Minho odia a Seungmin, por se vanidoso y provocador a los demás cuando chupa sus jodidas paletas de cereza. Debido a eso, hará todo lo que esta en sus manos para hacerlo sufrir.
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꒰ ♡ : historia terminada
꒰ ♡ : gráfi...
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—¿Cómo te sientes en estos momentos, Bang Chan?—preguntó la psicóloga Yang mi.
—No quiero estar aquí.—respondió el rubio.
—¿Por qué?—preguntó de nuevo.
—No me gusta hablar de mis problemas.
—Okey, no me hables de tu vida.—respondió con una sonrisa—¿Cuál es tu color favorito?
—El negro.—respondió sin mirarle.
—El color negro se asocia a la noche y a la ausencia de luz.—dijo ella—¿Crees qué te hace falta la luz en tu vida?
—Si, Felix era mi luz y se ha ido.—respondió Bang Chan mientras se mordía los labios con nerviosísimo.
—¿Y el es?—preguntó.
—Mi exnovio.—dijo sin más.
—¿Me cuentas un poco más de Felix?—ella le sonrió esperando por su respuesta.
—Lo conocí hace unos años en la preparatoria.—comenzó hablar—Siempre fue tan lindo y desde el primer momento en qué lo vi, me enamore.—dio una sonrisa, pero al instante borro—Pero yo fui un imbécil con el.
—¿Qué hiciste?
—Jugué con sus sentimientos—contestó avergonzado.—Él nunca debió confiar en mi, sin embargo hace unos meses atrás decidió darme otra oportunidad.—hizo una pausa—¿Y sabe? Lo arruine de nuevo.
—¿Por qué, Bang Chan?—la psicóloga ladeó la cabeza.—¿Qué sucedió?
—Parece qué entre menos quisiera lastimarlo, más lo hago.—respondió—Tengo muchos problemas, hago cosas malas y a el no le gusta, él quiere que yo cambie.
—¿Él te pidió que vengas aquí?—Bang Chan asintió—Veo que decidiste hacerle caso, ¿por qué?
—Por qué quiero cambiar, quiero ser mejor persona para Felix—sonrió con tristeza—Prometió darme otra oportunidad si cambiaba, él quiere que deje de drogarme.
—Bang Chan, me parece muy bien que quieras cambiar por la persona que amas—dijo con sinceridad.—¿Eres adicto a las drogas?
—Algo así, las uso para olvidarme de todo.—contestó—Es mejor qué vivir la realidad.
—¿Qué es lo que quieres olvidar?—preguntó con cuidado de no hacerlo enojar—Es bueno sacarlo, de aquí nada saldrá. Esto es entre nosotros dos y nadie más.
—A mi madre jamás le he importado—confesó con coraje.—Desde chico siempre me ha dejado solo, cambia de pareja cada dos meses y les pone más atención a ellos, qué a mi.—una lágrima cayo por su mejilla—Eso aún duele.
—Claro que duele, el amor de una madre es muy importante.—respondió la psicóloga—¿Ella jamás te ha demostrado amor?
—En ocasiones.—contestó Bang Chan—Son pocas las veces en las qué me ha abrazado hasta quedar dormido, era más pequeño.—explicó.—Ahora no dejo qué me toque.
