BEGGING • Pierre Gasly

008.

27 de diciembre, 2018.

Maldivas, Océano Índico.

Pierre Gasly.

Es nuestra primera noche en Maldivas y a Andreas no se le ocurre mejor idea que cenar en un picnic en la playa todos juntos. Sé que Thylane no está del todo cómoda con eso al igual que Katerina, pero la verdad yo estoy feliz porque significa que pasaré más tiempo con la primera. Su novio, el tal Jared, tampoco luce muy feliz, a decir verdad. Desde que nos vimos en la mañana no se le va la cara de culo, estoy seguro de que mucha influencia tiene el abrazo que justo nos estábamos dando Thyl y yo cuando él apareció, pero eso no tiene nada de malo así que considero que el chico es un exagerado.

— ¿No podemos cancelar y hacer algo aparte? —  me pregunta Katerina, reconozco el reproche en su tono de voz.

Me encojo de hombros mientras le doy la espalda ya que estoy concentrado decidiendo qué camisa usar. —  No, sería descortés, además Andreas es uno de mis mejores amigos y llevo tiempo sin verlo.

— Claro, seguro es por Andreas que quieres ir... —  murmura sarcásticamente, muy a su desgracia sí la oigo pero no le digo nada, al final tiene razón, no es del todo cierto que quiero cenar con ellos solo para reencontrarme con mi amigo.

Me decido por la camisa color blanca con lunares muy pequeños en azul marino, así que vuelvo a colgar la otra y finalmente me volteo hacia Kat, quien permanece en ropa interior sobre la cama.

— Van a estar Charlotte y Julie, te llevas bien con ellas. —  le recuerdo. — Además de que la novia de Andreas parece simpática, y si tan solo te dieras la oportunidad de conocer a Thyl...

—  ¿Por qué querría conocer a la ex de mi novio? — pregunta obvia interrumpiéndome. — Lo que menos quiero es tenerla cerca, Pierre.

Respiro profundo durante unos segundo y al final solo sonrío. — Porque es una persona increíble y es una lástima que te niegues a conocerla solo por ser mi ex. — murmuro caminando hacia la puerta de la habitación con mi camisa en mano y el torso desnudo. — Oh, y vístete porque quedamos en encontrarnos todos en la playa a las nueve, y faltan diez minutos para eso.

No me quedo a escuchar su respuesta y simplemente salgo de la habitación, cerrando la puerta tras de mí. De la habitación junto a la mía justo sale Charles, quien al verme sonríe.

— ¿Te perfumaste tanto solo para una cena en la playa? — me sonríe de forma divertida y acusatoria, y yo solo río porque no tiene sentido mentirle a una de las personas que más me conocen.

— Ya sabes cómo soy, me gusta ir bien presentable a todos lados, eso incluye a un picnic. — me encojo de hombros mientras ambos caminamos.

— Claro, al mismo al que justamente asistirá tu ex. — me volteo hacia atrás para encontrarme con Anthoine caminando detrás nuestro y portando su típica sonrisa burlista.

Los tres reímos nomás ya que pronto llegamos a la cocina de la cabaña y lo que menos queremos es que las chicas nos escuchen, aunque Julie puede que esté al tanto de todo.

Entre Julie y Charlotte nos entregan bandejas con la comida que estuvimos preparando durante la tarde, además meten unas copas y botellas de vino y agua junto a cubiertos en una canasta de mimbre que hay en la cabaña. Realmente muy completas, las recomiendo.