Sounds | Jenlisa

XX

Jennie's POV

Dos cafés después y una larga jornada de preguntas habían acabado con nuestra cita.
Lisa se había marchado hace unas horas y yo estaba hundida en mi cama casi siendo ahogada por todas las almohadas que había puesto mi madre por "seguridad".

Quería hacer tantas cosas, pero me sentía incapaz y frustrada. Me fastidiaba no poder saber con certeza cuánto tiempo más debía esperar, tan solo era el primer día y me sentía atrapada de la cabeza a los pies.

Miré el gran televisor frente a mi cama con cansancio mientras con mi pulgar presionaba el control rápidamente pasando los canales en busca de algo que resultara ser lo suficientemente "entretenido".

Mi celular estaba sobre una de mis piernas cuando sentí que vibró. Esperaba que fuera Lisa, era lo más probable.
Era un nuevo celular y solamente ella tenía mi número por ahora, tampoco es como si recordara a muchas personas realmente.
Lo tomé y me desanimé un poco al ver que no era una notificación de su parte, provenía de un número que no conocía.

Buenas noches Jennie, soy Jisoo.
Le he pedido tu número de teléfono a tu madre, espero no te moleste.
¿Qué tal si salimos mañana?

No me vendría nada mal un poco de compañía, no tenía nada que perder, después de todo por lo que me habían comentado ya, Jisoo era de mis mejores amigas, aunque era muy cruel no poder recordarlo.
Ella podría ser mi camino seguro en busca de mi anterior vida.

Hey Jisoo, para nada, no molestas.
Sería genial aunque mañana tengo terapia física.

Ella estaba aún en el chat de conversación, leyó el mensaje al instante.

Puedo llevarte si quieres.

Perfecto, te espero a las 9:30.

A la mañana siguiente desperté sintiendo el tacto suave de mi madre en mi piel. Miré el reloj, tan solo eran las ocho de la mañana pero tenía muchas cosas por hacer.
Mi madre me ayudó un poco con la ducha, sentía que con  algo de práctica podía hacer estas cosas sola, pero por ahora no era del todo eficaz.
Finalmente estaba otra vez en mi habitación, mi mamá había dejado mi ropa sobre la cama para facilitar más la labor.
Era un conjunto deportivo color negro.
Cuando finalmente estaba lista logré sentarme sobre la silla de ruedas y llevarla yo misma hasta la sala de estar.

No me había percatado pero Jisoo ya estaba aquí, hablaba junto a mi madre. Al instante en el que me notó se acercó a mí y me abrazó.

Era extraño no sentir lo que probablemente ella sentía, no poder abrazarla y corresponderla con las mismas ansias ya que para mí era una completa extraña.

— Te queda muy bien ese corte de cabello. — expresó con sus manos luego de observarme un tiempo, mientras en su rostro se esbozaba una tierna sonrisa.

Le agradecí sinceramente.

Fuimos al hospital donde la terapeuta me esperaba para dar inicio a la primera de muchas terapias físicas.
Comenzamos con movimientos que antes no habría imaginado dejar de hacer hasta ahora. Eran repeticiones de movimientos que me ayudaban a aliviar el dolor que sentía últimamente por todo mi cuerpo aunque esto no lo cambiaba del todo.
Sentía que perdía el aire fácilmente, tenía una pésima condición física.

— Lo haces muy bien Jennie. — pude leer sus labios.

Jisoo me observaba desde un gran ventanal que nos dividía. Se veía feliz y emocionada, agitaba sus manos para hacerme saber que lo estaba haciendo bien, o al menos eso creía yo.