°•𝖬𝗂 𝗍𝗈𝖽𝗈•°

96 15 1
                                    

Jeongguk ya le dieron de alta, ahora estaba yendo con muletas a cualquier lado, eran incómodas a decir verdad y pesaban demasiado.

—Vaya Jeon, cambiaron de roles.—bromeó unos de sus idioteces de amigos respecto a sus muletas.

—Cierra el pico. —bufó molesto sentándose en la mesa. —le salvé la vida a la persona más importante existente en mí vida.

Entonces el otro cerró la boca de una vez al escuchar eso por parte de su compañero.

»Maldito idiota, habla sin saber«

Pensó para sí mismo Jeongguk.

En parte se sentía muy alegre de por fin salir de ese lugar tan deprimente y aburrido.

Lo único que le subía el ánimo era YoonGi, siempre estaba ahí.

No había minuto o hora en el que el de piel pálida se encontrara ausente, excepto por sus clases.

Al igual que Jeon, Hoseok también le dieron de alta, claro que esta vez TaeHyung estaba cuidandolo.

Sin querer, se creó un fuerte lazo entre ambos amigos.

No era de esperarse.

—¡Jeon! —una reconocida voz lo distrajo mientras veía su teléfono esperando a Min.
—¿qué te sucedió?

Jeongguk bufó ante tal molesta presencia de la chica que lo drogó y abusó la primera vez que se vieron.

—No es de tu incumbencia, ahora vete. —con un tono molesto habló. —¿no lo recuerdas? dije que ya no quiero verte no en pintura. —tomó sus muletas, y se retiró del lugar para esperar en la puerta del aula.

La clase del chico que tanto amaba aún no termina, ahí estaba él concentrado en un exámen.

—Vamos, que termine pronto, no tengo tanta paciencia. —justo antes de que en su mente hablara, Min se paró y dejó su exámen en la mesa mirando la ventana con una dulce sonrisa al ver a Jeon.

Era como si lo hubiera manifestado.

Entonces el chico de piel pálida volvió a su asiento guardando sus pocas cosas y saliendo del aula encontrándose con Jeon.

—Hola, idiota. —dijo Min con una boba sonrisa.

—Hola, idiota. —saludó de vuelta Jeon imitando su gesto.

En cuanto YoonGi comienza a caminar hacia su casillero el ajeno lo acompaña conversando sobre su día para luego retirarse del lugar.

     ೋ❀❀ೋ═══ • - • ═══ೋ❀❀ೋ

—Está delicioso. —comentó YoonGi mientras veían una caricatura en la televisión.

A decir verdad el pálido chico extrañaba la comida que hacía Jeon, ya que él siempre le recordaba que le cocinaba con amor para él.

—Gracias, Min. —contestó Jeon volteando su vista a la televisión tomando un poco de jugo.

Era un ambiente de tranquilidad.

La confianza estaba volviendo.


ɪ ʟɪᴋᴇ ᴜ  ☕︎ 𝗞𝗼𝗼𝗸𝗚𝗶Donde viven las historias. Descúbrelo ahora