La Debilidad De El Demonio.

28: Delito compartido

Está es la primera vez que Kexing  pasa la noche en este lugar tan tranquilo, justo antes del amanecer se levanta y recorre el lugar, como siempre camina hasta la terraza y se prepara para ver el amanecer es tan hermoso, siempre le gustó.
Tras el se levanta Zishu para darse cuenta que no está a su lado, mira al rededor para ver la terraza abierta, con paso lento  camina hasta ahí y lo ve, se acerca y lo abraza por la espalda y huele su aroma, apoyando su cabeza en la  espalda de el demonio.

—Me dejaste solo en la cama.-- reclama Zishu.

-- siempre me ha gustado ver cómo sale el sol. Es una gran bola de fuego que le hace bien a esta tierra si estuviera más cerca sin duda todos morirían, si estuviera más lejos jamás abrían existido. Igual que mi rey.-- Kexing al fin dice en voz alta lo que ya guardado por cientos de años.

Después suspiró profundamente la nostalgia llegaba a su ser.

-- tu creador nos creo con un propósito y es mantener ese equilibrio y ese trío de estúpidos lo está arruinando.-- se da vuelta para sostener el rostro de Zishu y mirarlo a los ojos.

......

En el departamento de ShenWei este intenta que Yunlan comprenda lo que está pasando.

—Si me encuentran culpable, no podré ir contigo al infierno, por que mi alma será ejecutada — le sonríe despeinado su cabello —por eso debes ser un buen jefe, para que todo en este mundo esté en equilibrio. -- aunque ShenWei está sonriendo por primera vez teme desaparecer.

Pero la capacidad de Yunlan es muy corta ahora, y teme perderlo y como niño pequeño solo quiere huir de lo que lo está lastimando.

-- lo siento tengo que trabajar. -- está  molesto muy molesto, y sin más se  transporta a el penthouse.

Y lo único que ve es a Kexing abrazando a Zishu en la terraza muy juntos y se molesta más.

-- lo siento jefe me voy a casa tengo algo que revisar -- da la vuelta y entra al infierno..

Ambos lo miran por un momento.

—Parece que esta molesto, ve a trabajar mientras yo me quedo aquí... prometo quedarme quieto — Zishu sonrie —pero, prometeme que vendrás si te necesito.-- y hace un puchero.

La herida de Zishu aún está abierta y duele, duele mucho y no sabe como curarla, tiene que esperar a ShenWei para que le explique más sobre las armas divinas y el juicio, no tiene más opcion que quedarse en ese lugar.

-- bien vendre si me hablas aún así estaré cuando el sol baje si.-- Kexing no quiere dejarlo y aún así da un  beso más y se va.

Después de la revuelta, los pocos demonios que ay son más sumisos y obedientes, aún así Kexing debe poner la cara dura, o nuevamente tendrá problemas.

-- ¿oye estás mejor? Realmente pensé que tardaría más estabas muy mal cuando te fuiste. -- el demonio Xie lo mira con asombro.

--últimamente mis heridas sanan más rápido y mi fuerza es mayor.-- Kexing presume a su amigo las nuevas noticias.

-- pero estás muriendo ¿no debería ser al revés?.-- para Xie es la primera vez que ve a un demonio extinguirse y le resulta curioso.

-- si debería pero no es, ¿dónde está Yunlan?.-- Kexing intenta cambiar de tema.

-- si lo ví estaba molesto, sabes que las pasiones son muy complejas deberías explicarle.

-- ya le entregué un montón de libros sobre distintas teorías humanas ¿que más hay que explicar?-- al parecer Kexing no se da cuenta lo que ocurre con su asistente.