Suspiros, besos y primera vez...

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Juliet Crawford en galeria.

Camine hacia la mesa en la que se encontraba John con la mirada clavada en el suelo. Me sentia muy mal en mentirle, el habia sido muy amable conmigo en lo poco que llevabamos de tratarnos pero no queria decirle que el Profesor Davis me llevaria, asi que opte por la segunda opcion.

-John, disculpa pero me tengo que irme a casa- al instante levanto la cabeza y sonrio forzadamente.

-¿Porque? ¿Pasa algo?- su expresion era seria y dio un pequeño salto de la silla poniendose de pie.

-No, no te preocupes- le sonrei tratando de tranquilizarlo.

-Entonces dejame llevarte.

-Mi mama esta afuera- respondi antes de que hiciera mas preguntas y entonces no pudiera responderlas.

-Esta bien- dijo y dio un pequeño paso hacia mi dandome un casto beso en la mejilla. -Fue una velada muy interesante, aunque fue muy corta- estaba muy cerca de mi oreja y solto un pequeño suspiro pudiendo sentir su aliento caliente en mi cuello.

-Adios, John- me di la media vuelta y camine de regreso hacia el pasillo,.

Cuando llegue a el lugar donde se suponia que estaba el Profesor, me encontre con el lugar vacio. Lo empeze a buscar con la mirada y de pronto, una mano me tomo del codo y en un segundo, estaba acorralada contra la pared del pasillo y el Profesor Davis frente a mi.

-Asi que usted y su amiguito son muy cariñosos ¿no? ¿Hay algo entre ustedes?- su voz sono en tono de reclamo y sentia su aliento caliente en mi cara.

Estaba pegado a mi totalmente, su rostro a unos centimetros del mio y demasiado cerca en las partes mas estrategicas.

No sabia que responder, ¿se supone que debia de estar molesto? No lo sabia y la unica forma en la que iba a salir de esta era contestar a su pregunta.

-No, no hay nada entre nosotros- conteste y en sus labios aparecio una pequeña sonisa.

-Perfecto, Juliet- su mirada estaba fija en la mia.

-Profesor Davis...- logre decir antes de que se acercara a mi oido y mordiera el lobulo de este causando que los cabellos de mi nuca se pusieran de punta.

- ¿Si?- su rostro abandono mi oido y ahora se encontraba justo frente a mi causando que cada vez que hablara sus labios rozaran los mios.

-Necesito mi espacio- conteste haciendo hasta lo imposible para no tartamudear.

-¿Porque? ¿Acaso le incomoda que me encuentre tan cerca?- su voz sonaba burlona y tenia su mirada clavada en mis labios.

¿Que hacia? No iba a contestar a su pregunta diciendo que no cuando era todo lo contrario. Su cercania me causaba de todo. Aunque no podia ceder, no podia caer ante su trampa.

Mi labio inferior comenzo a temblar, algo que me pasaba mucho cuando estaba nerviosa y lo mordi tratando de disimularlo.

-Juliet ¿quieres saber lo que me provocas?- puso su mano en mi cintura y me pego mas a el permitiendome notar un bulto entre su entrepierna.

Respire su suave olor a menta y su aroma lleno mis pulmones. Cerre los ojos disfrutando la sensacion.

-¿Estas disfrutando?- abri mis ojos repentinamente. El profesor Davis estaba mirandome a los ojos, estaba lleno de deseo, lo podia ver.

-Necesito ir a casa- solte pejandome a la pared evitando su contacto fisico. Entrecerro los ojos un momento, como si estuviera decepcionado, y luego solto un suspiro.

-Yo la llevo- .


Christian Davis

Teacher | PAUSADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora