𝑫𝐞𝐯𝐨𝐭𝐞𝐝 𝑻𝐨 𝒀𝐨𝐮 ⫸𝐎𝐧𝐞 𝐒𝐡𝐨𝐭𝐬 𝐎𝐟 𝐁𝐢𝐥𝐥 𝐒𝐤𝐚𝐫𝐬𝐠å𝐫𝐝⫷

❖05.➽ 𝑬𝒍 𝒑𝒍𝒂𝒄𝒆𝒓 𝒅𝒆𝒍 𝒏𝒊𝒏̃𝒐.

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The Kid
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____________ era una de las mejores psicoanalistas que tenía Castle Rock, de hecho, era una de las muy pocas que había. Había vivído en ese lugar media vida, tuvo que irse para terminar sus estudios. No tenía un gran consultorio, pero los que iban no se quejaban de ellos, su casa estaba alejada de las demás, ganaba mucho dinero, el suficiente y más como para irse del país y tener una vida con un poco de lujos, pero había preferido quedarse y ahorrar.

A pesar de sus triunfos y múltiples logros que había conseguido a lo largo de su vida, la tristeza y melancolía eran sus compañeros de rutina diaria; su matrimonio fallido y su hija fallecida. Después de terminar su tercer año de psicología, conoció a un hombre, con quién contrajo matrimonio, pensó que tenía su vida resuelta, una buena carrera, un amble y amoroso esposo y, un tan esperado embarazo. Sin embargo, ella padecía de un extraño sindrome, el síndrome antifosfolípido, eso le impedía tener un bebé, trató de cuidarse lo más que pudo, procuraba tomar sus vitaminas, ellos anhelaban con locura ese bebé. Una noche, el septimo mes de embarazo, sufrió un aborto espontáneo. Su esposo la apoyó en esos momentos, pero a pesar de eso, ella se encerraba en sí misma, convencida de que todo era su culpa, él terminó por cansarce y peir un divorcio, eso no hizo más que empeorarla.

Tiempo después de que él se fuera, se enteró, por medio de sus amigos en común, que había vuelto a casarse, alguien un poco más jovén y apta para tener un bebé. Se enfocó en retomar su vida y recoger los pedazos de su tan herido corazón y seguir adelante sin pensar en él. Hace muy poco se había enterado de un chico hallado en el fondo de la "Penitenciaría Estatal Shawshank", no haría más que dejarlo pasar, no tennía nada que hacer con respecto a eso.

Mientras descansaba en su hogar, recibió una llamada proveniente de la Penitenciaría. Al parecer no podía dejarlo pasar, se vistió con su ropa formal y en su carro se dirigió hacía allá, mientras conducía no dejaba de pensar en el chico, no sabía nada de él, no sabía si era un psicópata o no, y no sabía si la pondrían cara a cara con él o si se verían a traves de un cristal.

Los oficiales le abrieron paso para que entraran, mientras caminaba vio a un hombre de color, con un traje, de alguna manera se le hizo conocido pero no dijo más. Un oficial le indicó que entrara a una habitación, que no habría de que preocuparse, habrán refuerzos detrás de la puerta. ____________ entró, el chico que estaba sentado encorvado y mirando a la nada desvió la mirada para verla.

- Hola, soy la Doctora ___________. ¿Cuál es tu nombre?.- empezó preguntando. El chico no respondió, simplemente la miraba en silencio. Ella suspiro icnómoda y se sentó en la silla en frente de él.- ¿Podrías decirme algo de ti?.

Igual que antes, no obtuvo respuesta. ___________ hizo un montón de preguntas, que nunca fueron correspondidas, él nunca dejo de observarla, sus profundos ojos bicolores, un rojo tan similar al de la sangre, y un azul que a pesar de lo peculiar que era, no dejaba de ser lindo, esos ojos de diferentes colores le causaban escalofríos y no de miedo, sino de algo que no sabía explicar. Así fueron sus siguientes sesiones, fueron pocas pero largas. Los policías no podían escuhcar lo que hablaban, o lo que hablaba ella, pues él seguía sin responder.

También, durante sus sesiones, su tristeza aumentaba más sin razón. El chica cada vez empezaba a confiar más, no decía nada sobre él pero conversaba sobre la vida de ella. __________ llegó a pensar que eran algo parecido a unos amigos, aunque no sabía nada de él. A pesar de eso, no dejaba de lado el profesionalismo y trataba de seguir con su trabajo, también mantenía cortas charlas con su abogado, Henry Deaver, el nombre que dejaba de repetir. Esa mañana sería la última que compartirían, él tendría una audiencia, y además le habían dicho que ya no la necesitaban porque no aportaba con la información que requería.