Reki es un trabajador responsable y dedicado, ansiaba que llegara el día del los anuncios de ascensos, pero aquel tan deseado sueño sería otorgado a un recién llegado canadiense.
Los tranquilos días en la oficina de la empresa SK8 comenzarán a albo...
Una nueva mañana y la alarma del celular comenzó a sonar, pero aquella mañana sería distinta a las demás. Reki salió rápido de su cama, mientras preparaba su desayuno tatareaba feliz una canción.
- Hoy es el día, todo mi esfuerzo se verá recompensado, ya quiero ver la reacción de mamá y papá cuándo les diga que me gané el proyecto y logré ascender, puse mi vida en esto y estoy seguro que ganaré.
Nada podría arruinar su día, después de meses dedicado a aquel proyecto, también ayudó a reconstruir su confianza y seguridad.
Después de una ducha rápida, se vistió y salió de su apartamento, aún tarareando la canción. Aunque iba apretado en el metro, la gente lo pisaba o golpeaba sin querer, no le importaba en lo más mínimo.
- Buenos días Reki ¿Por qué tan feliz? - preguntó Hiromi quién se encontraba como guardia en la puerta.
- Buenos días Shadow, simplemente amanecí de buen humor - respondió Reki.
- Y no sabes cuánto me alegra verte así - Joe llegó detrás de Reki y lo abrazó por el cuello.
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Ambos subieron al elevador.
- Hoy es el gran día Reki, tu proyecto realmente no tiene fallas, de seguro Ainosuke lo elegirá.
- Tengo fe que será así, nunca había estado tan seguro y confiado con un trabajo como lo estoy ahora - respondió Reki.
Al llegar Miya ya se encontraba trabajando.
- ¡Vaya! Hoy me ganaste Miya - bromeó Reki.
- Joe me dejó un trabajo un tanto complicado, y ayer no lo pude terminar - respondió un ojeroso Miya.
- ¡Joe! Explotas al pasante - le dijo Reki riendo.
- Debe aprender que la vida es injusta, cruel y desigual - dijo Joe con voz triste.
- Buenos días - Tadashi saludó seguido de Langa, quién llegó a los segundos después de Tadashi.
- Hola Langa ¿Cómo amaneciste? - preguntó Reki.
- Igual que siempre, asumiendo mi triste realidad y levantándome a duras penas porque de mi dependen sobrevivir - respondió Langa cansado.
- Eso fue muy depresivo - Cherry llegó de los últimos, y como siempre se unió a la conversación.
- Mejor vete a tu recepción, secretario chismoso - dijo Joe moviendo su mano.