Sin retorno

Pelea

Veía una figura entre sus brazos, la sentía y reconocía. Quería dejar de mirarla pero no podía, trataba de identificar si era quien creía y un temor horrible le inundó. Su respiración se aceleró y trató de hacerle reaccionar, pero parecían inútiles sus intentos.

"Ya casi"

Severus seguía discutiendo con su amiga, no sabía como explicarle que tenía que llegar con Sirius antes de que este cometiera alguna estupidez.

-Lily, escucha, hablaremos luego sobre lo qué pasó ¿si? Por ahora tengo algo urgente que hacer-

-¿Enserio? ¿Me vas a dejar así? Malfoy y Black te están buscando, si no te retengo yo lo harán ellos. Ya déjate de tanto misterio y dime qué rayos está sucediendo- el oji-ónix frustrado vio a su amiga suplicante y dijo:

-Te lo dire todo, te contaré todo lo que quieras solo si me dejas ir ya y retienes a los chicos, en verdad tengo que hacer algo urgente- la chica lo dudo un momento pero luego asintió dejando que su amigo se fuera.

Severus caminó lo más rápido posible, buscaba por todos lados hasta llegar a un pasillo en el cual vio como James Potter salía de un aula muy molesto, este se acercó a paso rápido chocando así con el.

-Snape- escupió el miope- me das asco. Que poco te quieres- Severus no entendía porque le decía eso, ya estaba acostumbrado a sus insultos, pero esta vez sonaba verdaderamente enojado.

-¿De qué hablas Potter? Ya te has hecho demasiado daño-

-NO. Tú eres el dañado, mira que meterte con alguien que te daña tanto como lo hemos hecho Sirius y yo es de enfermos- Severus se sobresaltó al oír esto.

-¿De qué estás hablando Potter? ¿Qué te dijo Sirius?-

-Lo suficiente para que te repudie más- escupió con asco. James tomó de la camisa a Severus, este reaccionó y su primer instinto fue tomar su varita, la cual fue arrebatada por James y aventada lejos de su alcance.

-Potter, esto es algo que no te concierne- trato de razonar Severus pero James no le escuchaba. Tirándolo al suelo indefenso, lo tomó nuevamente y lo golpeo, el sonido de los quejidos atrajo a alumnos los cuales se acercaban a ver la pelea.

Severus trataba de zafarse del agarre del castaño, pataleaba y se cubría con los brazos hasta que James le soltó un golpe en la costilla izquierda haciendo ruido, algunos podrían jurar que escucharon cómo está se rompía. El peli-negro logró tumbarle los lentes al otro, pero esto solo le sirvió para enfurecerlo más, James al no verlo pero sí sentirlo, siguió golpeándole sin piedad. Severus logró golpearle con la rodilla en la boca del estómago a su contrario, aprovechó esto para quitarse a James de encima, pero el otro lo volvió a tomar en cuanto se recompuso, Severus soltó un chillido al sentir como James le apretaba con fuerza el tobillo.

-Potter, ya es suficiente, vas a arrepentirte- decía con dificultad el peli-negro.

-¡No vuelvas a acercártele a Sirius!-

-¡Eso lo tiene que decidir el!-

-Te estoy dando el mensaje- lo volvió a tomar y le siguió golpeando. Seguía y seguía. Dejó su ojo morado, el labio partido, un tobillo seguramente torcido, una costilla probablemente rota y las dos muñecas adoloridas.