Los primeros días con la niña fueron los días más difíciles. Siendo jóvenes y padres primerizos les costó entender lo que la pequeña Liv les exigía en cada llanto. Sin embargo ahora, tres semanas después, ellos entendían prácticamente todo lo que ella quería.
Habían descubierto que, incluso en tan temprana edad, su hija tenía un increíble parecido al alfa, en cuanto a su carácter se refería. Cuando Louis una vez había ido a visitar a un cantante con el que haría una colaboración y ese cantante quiso acercarse a él más de lo debido, Liv comenzó a gritar y llorar con fuerza, impidiendo cualquier otro acercamiento. Harry se enorgulleció de su hija cuando Louis le contó lo que había ocurrido. Por supuesto, la colaboración entre ellos no llegó a realizarse.
Poco después salieron a la luz los múltiples delitos del cantante, lo que de llegarse a realizar la colaboración hubiera afectado en gran medida la carrera musical del omega. Louis estaba realmente agradecido con su hija.
También descubrieron que tenía un cierto favoritismo hacia Zayn. Entre todas las personas, cuando él la sostenía siempre se mantenía tranquila.
Habían descubierto tantas cosas sobre su pequeña, y aún les quedaba mucho por descubrir.
Louis estaba deseando llegar a casa para estar con ella. Tener a su preciosa cachorra entre sus brazos mientras sentía los de Harry rodeando su cuerpo. Él quería eso ahora y en su lugar tenía que estar en una innecesaria reunión con su manager para hablar de los detalles sobre la gira de su álbum. Aunque podrían haber hecho una videollamada, Taylor había insistido en verse en persona.
Ahora Louis agitaba su pie impaciente porque terminara de hablar.
Había sacado a la venta finalmente su primer álbum y la respuesta de las fanáticas fue instantánea. Después del éxito de su primer sencillo era todo lo que habían estado esperando. Como siempre hubo gente que criticó su trabajo afirmando que no era lo suficientemente bueno o que su reciente éxito se debía en gran medida a haber tenido una hija con el artista Harry Styles. Afortunadamente ese tipo de gente era mínima comparada con las personas que lo apoyaban por quien era y que amaban su trabajo.
A Louis no podían importarle menos los comentarios de odio cuando llegaba a casa y lo primero que lo recibía en la puerta era su alfa con su pequeña bebé en brazos, ambos con una brillante sonrisa en el rostro. El omega se olvidaba de cualquier preocupación en ese instante.
—Hemos decidido que sea en veinte países. Échale un vistazo a la lista cuando llegues a casa y dime qué te parece. Podemos quitar o añadir algún país, tú decides —Taylor le explicaba y Louis asentía, recogiendo los papeles y ahorrándose las cuestiones que podrían tratar por correo—. Y también, ¿le has preguntado a Harry si cantara contigo la canción principal del álbum? Seguro que no sabe que la escribiste pensando en él.
El omega se sonrojó.
—Claro que lo sabe y sí lo hará, solo en un país.
Taylor asintió y le dijo que habían terminado. Él no perdió el tiempo en marcharse de allí y conducir de vuelta a casa. Había poco tráfico, lo cual agradecía.
Giró la llave en la puerta de su casa, esperando ser recibido por las dos personas que más amaba. Esto no fue así. La casa estaba en silencio y Louis se extrañó.
—¿Harry? —No escuchó respuesta. Frunció el ceño. Dejó las llaves en la entrada y se dispuso a buscar a su alfa.
No tuvo que buscar demasiado. Harry estaba dormido en el sofá con Liv en su pecho desnudo. Su corazón se estremeció por la adorable imagen.
El omega no iba a resistirse, sacando el móvil para hacer una foto.
La luz saltó al hacer la foto y Harry abrió los ojos inmediatamente. Le dedicó una sonrisa brillante y somnolienta.
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What if I say that I love you
FanfictionHarry y Louis se odian. Una noche se emborrachan y tienen sexo. Unas semanas después aparecen las consecuencias.