Capítulo 2: Estilo de vida

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Un estilo poco ortodoxo da inicio para aquellos niños, por lo cual, todos los acontecimientos que contados dan apertura y suceden 10 años después; sé qué te estás preguntando "¿porqué 10 años?¿no deberíamos ver como va su desarrollo desde pequeños? ¿después de todo lo ocurrido porqué adelantar?". Todos, creo que deberían entender que cuando nos proponemos en algo, y nos gusta, la dificultad no importa, ni la adversidad está de frente, la constancia es lo que los ayudó, adelanto esta parte de la historia porque nosotros, o em caso, la gran mayoría como lo es la mayoría de los niños, en algún momento queríamos saltar esa etapa de la niñez "quiero ser ya un adulto" o "mi adolescencia será una gran etapa", eso sin contar que cuando eres adulto deseas atrasar el tiempo. En esos tiempos de niñez era lo que decías, lo que dictaminabas, ya conocemos un poco el porque del avance en el tiempo; bajo la protección de los alias de: Akira y N. Para proteger sus verdaderas identidades, reciben grandes sumas de dinero por parte del gobierno por trabajos y misiones que les dan el mismo, son conocidos como "BIO" (algo así como: Bando de Inteligencia Orgánica, que se yo, no entendí mucho el nombre) en las calles, han trabajado con el estado, gobierno, hasta para el mismo presidente con tal de proteger sus sistemas de ataques terroristas; no pasa mucho de eso cuando suena el tono de llamada de un teléfono:

—¿En serio tengo que hacer esto?, es muy fácil...— entrando a unos conductos de ventilación.

—No me compraste el helado y perdiste todo el dinero en que carajo, no sé, así que esta es el trabajo más justo para que te perdone— con una voz irritada, le reprocha Akira.

—Esta bien, con tal de que puedas perdonarme lo haré— mientras saboteaba las cámaras de seguridad para luego, pasar desapercibido dentro del edificio.

—Muy bien, ya entré en la masión de los idiotas, ¿ahora que?

—Ok, deberías que poder ver desde donde estás a guardias con ametralladoras, por favor, te lo pido porque sé que eres loco, ten cuidado. No voy a atenderte más heridas que te causas por tu imprudencia.

—¡Já, já, já! Ah, querida hermana, te veo de muy buen humor hoy. Tranquila, sé que hacer— colgando la llamada, guarda el teléfono en su suéter, y del mismo saca su pistola para colocarse su máscara.

—¡Oye novato! Cuidado con esas cajas, valen más que tu casa así que si una de ellas se rompe te vuelo la cabeza — reclama uno de los guardias, furioso al ver que aquel novato había dejado caer una de las cajas con el producto.

—S-Si señor— respondió con temor en la voz el muchacho

— Yo si fuera ustedes no me pondría a derramar sangre injustamente, al menos no en mi dominio, así que propongo algo, cállense, hagan silencio— provocó para asustarlos.

—¡¿Quién anda allí?!

—Lo diré una vez más, ¡silencio!— vuelve a mencionar N, después se culehtade una esquina, dispara hacia uno de los guardias y rápidamente vuelve a esconderse para no ser detectado.

Al escuchar el cuerpo golpeando el piso, los restantes dispararon con mal presagio; N había preparado unos pequeños equipos de sonido los cuales tenían grabado su voz, cada uno  debido a la desorientación y no saber de donde proviene, dan la orden caminar por lugares separados, poco a poco las grabadoras empezaron a hacer que dispararán sin dar en un blanco; a lo que solo N, con trampas los dejaba atrapados como en telarañas para golpear hasta que, no quedó ni uno consiente. Aquel novato con miedo a morir no sabía que hacer, estaba demasiado nervioso como para tomar un arma, tampoco contaba con la experiencia. Así que se arrincona en detrás de uno de los autos que transportarían la mercancía.

—Oye chico, tranquilízate, no pasa nada, tampoco te haré algo así que te puedes ir tranquilamente de aquí...— viendo detallamente su rostro— Espera, yo te conozco.

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