Confusiones

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Los recuerdos eran dolorosos, ya no sabía que era verdad y que no, aún seguía ahí tirado, muy adolorido, la oscuridad que lo invadía no era normal, ojalá pudiera irse y huir de todo aquello, pero se había condenado a sí mismo. Aún se preguntaba, por qué había cometido esa estupidez.

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Severus fue guiado con su jefe de casa, Horace Slughorn, el hombre decidió que solo le daría un pequeño castigo al día siguiente, sería solo ayudarle a ordenar los trabajos de primero al término de sus clases.
Al día siguiente Severus fue a sus clases como de costumbre y, a la hora de ir a la clase de pociones compartidas con Gryffindor pudo notar como Remus veía a Sirius, y Sirius a Remus; Severus empezó a asustarse así qué no pudo concentrarse en la clase.
En cuanto llego la hora del descanso Severus tomó sus cosas dispuesto a irse ignorando a su novio (obviamente se encontraba molesto) pero Sirius pasó a su lado golpeándole el hombro al mismo tiempo que entregándole una nota en la mano.
Severus abrió la carta con esperanzas, para encontrarse un "tenemos que hablar, después de clases en donde siempre" esto hizo que el corazón de Severus se acelerara, ¿hablar de que? ¿lo iba a terminar? Solo esperaba que no.
Severus caminó nervioso hacia el gran comedor con esperanzas de encontrar a su novio, cuando lo vio iba a caminar hacia el, pero recordó que no podía sin ser descubierto, caminó con tristeza hacia su mesa donde Lucius lo esperaba.

-¿Qué sucede, todo bien, Severus?-

-Si, pero no tengo mucha hambre, será mejor que me vaya-

-Tienes que comer, dijiste que querías empezar a cambiar tu alimentación PARA BIEN, y comer menos no es para bien- Severus agacho la mirada cansado, no quería discutir con su amigo.

-Esta bien- dijo agotado, tomó cosas al azar sin importarle qué era o si le gustaba o no.

-¿Sucede algo, Severus?- Pregunto su amigo Regulus.

-No, todo está como siempre- y no era mentira, solía tener ese tipo de discusiones con su pareja pero esta vez parecía que algo malo iba a pasar.
Los chicos hicieron caso y preocupados empezaron a comer, todos sin querer insistir.

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Severus terminó el día con su clase de encantamientos compartida con Ravenclaw, iba por los pasillos en dirección a su encuentro con su pareja antes de tener que regresar para ir a su castigo, solo iba a pedirle perdón para hablar luego con el, pero fue interrumpido por el mismo profesor Slughorn el cual le pidió que le acompañara, Severus no tuvo de otra más que acompañar al profesor y tener que explicarle a su novio después el porque no fue.
Severus terminó su castigo una hora y media después, cuando iba camino a la sala de menesteres Lucius lo detuvo.

-Severus, te estuve buscando...-

-Lo lamento, el profesor Slughorn me castigo y vengo de ahí-

-¿Por qué no traes la corbata puesta?- Severus vio su corbata que traía en la mano y luego comenzó a tratar de ponérsela, pero en su desesperación Lucius lo ayudó.

-Me empecé a asfixiar con la corbata y me la quité- Lucius asintió y comenzó a atársela.

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Sirius seguía esperando a su novio en la sala de menesteres, ya había pasado más de media hora y aún no llegaba, decidió esperar un poco más. En cuanto dio una hora y media se fue, tomó su túnica, se la colocó y comenzó a caminar por los pasillos, cuando pasó por uno se encontró a su pareja (que no había llegado en donde quedaron) por estar con Malfoy, Sirius observó con furia como el rubio platinado le acomodaba la corbata a su novio.
¿Así que era Malfoy el que complacía a su novio? Y el que creía que el platinado estaba enamorado de su amigo.

-¿Pero que tenemos aquí? Malfoy y Snape... ¿terminaron de follarse?- pregunto con recelo al ver como Lucius no soltaba la corbata de Severus.

-No, esto no...- Severus apartó las manos de Lucius de inmediato y se puso derecho.

-No me interesa si te lo cojes o no, pero una cosa si te voy a decir, Malfoy, aléjate de Remus- y con esto empujó al mayor.

-Sirius...- Severus trato de ir detrás de su novio, pero se contuvo ante la presencia del rubio.

-¿Qué le pasa a Black?- pregunto Lucius con asco- vamos, Severus, antes de que se haga tarde y nos regañen- Severus siguió a su amigo a la sala común de Slytherin, ya tenía dos cosas que explicarle a su novio.

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Sirius caminó con rabia en dirección a su sala común, cuando llegó siguió a su habitación sin ver a nadie más, solo caminó a paso rápido y en cuanto estuvo ahí pateo todo lo que estaba a su alrededor.

-¡Maldito! ¡Zorra! ¡Maldita puta!- empezó a gritar a la nada.

-Sirius ¿qué sucede, está todo bien?- Remus vio en la sala común como su amigo llegaba furioso sin ver a nadie así que lo siguió y lo encontró pateando objetos mientras gritaba cosas sin sentido.

-Sí- respondió seco.

-Pues no lo parece-

-Quiero estar solo- Remus entendió, así que iba a salir de la habitación hasta que fue detenido por Sirius- o mejor no, tienes que saber que el imbecil de Malfoy se está follando al asqueroso de Snape- Remus paró en seco ¿había escuchado mal?

-¿Como dices?-

-Que el idiota de Malfoy y Snape se están cojiendo- Sirius soltó tanto desprecio en las últimas palabras que a Remus le dolió.

-¿Cómo lo sabes?-

-Los vi. Remus ese idiota no te merece, debes dejar de buscarlo- el licántropo trago fuerte, tenía sospechas de que Lucius lo había terminado por alguien más, pero jamás creyó que ese otro fuera Snape. Remus asistió rápido y abrazó a su amigo.

-No te frustres por eso, voy a estar bien. Lucius y yo ya no somos nada, si quiere estar con Snape que bueno. Yo ni siquiera debí haber aceptado salir con él... si al que amo, es a ti...- Sirius acepto el abrazo de Remus y lo beso en la cabeza.

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Okay... estuvo muy corto pero ya el próximo será más largo... ;)

Espero les guste. Nos leemos luego 💗✨

Sin retornoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora