Experimento sin alma

Calido

Estaba estirado en mi cama, la luz de un anaranjado amanecer hacia que no me costase mucho adaptarme a la nueva luz. Me senté en la cama, viendo por el enorme ventanal que había en la habitación. Una enorme ciudad que desde esa altura se veía bajita. la luz iluminando y reflejándose en cada ventana y farola apagada del lugar. El cielo oscuro que comenzaba a iluminarse lentamente por el sol a media salida. Era una vista muy hermosa, debía decir, pero no se comparaba en nada a lo que había a mi lado.

Quite levemente las sabanas de la cama, dejando ver ese maravilloso tesoro que escondían. Su lisa y suave piel pálida, su bonito y delicado cuerpo, sus hermosos ojos y sus finas pestañas que escondía tras sus gafas, sus hipnotizantes labios, sus adorables cachetes. Ninguna de las vistas posibles podía compararse a mi querido Fresh. Me era demasiado obvio, lo amaba, lo amaba con locura si se puede decir. Su extrovertida manera de actuar, sus bromas y chistes que calmaban las situaciones, su seriedad y determinación en el trabajo, su timidez y vergüenza al estar demasiado cerca mío. Cada pequeño acto que hacía solo agrandaba más el espacio que siempre tendría en mi corazón.

Salí de mis pensamientos al comenzar a escuchar mi móvil sonar encima de mi mesa de noche, rápidamente contesté para que el ruido no despertase a Fresh.

Paperjam: Paperjam al habla ¿Qué se le ofrece?

Error: Hey Paperjam ¿Tienes un momento?

Paperjam: Para usted siempre creador- Respondí algo confuso de que llamase a estas horas de la mañana-

Error: Tranquilo es solo una pregunta, no tomara mucho tiempo- Dijo, tomando una pausa de unos segundos antes de seguir- ¿Mi hermano te da consentimiento cuando tenéis relaciones?

Paperjam: ¿Q-que?- Pregunté en un tono seco, esa pregunta me había caído al cuerpo como un balde de agua fría- N-no se d-de que me habla- Comenzaba a morderme la uña, esto era malo, demasiado. Se suponía que no debía enterarse, le he dicho a Fresh que no escriba nada de esto en el diario y tengo el cuidado necesario para no dejar marcas en lugares visibles.

Error: Fresh y Geno fueron a una sauna, eres muy astuto pero ¿Realmente creíste que podrías esconderme algo?- Comentó con un tono egocéntrico como si hubiese leído mi miente-

Paperjam: L-lo siento, mi creador- Dije, tenia razón, no debí haber cruzado la línea del trabajo. Pero aún así temblaba, tenía miedo de que me quitase mi trabajo, de que me alejase de Fresh-

Error: No hace falta que te disculpes- Sonaba tranquilo, no enfadado como esperaba- No me importa que hagas eso con mi hermano mientras el esté de acuerdo. Aún así, sabes que me gusta mucho tener controladas y vigiladas todas las situaciones, así que la próxima vez informadme de todo, los dos ¿Si?

Paperjam: S-si creador, lo tendré en cuenta- Iba a despedirme o preguntar si había algo más que comentar pero solo colgó-

Suspiré y miré a mi lado, que importaba. Acaricié esos suaves y despeinados cabellos de Fresh que tapaban parte de su rostro, no me iban a quitar el trabajo, así que estaría con el, y podría estarlo durante mucho más.

...

Colgué rápidamente al escuchar un sonido metálico venir de la cocina. Estaba en medio del desayuno cuando Geno me envió el mensaje hablándome sobre las marcas en el cuerpo de nuestro hermano menor, el por alguna razón pensó que eran picadas de mosquito o mordidas de perro, que inocencia más estúpida tenía abecés, aunque era sorprendente que la conservase viviendo con Reaper. Pensándolo bien ¿El era virgen aún?

Dejé esos pensamientos de lado y entré a la cocina. Vi varios trozos de aguacate (Palta para algunos) cortados en la tabla de madera, un cuchillo en el suelo y a Ink agarrándose el dedo. Entendiendo rápidamente la situación me acerqué a el, haciendo que destapase su dedo. tenía un corte algo profundo que dejaba salir varios hilos de sangre que bajaban hasta la palma de la mano.

Error: Oh Ink, te dije que no hicieras nada que no sabes hacer si no estoy delante para supervisarte, sabes perfectamente que los cuchillos son peligrosos- Dije mientras lo sentaba en una silla-

Ink: Y-yo qu-que-quería ay-ayudar- Decía mientras sus palabras temblaban levemente, ahora que lo pensaba, creo que era la primera vez que el sangraba. Ya que la primera vez que vio la sangre fue, aparte de en sus clases de biología que yo mismo le hacía, cuando golpeó a Nightmare y le dejó la nariz hecha un desastre-

Error: vamos, no te asustes, no es una herida grave- Intenté tranquilizarlo con un tono más amable. Puse el cuchillo en el fregadero, fui a por alcohol y vendas y me senté delante suyo-

Ink: ¿Es-estas enfadado c-conmigo?- Preguntó con la mirada baja mientras mojaba una servilleta con el alcohol-

Error: Claro que no, pero no quiero que se repita- Comencé a pasar la servilleta mojada por la herida, y aunque sintiese ese picazón su expresión parecía feliz por lo que dije. Era como si fuese  un perro en busca del cariño de su amo- Pero no quiero que antepongas cosas tan triviales ante tu seguridad, me importa mucho más tu estado que mis obligaciones, así que cuídate bien ¿Si?

Ink: ¡Si!- Dijo mientras sus pupilas se volvían como soles amarillos, ahora que comenzaba a experimentar emociones le eran más fáciles de expresar y cada vez aprendía más-

Desinfecte completamente el corte con cuidado y lo vendé. Agarré su mano con las dos mías y la acerqué a mi rostro, cuando estuvo lo suficientemente cerca posé mis labios en la yema del dedo herido dando un delicado beso en este. Me volví a separar pero sin soltar su mano, lo había hecho por inercia pero me había recordado a los primeros días en los que Geno me enseñó a cocinar. Aunque se había sentido bien, podía no aceptarlo pero mimar a Ink en verdad me gustaba mucho.

Error: ¿Sigue doliendo?- Pregunté aún mirando las manos, ya que el también las miraba-

Ink: No- Iba a soltar su mano pero el con la que quedaba hizo que se quedasen juntas- Tus manos son muy cálidas, al igual que tus labios.

Reí levemente, más por la vergüenza de haber hecho eso por cuenta propia. Seguimos así unos momentos, que parecían pasar muy lentos y a la vez muy rápidos. Pero mis pensamientos nublados y mis agradables y confusos sentimientos se desvanecieron al escuchar el sonido del timbre