El Libro De Gabriel Agreste

El fin.

Casi imperceptibles los días pasaron, mismos que Gabriel utilizó para acabar su gran obra. El último capítulo del libro de Gabriel ya estaba escrito y Nathalie no podía evitar mostrar su emoción.

La mujer que ya vivía a base de café para no dormir y no tener pesadillas, era la más aliviada de que aquel capítulo sería el último que sus ojos tendrían que repasar. Sabía que podría soportarlo, después de todo, si su mente soportó leer la descripción de la ducha del "sexy villano", lo podría soportar todo.

Capitulo 13: Trece y último.

Autor: alguien bello con el sobre nombre de Mr. Dólar.

El sexy villano miraba como finalmente, después de haber derrotado a los mocosos (que el seductor autor ni siquiera se iba a molestar en imaginarse unas identidades civiles para ellos) se apoderaba del mundo.

El guapísimo villano: Ms. Euro, ¿podría venir?

La seductora voz del ardiente villano se escuchó y la malvada, terrorífica y considerablemente atractiva secuaz del mal que para nada se llamaba en realidad Nathalie, fue con él atendiendo el llamado que su candente boca emitió.

Ms. Euro: Digame mi extremadamente irresistible jefe.

El guapísimo villano: Hagamos una última mariposa (para nada llamada akúma como los de verdad)

Ms. Euro: aparte de guapo, sexy, ardiente, fornido, joven, valiente, apuesto y agraciado, también es inteligente.

El guapísimo villano: lo sé.

*el ardiente villano mandó una mariposa malvada y mariposeó (que para nada era como akumatizar) a una persona afortunada de haber sido elegido, que se encontraba bostezando*

El guapísimo villano: mariposeado, yo soy el Mariposon y tu eres de los pocos afortunados en conocerme, los desmayos de emoción déjalos para después. Te doy el poder de dormirte. Ya tengo los miraculous de los mocosos, así que puedes descansar.

*El personaje que no iba a ser mencionado con detalles en la historia comenzó a llorar agradecido de poder conocer a su ídolo, el más grande villano de París y se transformó para dormirse*

Y así con el dominio mundial, el ardiente villano más amado por todos terminaba este libro igual de hermoso que la cara del autor.

El fin.

-¿Qué te pareció?

Preguntó el hombre observando como Nathalie terminaba de leer la última hoja con su normal mirada de espanto, seguro habitual en ella a la hora de leer, mientras poco a poco la asistente esbozaba una sonrisa al ver el preciado "Fin" escrito.

-PRECIOSO.

De todo el libro, su parte favorita había sido cuando se terminaba.

Ageno a lo que pensaba su querida asistente, el hombre le extendió una memoria USB con una sonrisa extasiada.

-Bien, llévalo a la editorial Mariposa, la editorial que creé hace un mes exclusivamente para publicar mi libro y diles que lo distribuyan en todas las tiendas de París y de este planeta. Para esta noche quiero todas las copias distribuidas en las librerías, por el dinero no hay problema.

Dijo Gabriel limpiando una lágrima de felicidad, al ver su proyecto importante florecer. Nathalie hizo el mandado sonriente, no teniendo idea de lo que le esperaba al regresar por la tarde.
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Con un peso menos sobre sus hombros y el sonido de sus tacones anunciando sus pasos, una mujer de mechón rojo entraba a la oficina esperando poder dormir pronto sabiendo que ese libro infernal y ella no estaban bajo el mismo techo, siendo interceptada por su jefe que la hizo entrar rápido a la oficina, dandole una copa de vino que ella confundida tomó.