capítulo 29

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[Sunwoo]

los días pasaban y no podía dejar de pensar en Chanhee, estaba en mi cabeza a todas horas, incluso en mis sueños.

Si supiera lo mucho que lo extraño, pero lo único que debe estar pensando es que soy un idiota, un mentiroso que rompió su corazón, ese que corazón que quería proteger por encima de todo. Suena irónico que al final fuera yo mismo quien acabó destrozándole.

me odiaba a mi mismo y seguramente él me odiaba aún más. Estaba cansado, ya no podía soportarlo más, no quería tener miedo de una persona, ¿que tan malas podían ser las consecuencias por renunciar?

no quería estar ni un día más sin Chanhee, haría cualquier cosa, sin importar lo que fuera, para tenerle nuevamente a mi lado.

Después de haberlo estado pensando durante todo este tiempo me decidí, iría a la empresa para dimitir.

estaba frente al despacho del jefe, di varios golpes hasta que me dio permiso para entrar.

¿que te trae por aquí tan temprano? —preguntó tan seco como siempre, le odiaba tanto.—

quiero dejar el trabajo, no me siento bien —respondí de la misma forma.—

no puedes. —abrí mis ojos al escuchar aquello, ya era lo que me faltaba por escuchar.— ¿es por que no está tu querido jefe? pues déjame decirte que no va a volver.. o tal vez por ese chico de lindas piernas ¿es por él?

que hablara así de Chanhee me estaba sacando de mis casillas, apreté mis puños lo más que pude, intentando controlarme. Me sentía asqueado al escucharle decir esas cosas.

te escuché hablar con él, solo era un juguetito para ti, por que no tenías a nadie más en esa isla. Además es difícil poder resistirse a ese chico, tiene una cara tan bonita.. —apreté mis puños aún más.—

no quiero que hables de él y mucho menos que digas cosas así, tú no sabes nada de mi, no sabes nada de nosotros.. —grité enojado, ya no podía más.—

intenta poner un pie fuera de este lugar —gritó de la misma forma.—

Iba a salir de ese lugar lo más rápido posible pero ese hombre vino hacia mi dándome un fuerte golpe en el rostro, haciendo que me cayera al suelo.

Comenzó a golpearme con tanta fuerza, no podía defenderme, me sentía débil, podía notar como mi nariz sangraba.

𝒍𝒐𝒔𝒕 ; 𝒔𝒖𝒏𝒏𝒆𝒘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora