Lena & Supergirl. Una historia pokémon.

0. La aventura de Kara comienza.

Krypton (1976 en la tierra)

Aquella niña rubia de diez años estaba viendo por la ventana el regreso de su padre, él había ido al planeta tierra dejando a la pequeña un poco disgustada ya que no la había dejado ir, argumentando que él iba por cuestión de trabajo e investigación, pero que le traería un pequeño regalo de allá.

Hace poco su tía Astra la había visitado, dándole conocer cómo era la tierra, le enseño las especies que vivían ahí, que incluso había Pokémon, como hubo una vez en su planeta, pero muy diferentes, ahora quedaban muy pocos, pero eran exhibidos en zoológicos, escuchaba la música que le había traído su tía para que aprendiera de la tierra. Apago la música cuando vio que por fin la nave se habría.

Sonrió al ver a su padre bajar de la nave, su tío Jor-El abrazaba a su hermano, mostrándole al bebé recién nacido, su primo Clark. Kara corrió saliendo de su casa para ir a recibir a su padre, lo abrazo con fuerza.

-Te extrañe padre- comento la rubia sonriente mientras que Zor-El despeinaba los cabellos de la ojiazul.

-Hablaremos luego, sólo puedo decirte que es un lugar seguro para mandar los paquetes importantes- comento tomando a su hija de la mano llevándola dentro de la casa, cargaba cuidadosamente una caja.

-¡Madre, padre está aquí!- grito la pequeña entrando.

Su padre la guio a la habitación de la rubia, para entregarle el regalo, puso la gran caja en el escritorio. Abrió la caja donde se encontraba un huevo, Kara abrió la boca impresionada.

-Esto es un huevo de Pokémon en la tierra, está dentro de una incubadora, lo que salga de ahí será tu compañero, será sólo tuyo pequeña- comento viendo que Alura observaba intrigada desde la puerta.

Ambos salieron dejando ahí a la pequeña viendo su nuevo regalo, cuando cerró la puerta sonrió a su esposa.

-Será un lugar seguro para Kal-El y Kara si no logramos rescatar a nuestro planeta. Sólo debemos darle pequeñas advertencias, ya que allá, su sol amarillo nos da habilidades, le traje esa criatura, ya que la mayoría de los humanos cuenta con uno, cómo compañero, le hará bien- explico tomando la mano de su esposa para tratarla de tranquilizar.

Pasaron los días, Kara cuidaba después de sus deberes la incubadora, incluso ojeaba los libros de especies de la tierra que su padre le habría traído, se preguntó que Pokémon saldría de aquel cascaron, si sería lindo o algo tenebroso. Entonces el día por fin llego y huevo abrió, la criatura que ahí salió era hermosa, tomo el libro buscando que era, no entendía el lenguaje humano, pero tenía buenas gráficas, vio una hoja de planta junto al ave retratada en el libro, entonces supo que era tipo planta. Saco a la extraña criatura, esta se acurruco a Kara.

-Te llamare Argo- comento cariñosamente al ave (Rowlet).