Yugi

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Al entrar a la tienda, Atem nota como su hermano esta como si estuviera en la luna.

-etto... Aibou- empieza a decir Atem con una gota en la cabeza- ¿estas bien?

Al escuchar eso, Yugi sale de su trance.

-Si hermano, perdón- dice algo sonrojado Yugi.

-te gusta  Ale ¿verdad?

- como crees- dice un poco asustado y moviendo sus manos de manera alocada- es que... no se ..

-quieres volver a verla-adivina el tricolor mayor.

-si

quieres hablar con ella

-si

-quieres ser el motivo de sus sonrisas

-si

quieres abrazarla

-si- dice Yugi con un pequeño sonrojo

-pide salir con ella- dice Atem con una sonrisa

-¿en serio?'

-¿por que no? ella es una buena amiga y juega duelo de monstruos como nosotros

-lo haré hermano, gracias- dice Yugi con una gran sonrisa y aliviado por la aprobación de su hermano.

-te lo mereces Aibou- dice Atem sonriendo, pero de repente se pone serio- dime hermano, ¿por que Tn estaba con las manos temblorosas? 

-fíjate que....

De regreso a Ilusiones Industriales, Tn y Al se topan con Mahad estresado.

-Pequeña que paso?

-tranquilo Mahad, esa a salvo y conmigo- dice Ale- necesitaba distraerse y fuimos a una tienda de juegos- dice  mientras su cara le sale una vena.

-Ale...- murmura Tn

-pero es que...- como  de rayo, Yusei y Jaden se llevan a Tn para que no sea victima del fuego cruzado entre Ale y Mahad,

Ale al ver que se llevan a Tn suspira hondamente.

-lo necesitaba Mahad, la distrajimos para que no piense mas en ese imbécil- dice ella con el ceño fruncido- lo necesitaba.

-Esta bien...- suspira Mahad, sabe que discutir con ella es como hablar con la pared.- y como la viste?

-ya mejor, pero aun siente temor de toparse con ese idiota- dice ella- lo mejor es que se distraiga

Al principio hace una mueca de disgusto, ero al meditarlo mejor, se da cuenta de que Ale tien razón, hacer que se distraiga le ayudara a superar ese trauma.

-esta bien- dice la fin

-Eso espero- dice Ale un poco enojada- sé que te preocupas por ella, pero, me molesta que no confíes ni en mi ni en Yusei ni Jaden

-No es eso- replica Mahad.

-lo es, sé que- suspira hondamente- mejor no digo eso

-que cosa?- desafía Mahad

-se nota que tienes un interés especial e ella, no solo como mayordomo y mano derecha del señor Pegasus

Mahad se sorprende, no por ese hecho, ya que si siente algo por esa niña que vio crecer y se había prendado de ella, su inocencia, su dulzura y su inteligencia, lo cautivo, no estaba permitido, apenas tenia 17 años cuando la conoció y empezó a trabajar como mayordomo desde los 15, pro su sagacidad y su capacidad lo hicieron el mayordomo y mano derecha de Pegasus a muy corta edad. No, Mahad no esta sorprendido por eso, le sorprende que Ale se halla dado cuenta, ni siquiera su hermana sabe su sentir hacia TN. Ha sabido aparentar ante los demás, a diferencia de su hermana, que ella expresa con honestidad lo que piensa.

La FaraonaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora