I N T E R C A M B I O

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Los seis chicos entraron al cuarto compartido de Natural Team, y por instinto giraron el rostro hacia el sitio donde se supone que debería estar aún acostado su líder, y si estaba ahí, pero...

─¿Qué paso?─preguntó al instante Hijirikawa. En el tiempo que llevaban como grupo, había optado una posición en la que se llegaba a preocupar por el estado de sus compañeros.

El pelirrojo se encontraba hecho, literal, una bolita, como una especie de posición de alguien que se acababa de traumar. No siento tan lejano al sentimiento que sentía en ese momento el centro de Idolish7.
Escuchó las voces y giró para mirarles, se preocupó sin poder evitarlo, esos no eran sus compañeros de grupo, ¿dónde se supone que estaba?, ¿quienes eran esos chicos?, ¿quién era el chico que vio en el espejo? Porque no era él para nada.

─Otoya, ¿qué ocurre?─preguntó quien fuese hermano del pelirrojo. Se notaba más preocupado que el resto.

Otoya, ¿quien rayos era Otoya? La idea de que así se llamará el chico en el que al parecer estaba...llegó a su cabeza, aún así, estaba nervioso, no quería estar ahí, quería ir con sus amigos, no conocía a nadie ahí y tampoco sabía que demonios estaba pasando. Era una locura, una horrible pesadilla de la que quería despertar ahora.

─Aquí apunto una pesadilla─señaló Ren en un intento de bajar la pesadez del ambiente.

"Ni lo dudes, es una pesadilla" pensó Riku, antes de jalar la cobija y cubrirse completamente, tal vez estaba actuando de manera infantil, pero en ese momento le importaba un reverendo comino, no quería ver lo que estaba pasando, necesitaba ¿procesarlo?
Los chicos miraron a su líder con cara de "¿que demonios le pasa?", no era normal ver actuar al pelirrojo así, y de cierta forma era un tanto preocupante, más silenciosamente optaron por dejarlo sólo, tal vez se calmaría con el pasar de las horas. Las buenas noticias dentro de ello: STARISH tendría un descanso.

Por su parte, el centro de I7 escuchó la puerta cerrarse y asomó la cabeza comprobando que ya no había nadie, suspiro con cierta tranquilidad y se descubrió un poco de la cobija. Estaba sólo, eso lo tranquilizó un poco y sin poder evitarlo dejó escapar un suspiro de relajación, seguía sin comprender que estaba ocurriendo, y mentalmente se pregunto: ¿si él estaba en ese cuerpo, el dueño de éste, el tal Otoya, estaría en su...cuerpo?, se extraño por tan extraña pregunta formada por su subconsciente, más no la descartó y en caso de que así fuese, ahora se estaba preguntando, ¿cómo le estaría yendo al chico?

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Otoya hace un rato que había salido de la cama, ahora buscaba con algo de pena un indicio que le dijera donde estaba, y era con pena por el simple hecho de que estaba registrando un sitio ajeno. Buscó entre el mueble que estaba cerca de la cama, y cuando encontró algo de interés, por mencionar que se tratase de una pista, tomó aquello entre sus manos...

─Idolish7─leyó lo que aquel CD tenía grabado en grandes y doradas letras cursivas.

Se sorprendió, aún así, trato de pensar en donde pudo haber escuchado ese nombre antes, pues por extraño que parezca...se le hacia muy familiar, como si ya lo hubiese escuchado antes, ¿pero en dónde?

"─Otoyan─"

La voz de su sempai llegó a sus oídos sin poder evitarlo, y fue ahí que lo recordó...

•flashback•

En aquella época sus sempais seguían habitando en el Course Master, por lo que aún seguían durmiendo con ellos. Recordaba que aquella noche estaban sólo él y su sempai: Kotobuki Reiji; Tokiya se encontraba como invitado especial -al igual que Masato- en una entrevista En Vivo, ya que no hace tanto que ambos habían participado en una nueva serie. Otoya estaba aburrido aquella vez, ni su guitarra o escuchar música lo salvaban de su aburrimiento, por lo que Reiji lo invitó a hacer algo divertido.

─¿Un concierto En Vivo?─preguntó cuando su sempai le entregó un cuenco lleno de palomitas.

─Así es─Reiji se sentó aún lado suyo, ambos enfrente del computador del mayor.─Será un gran concierto...─empezó a hablar con entusiasmo.─Siempre es bueno conocer a más personas, que al igual que nosotros, están dentro del mundo del entretenimiento─.

─... Es un buen punto de vista─señaló el menor un tanto intrigado.

─Sabía que te interesaría─sonrió el castaño.

Otoya estaba a punto de decir algo, pero en ese preciso momento la espera se término y el grito tan característico de los fanáticos se dejó oír a la par de la primer canción. En ningún momento despego su mirada de la pantalla del computador, su primer sorpresa fue el observar que eran un grupo de siete personas, como el suyo o HEAVENS, y que decir de sus voces, lograban un buen acorde entre todos y sus voces en conjunto o individualmente se escuchaban muy bien.
Todo el trayecto viendo aquel Live fue simplemente sublime, Idolish7 era sin duda un grupo magnífico y que nunca más olvidaría. Aquella actitud se habían ganado una leve burla por parte de su sempai, Reiji no esperaba que se terminará enfrascando tanto en ello, aunque bueno...no es como que dudará en que algo así fuese a pasar, después de todo se trataba de Otoya.

•fin del flashback•

Tomó el CD y se acercó de nuevo al espejo, donde comprobó lo ya obvio.

─Estoy en el cuerpo de su líder─susurró pasando de mirar aquel CD a mirarse al espejo. Estaba en shock.

¿Siquiera lo que estaba pasando era posible?
Buena pregunta.

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