Nunca te olvides de mi

Capítulo 32 Marcus

Después de 2 días

No puedo creer lo que veo, no puedo creer donde estoy, no puedo creer que nos dejaste Tania. Miro tu lapida con tu nombre y siento que es una pesadilla, no puedo creer que hace dos días dejaste de sonreír,  que el hermoso azul de tus ojos se apagó, que no escuchare más tus insultos, tus te amo. No puedo creer que no te abrazare más, y no puedo creer que el 18 de noviembre se apagó una estrella... ahora eres un ángel. Cada minuto que pasa es una tortura; me arrodillo y pongo las rosas en la lápida y me levanto

-Todos te extrañamos. Tus amigos, tus padres están destrozados...se dieron cuenta que el trabajo no es todo, y que debieron estar más contigo. Lo triste es que te tuviste que ir para que ellos entendieran eso- Digo y no lo soporto más, y dejo salir las lágrimas- Cada segundo pienso en ti, tus recuerdos me atormentan en las noches, te extraño tanto mi niña. Laura tampoco duerme, tiene que tomarse una pastilla cada noche para dormir, Dylan te extraña, Zack también, dice que eras la mejor amiga y yo...-Trago grueso y cierro los ojos con fuerza- No sé cómo voy a seguir sin ti. Tú me enseñaste tanto en tan poco tiempo, y ¿Sabes lo que me duele mas? que al final tenías razón, el destino nos separó y no pude cambiarlo- Me arrodillo y me tapo la cara con las mano- ¡TANIA TE EXTRAÑO! ¡¿POR QUE ME DEJASTE?! ¡TE NECESITO! - Rompo en llanto

-Hermano- Zack se acerca- Tenemos que irnos, esto te hace daño

-Zack- Me levanto y lo miro- Se fue hermano y no pude detenerlo

-No es tu culpa Marcus

- ¡Si lo es! ¡No la pude proteger, todo es mi culpa! – Le digo y lo abrazo

-Mírame Marcus- Se separa para que pueda verlo- No es tu culpa, no sabias lo que iba a pasar, deja de echarte la culpa, tienes que seguir adelante. Si Tania estuviera aquí te diría lo mismo

-Lo sé- Miro el lugar donde estaba mi Ángel y después me volteo- Vámonos Zack

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Después de 5 semanas

Trabajo en un proyecto ya que estos días no me he sentido bien y tenía que distraerme con algo. No he querido salir, no he comido bien, no he podido dormir bien, entonces decidí trabajar, aunque a veces no quiero pararme de la cama, todavía la extraño, ya han pasado cinco semanas y todavía duele como el primer día que perdí a mi niña, no he visto mi teléfono últimamente así que decido prenderlo y veo que tengo varios mensajes, pero veo que Laura me envió un mensaje hace dos días

LAURA: Hola Marcus

LAURA: Se que no estas bien, pero ¿puedo verte hoy?

Decido contestarle, ella también perdió su mejor amiga así que decidí verla

MARCUS: Hola Laura, está bien nos vemos a las 5:00 pm

LAURA: Bien ¿Dónde nos podemos ver?

Mi pecho duele con lo que voy a escribir, no he ido a ese lugar desde que Tania ya no esta

MARCUS: Al parque que está cerca del restaurante

Camino por el parque con Max y todo me recuerda a Tania, y Dios esto duele, siento como mi corazón se rompe cada vez más. Pero cuando veo aquel banco donde nos sentábamos para ver las estrellas sentí como una puñalada en mi pecho y lágrimas empiezan a caer, puedo imaginar a Tania ahí sentada esperando a un perro para hacerle cariño, pero cuando vuelvo a la realidad sé que no está ahí. Me acerco al banco para sentarme y esperar a Laura ¿De qué quiere hablar?

-Hola Marcus

Veo a Laura acercase y me sorprendo un poco al verla, esta diferente. Tiene el cabello recogido, no tiene maquillaje, tiene una blusa negra y un pantalón del mismo color, sus zapatos son blanco con toques negros, pero ya no tiene esa vibra de chica divertida y alegre que da. Ella esta apagada, tiene un poco de ojeras y sus labios están un poco rotos, parece que se los ha mordido todo este tiempo. Ella se sienta a mi lado y hace una mínima sonrisa de boca cerrada

- ¿Cómo estás? – Me pregunta con su mirada apagada

-No muy bien, la extraño Laura- Bajo la mirada

-Yo también la extraño- Ella mira al frente, pero puedo ver como cae una lagrima por su mejilla

-Todos la extrañamos

-Te escribí para decirte algo- Ella me mira y yo no digo nada- Antes que tu llegaras a la vida de Tania, ella sufría mucho. Se sentía sola, lloraba todas las noches, ella pensaba que yo no sabia pero cuando la veía al día siguiente se le notaban los ojos hinchados, ella tenía depresión Marcus- La observo y ella sigue- Ella estaba así hasta que tu llegaste a su vida...cuando te conoció ella cambio, empezó a sonreír más, a salir más, hablaba más, empezó hacer amigos, además, sus ojos se iluminaban cuando te veían- Laura deja de mirarme y mira al frente- Tania te amaba Marcus. Tú la ayudaste mucho, siempre me decía que gracias a ti ella había cambiado y que tú le enseñaste lo que era el verdadero amor...Marcus tú la hiciste feliz- Ella me entrega algo que rompe mi corazón... el collar que le regale a Tania- Sus padres me lo dieron, entonces decidí dártelo

-Ella también me enseño muchas cosas Laura- Mis ojos se cristalizan cuando agarro el collar y no puedo hablar- Como quisiera abrazarla- Mi voz se rompe

-Lo se Marcus- Laura se levanta- Pero ya no podemos hacer nada, solo tenemos que seguir Marcus. Ella querría eso, que siguiéramos adelante con nuestras vidas. Sé que duele, nunca voy a encontrar una amiga como ella, la extraño mucho, pero hay que pensar que ella está con nosotros y que nos va a esperar para poder estar todos juntos...solo hay que quedarnos con los recuerdos, y aunque no lo creas Marcus ella está con nosotros

-Tienes razón- Me levanto del banco- Nunca olvidare a Tania

-Yo tampoco- Nos damos un abrazo y siento como Laura llora- Bueno Marcus- Me dice con una voz quebrada- Espero que te vaya bien en la vida, si necesitas algo me puedes escribir- Laura se limpia sus lágrimas- Adiós Marcus