UNA VEZ MÁS

EL DESPUÉS

-Link... yo...

...

-Nos vemos luego...

Estas fueron las últimas palabras que el héroe del crepúsculo escuchó decir a su fiel acompañante, quien al empezar toda esta aventura no era más que una molesta criatura usándolo para sus propios intereses; sin embargo, ahora lo que Link veía era a alguien desinteresada, capaz de dar su vida por él, y a quien podría considerar más que una amiga.

En cuestión de segundos, la atmósfera de calma se tornó en una agridulce e inesperada despedida.

Entre lágrimas y una tierna mirada, Midna fue teletransportada de vuelta a su reino luego de haber roto el espejo del crepúsculo por el bien de ambos mundos, causando una extraña sensación de vacío en Link mientras que Zelda presenciaba todo.

Luego de que el acto acabara, Link se quedó de pie presenciando lo que había ocurrido, tratando de asimilarlo.

-Se fue -Dijo Link, quien seguía contemplando el porta-espejo vacío.

Zelda, luego de analizarlo un poco, puso su mano en su hombro tratando de empatizar con él.

-Lo hizo por el bien de nuestro mundo y el suyo -Dijo la princesa.

Link se sentó a procesar todo lo que pasó, pues varios meses de persecución, lucha y aventura lo tenían exhausto.

-Debemos irnos -Dijo Zelda al notar la posición del sol.

Link volvió en sí, y acompañó a Zelda a las afueras del Patíbulo del Desierto; donde había un par de caballos de la realeza esperando por ellos. Luego procedieron a regresar al reino por una ruta conocida por la familia Real.

El camino duraría algunas horas, por lo que Zelda al notar a Link aún confundido, decidió empezar la charla.

-El reino nunca estará lo suficientemente agradecido contigo por tus servicios heroicos. Yo misma, estoy muy agradecida. -Dijo la princesa.

-Aprecio mucho eso -Dijo Link- De todas formas, no lo hice solo. Tanto Midna como varias personas del reino fueron igual o más heroicas que yo.

Zelda, tratando de no profundizar en el tema de Midna (aunque sentía curiosidad) intentó despejar la mente de Link con más preguntas.

-¿En serio? ¿Qué otras personas del reino? -preguntó.

-Pues está Telma, la cantinera de la ciudadela del castillo; el chaman del pueblo Kakariko...

Y así Link siguió hablando, y pudo contar una parte de su aventura a Zelda durante un par de horas. Durante el trayecto, ambos hablaron como si fueran amigos de muchos años.

La charla pasó de los aliados en el reino a los climas de las regiones de Hyrule y luego la comparación de la vida en Ordon y la vida que debe llevar la princesa. Se toparon varios temas incluyendo la sensación de saltar desde el gran puente de Hylia.

-Te lo juro, nunca he visto un puente tan hermoso como ese -Dijo Link.

-Si, espero que generaciones futuras lo puedan apreciar por años y años.

De pronto, Link se detuvo a apreciar la puesta de sol, sin poder evitar el soltar unas palabras.

-A Midna le encantaba esto -Dijo- Decía que le recordaba al estado permanente de su mundo, que mientras otros lo veían como penumbras, ella lo veía como un eterno atardecer.

Zelda viendo la mirada perdida y expresión distante del héroe, decidió preguntar.

-Link... ¿Ocurrió algo especial con Midna?

Link de pronto se volvió algo avergonzado sin concretar ninguna afirmación.

-¡Qué!... No... Bueno, no probablemente... Es decir, no lo sé -Sentenció- Estuvimos juntos en esta guerra por muchos meses; de todas formas, ¿Por qué lo preguntas?

-Bueno, al irse soltó varias lágrimas y me parece que trató de decirte algo; además quedaste estático por varios minutos luego de su despedida -Dijo Zelda.

-Es que no hubo "despedida" -respondió algo eufórico- me dijo que me vería luego y rompió el único lazo entre los dos mundos; creo que puedo entender por qué lo hizo, pero no entiendo por qué no me dijo adiós, había mucho por decir y agradecer, tanto que no alcanzaría el día para decirle todo.

La princesa al oír esto intentó comprenderlo y respondió.

-No puedo asegurarte el por qué no hizo su despedida, pues no estuve con ustedes durante todo el tiempo, pero en el castillo ella arriesgó su vida por ti; no solo su vida, sino el liderazgo y control de su reino, siendo princesa, yo no haría eso por cualquiera. Así que estoy segura de que tuvo sus razones para no haberse despedido de la forma en la que esperarías.

Link al escuchar estas palabras pudo entender un poco la situación desde el posible punto de vista de Midna. Luego de esto, se relajó un poco y prosiguieron el camino.

Luego de un par de horas llegaron a la ciudadela del castillo, donde les esperaba una gran celebración por parte de todo el pueblo. Zelda fue ovacionada por todos los habitantes, mientras que a Link le llovían los aplausos por todos lados. Luego de unos minutos, Zelda fue rodeada por habitantes agradecidos mientras que Link pudo divisar a Telma entre la multitud y se dirigió hacia ella con un perfil bajo.

-Telma, un gusto verte -Dijo Link entre el ruido de la multitud.

Telma lo recibió con un gran abrazo mientras que le hablaba:

-Jovencito, si hubiera más personas como tú en este reino, las guerras no serían tan frecuentes y devastadoras -dijo- estamos tan agradecidos con todo lo que has hecho, si necesitas algo, mi bar siempre estará aquí, gracias a ti -sentenció.

Al sentir el cansancio acumulado, Link se aproximó a la princesa Zelda para decirle que iba a volver a Ordon; a su hogar.

-¿Estás seguro? -Dijo Zelda- ¿No quieres quedarte un poco más en esta celebración hecha en tu honor?

-No te preocupes, estoy seguro de que la disfrutarán sin mí. Además, estoy muy cansado -Dijo Link.

Zelda, comprendió que Link no había tenido un pacífico descanso en meses, y lo apartó de la multitud para hablarle.

-Link, espero que descanses mucho, te mereces este descanso. -Dijo- Y recuerda, si necesitas algo con respecto a tu pueblo, puedes enviarme una carta; pero, si necesitas una amiga, puedes venir a verme cuando quieras. Dejaré todo para estar ahí para ti.

-Te lo agradezco mucho princesa, digo, Zelda -Dijo Link con una sonrisa.

Luego de la despedida, Link salió por la puerta este de la ciudadela, donde Epona estaba reposando. Posterior a eso, empezó la cabalgata hacia el sur.