𝕾𝖊𝖝

376 71 58
                                    

Halloween llegó más rápido de lo esperado. Naturalmente por esas fechas, la academia era un caos con los preparativos de los rituales que se llevarían a cabo esa especial noche; y no era para menos. Con la luna alzándose en el cielo, la línea entre la vida y la muerte se hacía aún más delgada, lo que abría una puerta de posibilidades.

Hongjoong y Seonghwa acordaron asistir a la fiesta de los amigos del pelinegro. Pidieron la ayuda de sus amigos para que cubrieran la ausencia del brujo en la ceremonia. Estos dieron su visto bueno aún cuando los sorprendió que Hongjoong, siendo como era, prefiriera perderse una fecha tan importante para ir a una fiesta de mortales, pero no lo cuestionaron; no pudieron hacerlo cuando vieron sus ojitos brillantes y su aura entusiasmada.

Como Seonghwa no iba a participar en ninguna de las actividades de ese día, no asistió a la academia. Así que cuando todos estaban distraídos con el comienzo de "la noche de las brujas", Hongjoong se escabulló al bosque. Quedaron de acuerdo en encontrarse cerca del lago para ir juntos al pueblo, ya que la fiesta se llevaría a cabo en la casa de uno de los amigos de Seonghwa. Cuando Hongjoong llegó al lugar de encuentro, el Sol ya se había escondido. Seonghwa ya lo esperaba ahí, de espaldas y apoyado en un árbol.

Hongjoong tuvo la ingeniosa idea de que asustarlo sería divertido, así que se acercó sigilosamente y cuando estuvo lo suficientemente cerca, puso sus manos en la cintura del otro con algo de fuerza. Seonghwa pegó un saltito y soltó una exclamación algo chillona. Al darse la vuelta y ver de quién se trataba, lo regañó con el ceño fruncido cual madre enojada. El pelinaranjo puso su frío dedo en la frente del otro para borrar el gesto molesto y le sonrió con inocencia.

–¿De qué se supone que estás vestido?- preguntó al pelinegro cuando este ya se había recuperado del susto y su enojo se esfumó.

–De un vampiro... –respondió. Iba vestido con un pantalón negro a la cintura y una camisa blanca con un cuello de encaje, de aquellas típicas de los disfraces de vampiro. También se había puesto unos colmillos falsos y un poco de sangre falsa en la comisura de los labios, además de acomodar su cabello algo largo con un estilo elegante.

–Adivina de qué es el mío –pidió Hongjoong con una sonrisa. Seonghwa lo miró de pies a cabeza, pero encontró que se veía igual que siempre; vestido completamente de negro y hermoso.

–¿De ti? –fue lo único que pudo responder.

–Exacto Hwa, no necesito un disfraz –dijo el más bajo. Seonghwa sonrió por sus ocurrencias; aquella era una prueba de cómo Hongjoong era realmente, y le encantaba.

Juntos caminaron hasta la casa de la fiesta. Hongjoong podía sentir un cosquilleo en el estómago, pero no estaba seguro si era por la próxima llegada de la luna, la idea de ver a mortales tan de cerca o tener a Seonghwa a su lado rozando su mano con la suya a ratos.

Cuando llegaron a una gran casa en las afueras del pueblo, Seonghwa fue el que tocó la puerta. No tardaron en abrirles; Juyeon fue él que se dejó mostrar disfrazado de vaquero.

–¡Vinieron! Pasen, pasen –abrió aún más la puerta y los chicos aceptaron la invitación –Seonghwa luciendo bien como siempre –dijo con una sonrisa y al ver a Hongjoong miró mal a su amigo –¿No le avisaste que era de disfraces?

–Pero si estoy disfrazado, soy una bruja –dijo Hongjoong –¿Acaso no ves el gorro? –apuntó su cabeza, pero Juyeon negó frunciendo el ceño. Hongjoong levantó una mano y la señaló con la otra –Traje hasta una escoba. Seonghwa, no puede verlos ¿cómo es eso posible?

–¿De verdad no los ves? –Seonghwa le siguió el juego a Hongjoong y miró a su amigo con los ojos abiertos –¿Pero cómo es posible? Si lo tiene puesto.

A witch? | SeongjoongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora