La hija de Ray || Henry Danger y Tú || Jace Norman y Tú || Henry Hart

C. 24 - ¿Que somos?

Luego de nuestro encuentro en el laboratorio, todo había sido el comienzo de un amorío a escondidas de papá y de todos, sin compromiso y al mismo tiempo reservado. Puede que en su momento en un principio la idea sonara tentadora, al punto que podía decir que no me importaba en lo absoluto si Henry veía a otra persona, pero llegó el momento en el cual comenzó un cierto tipo de malestar del cual había comenzado ignorar ya a la semana de que habíamos comenzado con la situación.  Yo sabía que me molestaba, yo sabía que no quería ser la "amiga con beneficios" de Henry, yo quería ser algo más.

-¿Que tanto piensas?- Preguntó Aidan mientras daba bocados a el arroz que tenía en su bandeja de comida. 

-Um, nada importante en realidad. 

-Mientes, estás haciendo cara de perrito estreñido, siempre haces esa cara cuando algo te preocupa, habla. - Y como si fuera poco, me había mencionado esa oración como si me hubiera dado el clima.

- Yo no hago cara de... 

-Sí, sí lo haces, pero ese no es el punto, dime que tienes. 

- No puedo decirte, es algo... es algo delicado. - No sé en que momento había comenzado a jugar con mi arroz, pero me encontraba haciéndolo. 

-Ni que estuvieras embarazada. - Aunque fue en forma de broma, luego de unos segundos su expresión facial cambio de ser humorística a una de asombro. - Oh por Dios ¿Estás embarazada? 

-¿Que? ¡No!- Aun con el ceño fruncido comencé a reír por lo bajo, escuchamos unas risas provenientes de algunas mesas frente a nosotros, allí se encontraban Bianca y su séquito, técnicamente arrastrando a Henry a sentarse con ellas. No me molestaba el hecho de que se juntase con chicas, me molestaba el hecho de que nunca conseguia decirle que no a Bianca a pesar de que sabia que el que esten juntos todo el tiempo sabiendo que ella gusta de él, era algo que no podia soportar, por que sabía que Henry tenia conocimiento.

- ¿Volvemos al tema de jugador Henry? Por favor, ya superalo, no es como si estuvieran saliendo. - Al estudiar mi silencio sobre sus palabras, abrió los ojos como plato. - ¿Estan saliendo a escondidas?

-Aidan, al principio no era nada, no tenemos nada, o sea... no del todo. - Al notar mi nerviosismo, puedo jurar que su cara decayó en un tipo de asombro junto con incredulidad. 

- Hiciste el error más grande. - 

- Ya sé que no te agrada, pero no es necesario que digas que es malvado. 

- ¿Para ti no está mal que te esconda mientras sigue haciendose el tonto con ella? - Se giró sobre su silla y me miró fijamente. - ________, tu no eres una opcion, eres una muy valiosa oportunidad, y él es un idiota si no valora eso. - Terminó de dar un ultimo bocado a su arroz para tomar la bandeja y dirigirse a la pila de las bandejas sucias. 

Hay algo en las palabras de Aidan que habia dolido como mil demonios en mi corazon, pero a pesar de que no quiera admitirlo o verlo de la manera completa. Yo me estaba de cierta forma doblegando a su merced, pues honestamente ¿Quien me aseguraba que Henry no se encontraba haciendo lo mismo con Bianca o alguna otra chica? A lo mejor él queria exclusividad, pero no queria ser exclusivo con nadie. Luego del almuerzo, la tarde se me habia pasado relativamente tardada, pues no podia haberme quedado con peor pensamiento en mi sistema que pensar que Henry posiblemente solo quería un rato y que aunque lo negara, yo quería algo más, a lo mejor no un titulo de novios, pero al menos si la afirmacion que solo somos el y yo. Me encontraba limpiando una estantería de mi habitación, papá me habia mencionado que ya que se encontraría con Henry, o mejor dicho Kid Danger patrullando en los monitores de la capi cueva, que si deseaba podía quedarme en casa tranquila y hacer mis tareas. Escuché la puerta abrirse, unos pasos en las escaleras y mi puerta abrirse. 

-¿No hay mucho que hacer en la capi cueva entonces? - Pregunté terminando de acomodar los cuatro libros sobre la estantería, cuando me giré sobre mis talones pude verlo. 

-En realidad solo quería verte... - La voz de Henry hizo que un pequeño pinchazo se adueñace de mi pecho. 

- Oh... Um, pues ya me viste... - solté una risita incomoda, al parecer lo notó, decidió acercarse a mi, me tomó por la cintura y plantó un beso sobre mis labios. - Para, papá puede entrar y... 

- Ray esta en la capi cueva junto con Schowz nuevamente experimentando su indestructibilidad, puede que tome un rato... - Volvió a besarme, pero al ver que no le respondía como siempre lo hacia, frunció su ceño y me observó sin soltarme. - ¿Estas bien? Te siento algo molesta... 

-No estoy molesta... - Que si lo estaba, por que honestamente no encontraba las palabras para expresar la pregunta que mi mente estaba formulando. 

- ¿Sabes que puedes hablar conmigo, cierto? - Besó mi frente. 

- Es una.... es una tontería. - 

-No es una tonteria si te tiene de ese humor. - Me dirigió a sentarme en la cama, solté un suspiro algo ruidoso, no quería llegar a esta comversacion pero al mismo tiempo lo siento tan necesario. 

- ¿Qué somos, Henry? - Pude observar como su rostro habia cambiado radicalmente. Esto habia sido una muy mala idea.