Obliviate - MINAYEON (ACTUALIZACIONES MUY LENTAS)

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Llevar a Chaeyoung a la enfermería fue fácil. Solo algunos otros estudiantes aún estaban afuera y no se encontraron con ningún prefecto que las interrogara innecesariamente.

Mina le dijo a Chaeyoung que se sentara y esperara en un banco desocupado debajo de un arco. Obedeció de mala gana y vio a Mina entrar por las grandes puertas del ala.

La habitación estaba tenuemente iluminada. Estaba silencioso y vacío excepto por un estudiante conocido que estaba sentado en una cama, luciendo molesto mientras Madame Pomfrey atendía su mano. Era el chico que tuvo que comer con la mano izquierda en la cena. Snape debió haber mostrado piedad y lo envió a la enfermería en lugar de torturarlo durante horas en detención.

Madame Pomfrey miró por encima del hombro con el sonido de la puerta cerrándose. Una suave sonrisa se apoderó de su rostro cuando notó a Mina.

"¡Señorita Myoui! ¡Qué agradable sorpresa!" Ella exclamó antes de fruncir el ceño con preocupación. "No estás herida, ¿verdad?"

"No, no. Estoy bien." Mina le aseguró y se acercó, tratando de no parecer sospechosa. "Solo necesitaba algo."

"¿A esta hora? ¿Qué es lo que necesitas?" Preguntó Pomfrey, concentrándose en su paciente una vez más.

"Bueno, el año pasado usted me enseñó cómo hacer una pasta curativa para quemaduras. Pero cuando estaba practicando durante el verano, seguía obteniendo la consistencia incorrecta. Resulta que me he había estado olvidando de usar Pamplina". Mina soltó una risa incómoda. "Me preguntaba si podría pedir prestado algo de eso".

Pomfrey la miró brevemente. Tenía las cejas arqueadas, casi como si no le creyera a Mina, pero la tarea que tenía entre manos la estaba distrayendo. Y Mina se alegró por ello.

"Está bien. Ya sabes dónde está. ¡Pero solo toma un puñado!" Pomfrey le dio permiso.

Tratando de no parecer demasiado aliviada, Mina rápidamente le dio las gracias y caminó hacia el escritorio de la oficina cerca de la puerta. Estaba más organizado de lo que recordaba, probablemente porque la enfermería todavía no recibía a muchos estudiantes heridos.

Antes de que Madame Pomfrey pudiera despedir al estudiante y ver qué estaba haciendo Mina, rápidamente tomó un rollo de venda y un paño pequeño para limpiar la sangre. Rápidamente escaneó los títulos en las cajas de medicamentos de Pomfrey y encontró una botella de esencia de Murtlap. Antes de alejarse del escritorio, también tomó un puñado de pamplina para evitar sospechas, esperando que Madame Pomfrey no notara que faltaban otros ingredientes.

Llevó el equipo robado en un brazo hasta la puerta, moviéndose rápidamente para que la enfermera no viera a Mina sacando sus pertenencias a escondidas.

"Gracias de nuevo, Señora Pomfrey. ¡Que tenga una buena noche!" Mina dijo y salió de la habitación sin esperar respuesta. No es un comportamiento cuestionable en absoluto.

Mina encontró a Chaeyoung en el banco que la dejó. Apoyaba los codos y las rodillas mientras examinaba su mano llena de cicatrices. Se enderezó cuando vio a Mina.

"Traje lo que pude." Ella explicó, sentándose a su lado. Chaeyoung la vio poner los ingredientes en la superficie de piedra del banco entre ellas.

"¿Cómo conseguiste esto?" Preguntó mientras Mina agarraba su varita para mojar la tela que traía.

"Los tomé prestados." Mina respondió, evitando el contacto visual.

"Quieres decir que los robaste." Chaeyoung la corrigió mientras la mayor comenzaba a limpiarle la sangre de la mano. La leve sonrisa en sus labios desapareció cuando Mina hizo contacto con la cicatriz recién formada.