#9: Si eres igual, Jones.

29 2 3
                                    

Este capítulo está largo (creo), pero tiene pequeños detalles.

💫 🌙 💫

🔮

Era una tarde sombría, nublada, se sentía helada la mansión a pesar de estar en primavera, parecía como si el invierno jamás se iría de ahí. Detestaba que sus tíos la trajeran a aquel sitio, prefería quedarse en su casa con su hermana menor, sin embargo, su padre pensó que ya tenía edad para empezar a aprender las artes oscuras, ser una más de ellos. Apenas tenía once años de edad, debería de estar disfrutando su niñez y jugar con su hermanita, no aprender a como torturar o matar a sangre fría.

Se hallaba en el segundo piso de la gran mansión, tan impecable, de colores grises y blancos, como el hielo. Era como estar en un vacío helado. Su casa no era cálida, era sombría, no obstante, el hecho de que la mansión de los Malfoy sea usada como cuartel de matanza, tortura, secuestro, extorsión, de maldad tan pura y desalmada... hacía el  terreno treinta mil veces más lúgubre y helado.

Entonces escuchó gritos abajo, de su tía Bellatrix y de Narcissa. Había más voces. Ella lo supo, empezó a temblar... Aquello significaba que venían presos... con ello, más clases para su pobre inocencia. Entonces al ver subir por las escaleras a Malfoy apresurado, con el cabello rubio sin brillo, su cara pálida y un nerviosismo intenso, supo que esta vez era peor. Draco normalmente la calmaba, le hacía conversación, era como un hermano mayor protector y a ella no le gustó su expresión de miedo vivo en su rostro.

—Escúchame, Nix, tienes que esconderte. Ha venido Potter, me usaron para reconocerlo... —comenzó a explicarle apresuradamente, mientras tomaba de su brazo y prácticamente la jalaba hacia una de las habitaciones más apartadas, como una especie de búnker—. Se pondrá feo, puede venir el Señor Tenebroso...

—Draco, ¿qué está pasando? —Le preguntó y su voz tembló al escuchar gritos de tortura.

—No lo sé, pero quédate aquí. Si Potter se escapa, el Señor Tenebroso se descargará con todos y si ve que hay un menor aquí, te agarrará como carnada y juguete de tortura —le respondió, sin ningún filtro, sin querer sonar dulce, sin querer calmarla, esta vez era en serio—. Nix, prométeme que, aunque me escuches gritar, a quién sea, no saldrás. Por favor.

Draco no era nada relacionado para ella, pero era la única figura realmente familiar y de alguna manera de amor que había recibido a su corta vida. Asintió haciéndole caso. Él cerró completamente todo y escuchó cómo conjuraba hechizos rápidamente. Las lágrimas de ella caían como cascada, pero no hacía ruido.

El primer grito desgarrador llegó y ella se puso en posición fetal tapándose los oídos, mientras se mordía el labio para no hacer ruido. Tía Bellatrix gritaba "sangre sucia" y luego "¡Crucio!".

De repente escuchó cómo alguien abría la puerta de su cuarto y se levantó de una sola, conjurando un Impedimenta de inercia, logrando que el candelabro de su habitación se rompiera y cayeron trozos de vidrio. Escuchó cómo lastimaba a alguien y en la oscuridad lo divisó.

— ¿De nuevo con las pesadillas?

Ella se sentó en su cama, estaba sudorosa, un sudor frío, con escalofríos incontrolables. Se tocó las mejillas y notó que había estado llorando a mares dormida. Él se aproximó a su cama y se sentó en el filo de esta, lo miró a los ojos, en la oscuridad aquellos ojos ámbar brillaban de aquella forma tan única y sintió menos frío.

— ¿Cuándo me contarás todo?

Ella negó con la cabeza y se levantó de su cama, para arreglar el desastre con un ¡Reparo!  y coger un kit de primeros auxilios, y así curar la herida de él.

Blog de Hogwarts (tercera generacion Harry Potter)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora