Se mi omega...[Katsudeku]

Capitulo 7

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Despertó mientras unos rayos de sol mañaneros decoraban su rostro con suaves pecas, abrió lentamente sus esmeraldas dando un pequeño bostezo para finalmente observar a todos lados, dándose cuenta de que se encontraba en su habitación. Al darse cuenta sus mejillas tomaron un fuerte color rojo- que vergüenza.... Kacchan seguramente tuvo que cargarme- tapó su cara con ambas manos al pensar en tal posibilidad.

Después de unos minutos se recuperó, se dirigió al baño- el cual se encontraba dentro de su habitación- y se remojo la cara con un poco de agua fría para despertarse por completo. Salió de su habitación y sin molestarse de ponerse los zapatos bajo las escaleras, mientras bajaba podía percibir un tenue olor a tocino que se iba intensificando a medida que bajaba cada escalón, seguramente Katsuki estaba cocinando y lo pudo comprobar al bajar completamente, pues tal y como pensó, el alfa cenizo estaba concentrado mientras revolvía unos huevos.

-B-buenos días Kacchan- Saludo inmediatamente, todavía apenado por lo que muy seguramente había sucedido.

-Hola nerd- respondió sin mucha calidez, era de esperarse, después de todo era Bakugou Katsuki.

-Eh... Kacchan...- contestó- perdón si anoche tuviste que cargarme, yo no pude evitar dormirme- Dijo algo abatido, le preocupaba ser una "molestia".

-No tienes por qué preocuparte- Contestó mientras servía el desayuno. - No eres pesado, no fue un problema. - Llevó tranquilamente los platos a la mesa. - Por el momento siéntate y come. - Dijo con un leve ceño fruncido, pero no demostraba ningún rastro de fastidio o furia.

-Si... gracias- Camino hacia la mesa con una sonrisa y una mirada de nostalgia, se sentó en la mesa tal y como le habían indicado. Tal vez el tiempo que pasarían juntos no sería tan malo, era bastante agradable, Izuku podía olvidar la incomodidad de estar con Kacchan, podía simplemente estar con el tranquilamente. Era algo que no creyó muy posible, solo habían pasado un día, pero realmente se sentía acogedor estar con aquel alfa.

Ambos comían tranquilamente su comida. Era un desayuno simple, huevo frito, tocino y una tostada con mermelada de fresa encima, pero de todas formas tenía un sabor fascinante para el paladar del omega, no era un secreto el talento de Bakugou en la cocina. Nunca dudaba de ello y siempre lo comprobaba.

Terminaron de comer, el pecoso lavaba los platos (no podía dejarle todo al cenizo, claro está) Mientras el ojiescarlata buscaba ropa para ponerse, aunque no fue muy difícil, normalmente usa cualquier cosa que se encuentra.

Preparó la ducha en latina del baño que se encontraba abajo, se desvistió para meterse la tina. El agua era caliente, pero de una manera exagerada como para dejar roja tu piel, estaba a una buena temperatura. Cuando todo su cuerpo entró a la tina sus músculos se relajaron haciendo que cerrara sus ojos. Recordó que su celo se aproximaba, tal vez e unos tres días, la verdad tenía cierta preocupación teniendo al omega peliverde y su olor por cada parte de la casa, si, puede encargarse de el mismo como siempre lo ha hecho, pero no sabía si con el olor a chocolate que desprendía el omega podría controlar del todo sus impulsos, tendría que salir o simplemente encerrarse. Tal vez se preocupaba de más, pero definitivamente no quería arruinar nada, no quería arruinar todo lo que habían avanzado, que tal vez sea poco para muchos, pero siendo ellos de quiénes se habla ya es bastante, no quería arruinar las cosas como aquella noche que fue a gritarle al omega después de lo que le había sucedido, no quería que lo odiara.

Trato de alejar los pensamientos y concentrarse en su baño, pero una voz le llamo.

- ¡Kacchan! - Dijo la voz de Izuku al otro lado de la puerta.