Queendom

Epílogo

Kaira.

Mi espada atacó primero en dirección a la suya. Los filos se chocaban continuamente en cada ataque hasta formar una especie de baile en pleno duelo. Mi ira aumentaba en cada estocada, mis ataques eran cada vez más firmes y contundentes, más fieros, con más ansias de que mi espada estuviera a escasos centímetros de su cuerpo. Y entonces recordé que era un espejismo, en concreto uno de mi hermana creado por Mark para ayudarme a practicar.

- Bueno ya vale - habló Mark desde las tinieblas, nunca mejor dicho, la venda de niebla que cubría mis ojos desapareció dejándome ver el exterior, un exterior al que ahora tendría que acostumbrarme más a menudo. Los jardines reales eran hermosos, había gran cantidad de flores a los alrededores de todo tipo, árboles, arcos de los más ingleses a mi parecer, estatuas y una mini placita con cúpula.

- Has estado bastante bien Kaira, pero te lo vuelvo a repetir - se acercó a mí para quitarme la espada - No vale matar a nadie.

- No creo que sea tan malo un simple rasguño - habló Raina desde la entrada, para después acercarse hasta nosotros o más bien hacia Mark depositando un casto beso en sus labios.

- Aww, sois de lo más monos tortolitos - reí ganándo la mirada de Raina que alzó su ceja molesta, me gustaba incordiar un poco - Pero por favor delante de los pobres no.

Ambos rieron ante mi comentario.

- ¿Por qué viniste? Lo estaba pasando genial viendo como Kaira arremetía golpes al aire - giré los ojos en respuesta al comentario de Mark.

- Vine a ver a mi mejor amiga entrenar, te recuerdo que soy mejor que tú con la espada, además, si no me quieres aquí me voy eh, luego si duermes en el suelo no vengas llorando - Raina se acercó a mí dándome un vaso vacío que no tardó en llenar prestando atención a su novio.

- Que gracioso, ¿Sabes que puedo hacer que te expulsen, verdad, además, como le dices eso a tu novia?- bromeé ante la mirada de Mark

- Uhh, pues me vendrían bien unas vacaciones con mi novia, descansar un poquito, así al menos no me mandaría al suelo, estaríamos más ocupados con otras cosas - el chico agarró la mano de Raina atrayéndola hacia él y está le dio un golpe en el hombro riendo.

- ¿Interrumpo algo? - se escuchó la voz de Scarlet de fondo.

- ¡Gracias a Dios! Un poco más y hubiera tenido a estos dos comiéndose vivos delante mía, la tensión entre ellos dos se siente en el aire - fui corriendo hacia ella para abrazarla.

- Algún día tendrás que encontrar a alguien, Kaira - contestó Raina riendo.

- Espero que ese día no sea demasiado pronto - sonreí a Mark cuando le quité de los brazos a Raina para unirla al abrazo junto a Scarlet - Es mía.

- Está bien, está bien, su majestad, pero tendrá que lidiar con el agua por todos lados, usted sabrá - levantó las manos rendido y su novia le miró con falsa molestia, se acercó a nosotras y se unió al abrazo también - Os quiero chicas.

- Y nosotras a ti, aunque a veces seas difícil de aguantar - le digo una vez que nos separamos del abrazo, reí al ver como la de mechas asentía ante mis palabras logrando a su novio ofendido.

- Aquí falta Liam - agregó Scarlet.

- ¿Dónde está? - quiso saber Mark.

- Preparando las cosas para la coronación que es en...- Raina se paró a ver su reloj - ¡EN DOS HORAS!¿ Qué hacemos todavía aquí ? Te tienes que duchar y hay que prepararse, Kaira.

- Vamos - agarré a las chicas por las muñecas y me las llevé corriendo hacia mi habitación donde se encontraba todo lo que necesitábamos. Una vez allí dejé a mis amigas en mi cama charlando de no se que tema y yo me fui al cuarto de baño para tomarme una ducha relajante en la bañera, necesitaba descargar los músculos después del intenso entrenamiento de hace unos minutos. Salí ya con el albornoz puesto junto a una toalla enrollada en mi cabello.