horas en detención. —Me detuve un momento para reunir algo de valor para soltar lo próximo que mis labios iban a pronunciar.

— Pero ¿sabes qué, Alice? Contigo lo que sea.

...


Las siguientes horas nos las pasamos hablando de muchas cosas, entre ellas, Alice trató de explicarme cómo funcionaba algo llamado ¿fotosíntesis?, que había leído en un libro muggle en las vacaciones. Si soy sincero no entendí nada, pero comprendí que mi corazón siempre le pertenecería a ella, y solo a ella.

Estoy perdidamente enamorado, y ahora mismo la imagen de Alice vestida de novia, o una versión adulta de nosotros acompañando a nuestros hijos a comprar sus primeras varitas en el callejón Diagon. Por ahora tan solo son ilusiones que deseo vivamente con el corazón, llegar a cumplir algún día.

Un impulso me hizo preguntar; —Alice, si tuvieras un hijo ¿Cómo lo llamarías?

Me dio otra de sus cálidas sonrisas, y sin titubear contestó; —Neville, así lo llamaría.

.....

El destino de los Longbottom es imperdonable.