___ Kadenokoji a nada de graduarse de su carrera como diseñadora de moda conoce a Ran Haitani en una situación desastrosa sin saber qué su vida cambiaría completamente.
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Desde la discusión que tuve con Ran solo pasó un día para que pudiéramos hablar las cosas con más calma, llegamos a un acuerdo de tener un hijo dentro de los próximos meses.
Ran habló con Kokonoi para comunicarle la noticia de manera oficial.
Me sentía como en un sueño al saber que pronto Ran y yo tendríamos un hijo pero a la vez me sentía en una película de terror al saber el futuro que le esperaba a mi futuro hijo.
Ran se encargó de llevarme a médico para hacerme exámenes, decía que no quería ponerme en riesgo al momento de embarazarme y que quería que todo saliera bien.
Rindou por otro lado andaba comprando ropa de bebé y juguetes, estaba muy emocionado de ser tío, hasta se leyó un libro de paternidad junto a Ran, eso de Rindou no me sorprendía pero de Ran si.
- Para esta noche tengo que sacar la basura, no creo que llegue a casa - me dice Rindou mientras lo ayudaba a peinarse.
- Esta bien, yo tengo una cita con Ran esta noche, iremos a cenar - le dije a Rindou.
Ran entro a la habitación y deposito un cálido beso en mis labios.
- Unos besos familiares ¿o que? - dice Rindou al ver que Ran me besó.
- Tú cállate idiota - le responde Ran molesto.
- Tú mujer, mi mujer, nuestra mujer - Rindou salió corriendo de la habitación antes de que Ran le diera un golpe.
Moría de risa cada vez que se peleaban, Rindou siempre hacia enojar a Ran.
- Te compré este vestido que hace juego con mi traje, póntelo hoy para la cena - besó mi cuello - Iré a ver unas cosas a la oficina y luego te pasaré a buscar - caminó hasta la puerta y salió de la habitación dejándome con la bolsa del vestido en mis manos.
Abrí la bolsa y era un vestido negro apegado al cuerpo, era muy corto pero eso no me importaba.
Me comencé a preparar para mi cita de esta noche, tomé una ducha e hice todas mis cosas para estar lista a la hora que quedé de verme con Ran.
Ran me envió un mensaje al celular avisándome que ya estaba fuera de la mansión y que saliera cuando esté lista. Salí de inmediato para subirme al auto de Ran.
- Te ves preciosa ___, conozco perfectamente tus medias para comprarte ropa - Ran tomó mi mano y la besó.
- Tú también te ves precioso Ran - me acerqué para darle un beso en los labios.
Ran condujo al restaurant donde había hecho la reserva esta noche, era nuestro restaurant favorito.
Desde la ventana del lujoso auto de Ran podía ver el cielo estrellado y la luna que estaba gigante, el viaje era de aproximadamente 35 minutos.
Al llegar al restaurant Ran se bajó del auto y me abrió la puerta para que me baje.
Me aferré a su brazo y entramos, sentía como todas las miradas se posaban en mi y en Ran, al llegar a la entrada Ran le dice a la persona que estaba en la puerta recibiendo a los clientes que él tenia una reserva.
El hombre reviso la computadora y nos guió hasta la mesa que Ran había reservado, era en la terraza y tenia vista al precioso cielo estrellado, habían luces cálidas y eso hacia que el ambiente fuera muy agradable.
Con Ran pedimos nuestra comida y comenzamos a hablar cosas triviales, planes a futuro y un montón de cosas, siempre teníamos temas de conversación y eso era algo que siempre me gustó de nuestra relación.
- Hoy no dormiremos en casa - me dice Ran mientras levantaba su copa de vino para beber.
- ¿Y en donde vamos a dormir entonces? - lo miré dudosa.
- Reservé una habitación en un hotel - posó su mano sobre la mía.
- Siempre me tienes que sorprender Haitani, por eso me encantas - respondí con un tono coqueto.
- Tú también me encantas ___ - me esbozo una de sus bellas sonrisas perezosas.
Terminamos de comer y nos quedamos un rato más hablando y riendo, nos habíamos puesto a recordar viejos momentos.
- Tengo frio, no traje nada para cubrirme - le comuniqué a Ran.
Él se quito su saco y me lo puso encima de los hombros.
- Será mejor que nos vayamos, se puso muy frio y no quiero que te agarre un resfriado.
Ran pago la cuenta y nos fuimos al auto, fueron unos 10 minutos de viaje hasta el hotel.
Llegamos al hotel y con Ran fuimos a la recepción para que nos entregaran las llaves.
El hotel se veía demasiado lujoso, sabía que a Ran le había costado mucho dinero pero eso para él era lo de menos, el dinero le sobraba.
Fuimos a la habitación que era bastante grande, la recorrí entera, tenía un jacuzzi y una vista preciosa hacia la ciudad.
- Ran... está precioso - estaba impactada por todo lo que Ran me ha dado esta noche.
- Que bueno que te haya gustado, ¿te quieres meter al jacuzzi conmigo? pedí champagne y unas fresas bañadas en chocolate - me dice mientras enciende el jacuzzi.
Esperamos la champagne con las fresas bañadas en chocolate y nos metimos al jacuzzi.
Esta noche había comido demasiado junto a Ran, no era tan habitual que comiéramos tanto pero yo disfrutaba cada momento a su lado.
Ran se veía demasiado sexy en el jacuzzi, la espuma sobre su cuerpo tatuado y marcado me volvía loca.
Me acerque a Ran y él me comenzó a dar las fresas en la boca, se sentía mucha tensión sexual pero ninguno hacia nada, podía sentir el miembro de Ran erecto bajo el agua.
- ___ me encantas desde que te conozco - Ran acaricia mi mejilla mientras me ve a los ojos.
- Y tú a mi Ran, quiero estar siempre a tu lado... - puse mi mano sobre la mano que Ran tenia sobre mi mejilla.
- Siempre cuidare de ti - pega su frente a la mia.
- Yo también siempre cuidare de ti Ran, por ti haría cualquier cosa - le respondí.
- Yo también haría cualquier cosa por ti, eres mi vida ___ - me besó los labios.
Amaba sentir sus labios junto a los míos.
- Salgamos de jacuzzi - separó nuestros labios.
- Un rato más Haitani - bajé mi mano para rozar su miembro.
- ___~ - dijo con su voz ronca.
Volví a juntar nuestros labios, el beso se intensificó y aproveché para introducir mi lengua dentro de la boca de Ran.
