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Si me preguntarán que siento en este momento, el término adecuado sería: confusión. Desde hace 2 semanas que Ryan me ayudo a recordar a Jace,sigo sin recordar el día del porqué estoy aquí. Aunque, poco a poco recuerdo a Jace ,por lo que empiezo a recordar, eramos muy cercanos. Cada que lo recuerdo, siento algo removerse en mi interior, como una calidez reconfortante, como cuando tu madre hace tu comida favorita en un día triste. Te hace sentir mejor,bueno ,ese es el sentimiento que tengo al recordarlo. Pero,apesar de todo eso,me molesta no recordar ese día. Me frustra ,decepciona y enoja en partes iguales.

—Coop,debes ir a tu sesión con Ryan,es domingo.—dice Halina con un tono de timidez en su voz —.

—No,Hal,no quiero. Dime ¿De qué sirve ,si ni siquiera recuerdo nada de ese día?—le digo en un tono de reproche gracias a mi humor—si pudiera recordar lo haría, pero no sucede. Así que me quedo en esta habitación y es firme mi decisión.

—Coop,— suelta un suspiro tembloroso— sabes que si no vas,tendré que traer a refuerzos ,y sabes que no quiero hacerlo. Son muy grandes y poco considerados al llevar a los pacientes.

—¿Qué no entiendes,Hal?—me pongo de pie ya molesto,que no se vaya empeora mi humor—¡Te he dicho que te vayas!

Y estoy por abalanzarme hacia ella ,hasta que presiona el botón junto ala puerta. Llamó a los guardias.Vaya suerte la mía.

—Quédate quieto ,niño, o te quedas atado ala cama. —dice uno de ellos.Ver esas riendas de cuero,son aterradoras—.
—¡He dicho que no iré y eso no cambia!—digo ya molesto e irritado—.

—¡Sueltenlo!—dice otro guardia al percatarse de la situación —Barnes, tu madre quiere verte,es tu visita mensual. Así que compórtate, sino quieres verla con moretones en el rostro.—me dice con un tono burlón —.

Aligeran el agarre y me suelto de mala manera y sigo al guardia para poder hablar con mi madre, talvez ,ahora que se de Jace, me diga más de él. Odio este lugar. Odio los guardias. Odio las sesiones con Ross. Odio las píldoras. Odio también el-

—¡Coop! ¡Hijo!—la voz de mi madre me saca de mis pensamientos, se oye alegre. Emocionada de verme— Hijo mío, me alegra verte.—Me dice con una cálida y bella sonrisa—.

—Hola, mamá —le digo ,devolviendole la sonrisa — me alegra verte.

—Dios mío, Coop,te extrañé demasiado.

—Yo igual ,mamá . Pero antes de seguir ,quiero preguntarte algo muy imp...

—¡10 minutos ! — grita el guardia a todos los que nos toca visita—.

—¿Qué decías, Hijo?

—¿Eh? ¡Ah! Si ,te decía que ,quiero preguntarte algo muy importante. Y quiero que me digas la verdad.

—Coop,me asustas —dice con una risa nerviosa —¿Qué quieres saber, hijo?

—Quiero saber más sobre Jace.

Su sonrisa desaparece y en su lugar ,llega el asombro. Se ve nostalgia y tristeza en sí mirada ,como si eso la lastimara. Como si hablar de Jace la desanimara. Eso es lo que llego a pensar hasta que una sonrisa nostálgica llega a su rostro y su mirada se torna ilusionada.

—Lo recordaste ,Hijo. Me alegra que lo lograrás.— dice muy bajo ,y alegre pero con aire nostálgico — Jace,el era tu mejor amigo. Tu compañero, siempre estabas lleno de ilusión cuando hablabas de él. Era como si cada que lo mencionabas,tu corazón y alegría hicieran una bomba de calidez y hermosura en su nombre y presencia. Varias veces le escribiste poemas ,se los dabas para que los "calificará "—dice ,haciendo comillas con los dedos ,mientras suelta una pequeña risilla—y te emocionabas cuando decía que eran hermosos.

Yo la oía con atención, queriendo grabarme cada palabra dicha.

—Pero,el día del porqué estoy acá, ¿Me lo puedes decir?—le digo con voz temblorosa—.

—¿N-No lo recuerdas?—cada pizca de alegría se va ,trayendo consigo confusión en su rostro —pensé que ya lo recordabas. Hijo ,por mucho que sea difícil de creer ,de entender ,no se casi nada de ese día.

—¿Q-qué?¿ P-pero ,como es que no sabes?—digo temblorosamente —Necesito hablar con Jace ¿Dónde está Jace? El me resolverá las dudas.

—Hijo —dice mi madre . Me empiezo a hartar de que siga diciendo hijo— e-el ...Él...Jace...el est-...

—¡Se acabó el tiempo! ¡Todos a sus celdas! ¡Ahora!—grita el guardia con cierto fastidio. Quien lo puede culpar con este trabajo—.

—2 minutos más,por favor. Solo eso le pido —digo con urgencia y nervios —solo 2 minutos más, mi mamá esta apunto de dec-...

—¡He dicho que a las celdas! No haré excepciones. Ve a tu celda.

—Pero-...

—¡Que vayas he dicho!
Y el enojo me nubla la vista. Casi 3 meses acá, diciéndome :"No debes enojarte ,Coop" "Tus ataques debes controlarlos,Coop" para que ellos vengan a provocarme uno. Que irónico ¿no?

Amor en el Olvido - Henray Donde viven las historias. Descúbrelo ahora